Leve suba del dólar, en un día de pocas operaciones
Cerró en $22,33 pese a que el BCRA elevó la tasa de las Lebac; impacto en precios
El dólar volvió a subir ayer, pese a que el Banco Central, buscando reafirmar su señal de aumento de tasas, operó con Lebac pagando un rendimiento del 38% anual, 3,45 puntos por encima del viernes pasado. El billete cerró a $21,97 en el segmento mayorista y a $22,33 en el minorista, cinco centavos más que el viernes. Fue en una rueda con un bajo volumen de operaciones, algo que, según los analistas, revela que el mercado se resiste a convalidar el actual nivel del dólar. Por otra parte, la devaluación ya impactó en el precio de algunos productos.
El dólar volvió a moverse al alza ayer, pese a que se trataba de la última rueda de vigencia de la desdolarización forzada de las entidades financieras y a que el Banco Central (BCRA) reforzó su señal de tasa al mercado al operar sus títulos de deuda (Lebac) con rendimientos del 38% anual, 3,45 puntos por encima del nivel al que se negociaban el viernes.
El billete cerró a nivel mayorista a $21,97, es decir, 16 centavos (0,77%) por encima de su precio del viernes, día en que había caído 5% ante la batería de medidas anunciadas por el Gobierno para tratar de frenar su escalada. Su promedio de venta a nivel minorista quedó a $22,33, según el relevamiento del BCRA, 5 centavos arriba de su precio del viernes.
En el segmento de grandes negocios la mitad del recorrido alcista lo hizo en los últimos 3 minutos de la rueda de operaciones. Esto provocó un déjà vu en los operadores, que recordaron dos operaciones realizadas también contra reloj el pasado jueves que lo llevaron a marcar el récord de $23 y al peso devaluarse 8% ese día.
Pero lo que más inquietó, además del salto al filo del cierre, fue el escaso monto de operaciones: US$575 millones, 28% inferior al registrado el viernes y 41% inferior al promedio operado durante la semana pasada, lo que supone a su vez el volumen más bajo desde mediados de abril.
Para analistas y operadores esta retracción revela que el mercado se resiste a convalidar el actual nivel del dólar, a pesar de que el Gobierno lo evaluó (y algunos analistas) como de “equilibrio”.
Es que la tendencia al rebote en la divisa (aunque podía estar justificada en el comportamiento al alza que también tuvo en el resto de la región y casi todo el mundo) se registró cuando el Gobierno “oficializó” el mayor premio de tasa a quienes se animaran a mantener inversiones en pesos y con parte de la oferta de divisas “obligada” por una circular del BCRA.
Con la tasa, aluden a las operaciones al 38% anual que el BCRA realizó con Lebac a vencer en junio (45 días), ya que, a diferencia de los pases que solo pueden operar los bancos, son títulos abiertos a inversores y que se transan regularmente en el mercado. “La del 40% de la que tanto se habló se podría decir que era ‘virtual’. Esta es real”, apuntó un agente para explicar el valor conferido al movimiento del BCRA con esa tasa. Pero “todo indica que ni así pudieron frenar la sangría, por ahora”, observó Diego Martínez Burzaco, de MB inversiones. “Los anuncios generaron una especie de tregua, pero se demostró que es frágil. Si el Congreso aprueba mañana la ley de financiamiento productivo puede dar una señal tranquilizadora”, evaluó Javier Marcus, gerente de negocios de Southern Trust.
Al combo de señales preocupantes se sumó el renovado castigo que sufrieron las acciones (cayeron del 3 al 5% en Nueva York y perdió 3% la Bolsa porteña) con los bancos nuevamente en el centro de la tormenta por el ajuste dispuesto del 30 al 10% en sus tenencias de dólares.
A eso aportó un informe de Moody’s que alertó que algunas empresas argentinas afrontan un “alto riesgo” de falta de liquidez cuando deben afrontar en lo que queda de este año y el próximo fuertes vencimientos de deuda. La calificadora puso el foco en compañías de petróleo y gas, telecomunicaciones y materiales de construcción que implementaron “importantes programas de inversión de capital que requerirán fondeo y han incrementado significativamente su exposición a la deuda en dólares en los últimos años” y las dificultades que les acarrea la suba del tipo de cambio.
También resultaron fuertemente golpeados otra vez los bonos de la deuda, lo que provocó que el riesgo argentino escale 3,4% para escalar a un nuevo máximo de 471 puntos, uno más que el jueves, antes del paquete oficial de medidas, tras marcar otra vez un diferencial negativo con el resto de los de la región y los emergentes.
“La sensación es que Wall Street, que ya venía recelando, se nos dio vuelta. Estoy sorprendido por la velocidad con que lo hizo. Evidentemente están cuestionando el sendero de reducción del déficit a mediano y largo plazo y reclamando para hoy lo que antes esperaban para un segundo mandato de Macri. Esto deja a la vista que interpretan que las medidas del viernes son aún insuficientes”, alertó el analista Germán Fermo, director de MBA/Ucema.