En el “Lollapalooza de los libros” los jóvenes buscan derribar tabúes
Sexualidad, feminismo, aborto, enfermedades son los principales temas que trata la literatura juvenil de la generación BBB: booktubers, bookstagrammers y bloggers; este fin de semana, referentes del género desembarcan en La Rural
“La Feria es el Lollapalooza de los libros”, le dijo una chica a Cristina Alemany, responsable de las actividades de la movida juvenil del encuentro del libro. La apreciación refleja el crecimiento sostenido de la participación de los jóvenes en la Feria, quienes suelen adueñarse de los pabellones y participar activamente de las diferentes propuestas.
Ya no hay dudas: los chicos sí leen y pueden ser muy exigentes con sus lecturas, con sus búsquedas. Y sobre todo no les escapan a los temas que para muchos pueden resultar incómodos. Al contrario. En cada mesa de bloggers o bookstragrammers, en los debates del nuevo espacio Orgullo y Prejuicio, alzaron bien alto las voces. Y el Encuentro Booktuber que se realizará hoy, desde las 18, en la Sala José Hernández, con invitados internacionales como la mexicana Claudia Rodríguez, los españoles Javier Ruescas y Andreo Rowling, no será la excepción.
“Creo que los tabúes claramente reflejan los prejuicios sociales y a medida que algunos derechos son conquistados empiezan a ser hablados en voz alta. No es casualidad tampoco que la mayoría comience a tratarse en un género tan maravilloso como es el YA (Young Adult). Hace unos diez años, por ejemplo, las orientaciones sexuales no heteronormativas eran susurradas por todos: se hablaba de ellas con un desconocimiento muy grande porque, justamente, estos tabúes silencian y discriminan”, reflexiona la bloguera Flor Méndez, quien en junio próximo publicará junto a Bel Riddle una novela que tendrá un protagonista asexual, y explorará las relaciones de pareja no heteronormativas, la violencia de género y el machismo, en hombres y mujeres. “Hoy, al estar sancionada la ley de matrimonio igualitario, el tabú quedó atrás –sigue–. Queda mucho camino por recorrer con respecto a temáticas como el aborto, la salud mental o los géneros, pero confío en que dentro de unos años vamos a poder romper con esa barrera-tabú que separa lo marginado de aquello que recibimos con los brazos abiertos”.
Cada vez son más las editoriales que se animan a encarar temas bien diversos. “Para ser honesta, cuando llegó Dos chicos besándose, de David Levithan, a la editorial tuve muchas dudas. Me pregunté cómo reaccionarían los comerciales, qué pasaría con los clientes del exterior, qué pondríamos en la tapa. Pero frente al prestigio del autor y a la insistencia del editor dije sí –recuerda Marcela Luza, directora editorial de V&R Editoras–. Hoy somos un sello icónico en esta temática”, dice, con referencia a una biblioteca que incluye títulos como Qué nos hace humanos, de Jeff Garvin; Cómo pedir un deseo, de Ashley Herring Blake; Todo puede suceder, de Wil Walton; La lógica inexplicable de mi vida, de Benjamin Alire Sáenz, entre otros.
El propio autor madrileño Javier Ruescas (ver aparte), que estará presente en el Encuentro Booktuber, reconoce que no existen ya tabúes: “Los lectores y sus autores tienen la mente más abierta para hablar de todo y representar cualquier realidad”. Asimismo, Rowling, la autora española que también será parte de la cumbre de hoy, reconoce que “los jóvenes siempre han buscado temas en los que puedan sentirse identificados y definitivamente no creemos en los tabúes”.
Erika Wrede es bloguera y cree que cada vez son menos los temas que los jóvenes consideran prohibidos. “La sociedad se anima a cosas que hace no mucho hubieran considerado innombrables y esto se ve cada vez más reflejado en el tipo de literatura YA que se publica”. Facu Tedesco, coconductor junto con Georgina Dritsos y Leo Teti del programa de radio dedicado a la literatura juvenil Subite al pony!, cree que es importante que en la literatura se hable de lo que hoy atraviesa a la sociedad. “Estamos progresando como personas, y eso se nota en los escritores que a la hora de escribir se la juegan por referirse al feminismo, sexualidad, aborto. Aunque falta para llegar a una sociedad libre, estamos en camino”.
Matías Gómez, elegido en 2015 el Booktuber de la Feria, está convencido de que la gente decide qué es tabú o no. “Los libros están para ser interpretados por los lectores; hablan sobre el mundo y son una forma de conocerlo, pero está en cada uno la posibilidad de que esos temas sigan vedados o dejen de existir”.
Un tabú ya no es lo mismo que antes. “En mi época, cuando se decía tabú era para referirse al sexo, la homosexualidad, el aborto, el embarazo juvenil, el incesto –reflexiona Alemany–. En la charla juvenil del Encuentro de Bloggers quedó claro que para los chicos estos temas son comunes y corrientes, los hablan en la escuela, en casa, en el colectivo. Y los leen. Muchos best sellers tratan estos temas como Qué nos hace humanos, que tiene un o una protagonista de género fluido [se refiere a personas que se pueden identificar en diversas identidades sexuales]. O Si yo fuera tu chica, que trata la historia de una chica trans de una manera adulta y dramática. Libros como Prohibido y El piso mil tratan el incesto. Y hay nuevos títulos sobre enfermedades mentales (Mensajes en las paredes del baño), abusos, sobre el suicidio. El reclamo es que faltan más libros sobre embarazo juvenil, maternidad juvenil y aborto, temas en boga que estos lectores quieren leer de la mano de autores y sellos que los comprenden”.
En el Encuentro de Bookstagrammers se hizo oír un pedido: “Basta de historias de salir del closet. Eso ya fue: ahora queremos relaciones entre dos chicos o dos chicas, pero de forma natural, no como la lucha interna para contárselo al mundo”, decían la semana pasada en la Feria. “En el exterior varios de estos temas ya están en marcha”, retoma Alemany y asegura: “No tardarán en llegar y, cuando suceda, no habrá barrera que la literatura juvenil no haya derribado. Mi yo adolescente expresa su más sana envidia”.