Consejos para prolongar la vida del auto i
Uno de los costos más elevados en el mantenimiento del vehículo son las reparaciones que se deben hacer por la falta de los servicios adecuados; Alejandro Stofenmacher nos da algunos tips que ayudan a que el coche dure más y se rompa menos
¿Cuál es la importancia de los manuales del automóvil y el de servicios?
Ya se trate de un automóvil nuevo o usado, siempre se deben leer los manuales de fábrica, ya que contienen información para prolongar la vida útil de la unidad y para solucionar problemas. Por ejemplo, ahí aparecen los períodos de mantenimiento recomendados por el fabricante y que, siguiéndolos, evitan mayores gastos futuros debidos a desperfectos producidos por falta de mantenimiento. Al fin de cuentas, estos manuales son documentos que fueron elaborados por ingenieros que han pensado y probado todas esas recomendaciones.
¿Es conveniente utilizarlo en todo momento?
Lo ideal sería tratar de evitar los viajes muy cortos, de pocas cuadras o de pocos minutos, ya que los arranques en frío son duros para los motores: afectan su rendimiento y aumentan los consumos. Además, ese tipo de viajes usualmente acorta la vida útil de los caños de escape y los silenciadores a causa de la condensación que se produce cuando se arranca en frío. Sin embargo, también hay que tener en cuenta que el auto se debe utilizar por lo menos una vez a la semana, ya que los vehículos que están parados por largos períodos de tiempo generalmente presentan problemas.
¿Cuáles son y cómo controlarlos?
Es muy importante controlar los siguientes fluidos en forma regular: líquido refrigerante/anticongelante; aceite del motor y de la caja de velocidades; líquido de la dirección asistida o hidráulica, y líquido de frenos. De éstos, no solo es vital controlar los niveles, sino que también es necesario observar el color y estado de esos fluidos. Algunos de ellos se pueden ver a través de los tanques o recipientes donde están contenidos, que tienen marcas que indican el nivel ideal. Otros fluidos se miden a través de varillas (como el aceite del motor) que poseen también marcas de nivel.
¿Cada cuánto deben reemplazarse esos fluidos?
Los líquidos de freno, de la transmisión y el refrigerante/ anticongelante deben ser reemplazados cada dos años (los automóviles más nuevos usualmente permiten intervalos de recambio más prolongados). ¿Por qué se deben cambiar? La razón es sencilla y tiene que ver con que los aceites y fluidos más viejos no lubrican o enfrían las partes del motor en forma adecuada y lo dejan desprotegido ante condiciones severas, especialmente durante los inviernos fríos y los veranos muy calurosos, lo cual puede generar problemas en la mecánica.
¿Y en el caso del aceite del motor?
Los cambios de aceite se deben efectuar en forma regular, porque con eso se mejora la performance del auto, se gasta menos combustible y se protege el motor. Los cambios recomendados varían entre 5000 y 8000 kilómetros o cada 3 a 6 meses, dependiendo del tipo de aceite que se utiliza y de las condiciones de uso de la unidad. Nuevamente: se recomienda leer el manual para saber cada cuánto tiempo se deberían hacer estos recambios. Si las condiciones de manejo a las que se somete el vehículo son duras o extremas, es conveniente cambiar el aceite más a menudo.