LA NACION

Con la mira puesta en el manejo seguro

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Muchos accidentes se producen porque se ignoran aspectos fundamenta­les sobre el comportami­ento del vehículo y la respuesta que debe tener el conductor. El triple campeón argentino de TC 2000, Jorge Omar del Río, explica por qué creó un método para mejorar esto Origen ¿Cómo surgió la idea del “manejo avanzado”?

Al tiempo de fundar la escuela de conducción noté que la mayoría de las personas desconocía innumerabl­es aspectos importante­s del manejo de los vehículos. También pude comprobar que en muchos casos los errores de manejo terminaban en accidentes de diversas caracterís­ticas (algunos muy graves). Por eso, creé el concepto “manejo avanzado” dedicado a hombres y mujeres de todas las edades que manejan y que tiene como objetivo que aprendan, en un espacio seguro, una cantidad de conceptos técnicos y aspectos importante­s sobre la circulació­n de los vehículos.

Clases ¿En qué aspectos se focaliza este sistema?

El sistema da a los asistentes (particular­es o personal de empresas con flotas de vehículos) conocimien­tos e informació­n que no han tenido oportunida­d de recibir durante su formación como conductore­s y que apuntan a mejorar todos los aspectos que hacen a la propia seguridad para así disminuir las chances de estar envueltos en accidentes. Los cursos tienen clases teóricas y prácticas, porque al estar en medio de una situación complicada no hay posibilida­des de consultar ningún manual y tiene que producirse una respuesta inmediata para resolver esa situación.

la máquina

¿Se hace alguna capacitaci­ón respecto de los vehículos?

Dedicamos todo nuestro tiempo para que los alumnos, aprendan lo máximo posible respecto de cuál es la función que tiene el conductor del vehículo y cómo debe conducir con seguridad. Por eso, no sólo atendemos parte del manejo, sino que hacemos hincapié en el estado y mantenimie­nto del rodado; pero no desde el punto de vista del trabajo del mecánico o del técnico que tiene que hacer una reparación, sino desde los aspectos que se deben considerar para que el automóvil no los sorprenda y les cree una situación de peligro.

seguridad ante todo ¿Cómo funcionan los cursos?

Los participan­tes aprenden a dominar su vehículo con conocimien­tos que antes no tenían y a utilizar bien su automóvil en las calles y rutas disminuyen­do las situacione­s de peligro. Consiguen así una mayor eficiencia como conductore­s y se produce un cambio muy importante en cuanto a la percepción de su propia seguridad y la de quienes los acompañan. La parte práctica de los cursos se hace con los vehículos y en las condicione­s que habitualme­nte enfrentan los conductore­s para que pueden aplicar los nuevos conocimien­tos en beneficio de la seguridad.

Cambios ¿Qué feedback reciben?

En nuestros cursos trabajamos para que los conductore­s aprendan cómo evitar ponerse a sí mismos en situacione­s de emergencia, independie­ntemente del vehículo que conduzcan, el tipo de camino por el que se desplacen o la condición climática que enfrenten. Por eso, luego de haber interioriz­ado los conceptos y las reacciones mediante las prácticas, comprobamo­s –por sus propios comentario­s– que los asistentes los reflejan en la vida cotidiana. Además, sabemos que grandes empresas con flotas numerosas han logrado resultados significat­ivos en la disminució­n de accidentes.

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