La reunión con Lagarde se transformó en un encuentro informal, pero el FMI volvió a expresar su satisfacción
Posaron juntos para la foto y charlaron un rato; la titular del Fondo elogió al equipo argentino
QUEBEC.– El encuentro bilateral que iba a reunir al presidente Mauricio Macri con la titular del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, se transformó finalmente en un cruce informal mientras esperaban para saludar al anfitrión de la Cumbre del G-7, el canadiense Justin Trudeau. En un salón aterrazado del hotel Le Manoir Richelieu, la directora del FMI le comunicó a Macri que el 20 de junio el board del organismo terminará de aprobar el acuerdo por 50.000 millones de dólares que cubrió las necesidades financieras del organismo y proyectó una reducción más acelerada del déficit fiscal.
“El presidente Macri y yo sostuvimos una reunión muy constructiva. Reiteré mi respaldo a las importantes reformas anunciadas por el ministro Nicolás Dujovne y por el presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger”, enfatizó luego Lagarde a través de un comunicado, que sirvió a su vez para suavizar las interpretaciones por los cambios de planes.
Fue la primera reunión tras acordar el anuncio del préstamo, que implicará la supervisión de las metas prometidas por el gobierno argentino para reducir la dependencia del financiamiento externo.
“Consideramos que el plan económico de las autoridades fortalecerá la economía argentina a corto plazo y estimulará el crecimiento y la creación de empleo de cara al futuro”, enfatizó el comunicado del FMI.
En el salón, frente a ventanales que le regalaban una vista sobrecogedora del río San Lorenzo, el presidente argentino y Lagarde se cruzaron en un salón del hotel Le Manoir Richelieu, y se saludaron frente a las cámaras. A los pocos minutos, la directora del FMI reproducía en las redes que estaba “contenta de encontrarse con el presidente Macri”, junto a la foto del saludo.
A Lagarde el encuentro le alcanzó para suspender la reunión bilateral que había sido planificada para cuatro horas después.
Junto a la fotografía de ambos, el FMI le sumó después un comunicado en el que Lagarde insistió en la nueva prédica: “Como ya he señalado, la protección de los pobres y los más vulnerables es un componente crítico del plan, enfoque que cuenta con todo mi apoyo. Asimismo, me siento alentada por los esfuerzos del Gobierno por eliminar las disparidades entre hombres y mujeres en la Argentina y avalo plenamente sus planes en ese sentido”, dijo.
Macri aseguró que Lagarde se había mostrado “fascinada” por la capacidad técnica del equipo de negociadores argentinos, y que le ratificó que los accionistas del organismo habían transmitido su respaldo al entendimiento anunciado esta semana.
“Aguardo con ansias la oportunidad de continuar este diálogo en el contexto de la reunión de los ministros de Hacienda y los presidentes de los bancos centrales del G-20 que tendrá lugar en Buenos Aires, en julio”, agregó Lagarde, en referencia a su próximo viaje a la Argentina.
El Presidente también aprovechó para reunirse con la consejera del Banco Mundial Kristalina Georgieva y con el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), José Ángel Gurría.
La Argentina tiene garantizado el ingreso a la OCDE, según le transmitió Gurría, pero existe una polémica entre Europa y Estados Unidos por los países que la acompañarán. Como las incorporaciones son por grupo, hasta tanto no se resuelva el debate por los socios de la Argentina, la puerta está cerrada.