Mundiales en territorio europeo, una deuda para la Argentina
En el Viejo Continente rinde bastante menos que en América y nunca venció a un poderoso
Luego de 12 años, la Copa del Mundo de fútbol vuelve a donde vio la luz, Europa. Y el seleccionado argentino regresa a un continente que siempre le ha resultado cuesta arriba en el certamen.
Al seleccionado albiceleste le va claramente mejor en América, donde obtuvo 75,7% de los puntos que disputó, que en el Viejo Continente, donde cosechó 51,3% (esto, considerando siempre dos unidades por victoria, como fue la distribución hasta Estados Unidos 1994). En Europa, donde jugó
36 partidos, la Argentina ganó 14 y perdió 13, e hizo 9 tantos más
(54) que los que recibió (45). En su propio continente, en cambio, jugó 33 veces, venció en 23 y cayó en apenas 6, con una diferencia de +34 en goles (65 contra 31).
Además, de las cinco finales de mundiales que protagonizó, cuatro de ellas tuvieron lugar en América (Uruguay 1930, Argentina 1978, México 1986 y Brasil
2014), y la restante, al otro lado del Atlántico Norte (Italia 1990). Sus dos conquistas, por supuesto, se dieron en el Nuevo Mundo.
Tanto le cuesta Europa al equipo argentino que jamás venció allí a uno de los poderosos locales, sobre 12 encuentros. Es cierto que eliminó a dos (el anfitrión Italia en 1990 e Inglaterra en Francia
1998), pero con empates y penales. En los partidos en sí nunca se impuso ahí a Alemania (2 igualdades y 2 derrotas), Italia (2 y 1), Inglaterra (1 y 1) ni Países Bajos
(1 y 2). Con Francia nunca se enfrentó en esa porción del planeta, y sí doblegó a España (un triunfo), pero en Inglaterra 1966, cuando La Furia estaba lejos de ser uno de los seleccionados de gran talla.
La Argentina encara otro mundial en Europa, el 9º allí sobre los
17 de su historia. Y entre los múltiples desafíos de Lionel Messi y compañía figura uno estadístico: rendir en el Viejo Continente como lo hace en el propio.