Cómo es el portafolio de
Escapar al riesgo
En momentos de alta volatilidad no está de más recordar la frase del reconocido economista Paul Samuelson: “Invertir debería ser como ver la pintura secarse o el pasto crecer. Si lo que quieres es exaltación, es mejor agarrar algo de dinero e ir al casino”. En este sentido, el contexto mundial llama a tener un portfolio más conservador y a ponerse en modo “risk- off” ( posiciones poco riesgosas).
Posiciones líquidas
Las posiciones líquidas y cortas en duración permiten afrontar de mejor manera los tiempos que corren. Los plazos cortos de Lebac con tasas que se acercan al 50% anual resultan una buena opción; también los instrumentos asociados al CER, como el AF19 ( llamado bono gatillo 2019) con tasas reales por arriba del 10% anual, permi- ten preservar el valor del dinero. En este sentido, una alternativa para el pequeño ahorrista que le interese capturar parte de esa renta, es buscar un fondo de inversión T+ 1 clásico con participación en dichos instrumentos.
Cuestión de necesidad
Por otro lado, algo interesante para desarrollar en el portafolio de cada inversor es relacionar los pasivos futuros con los activos que lo componen. De este modo, si se puede identificar cuándo se necesita el dinero, se puede asociar una inversión óptima de acuerdo a ello. Por ejemplo, un fondo de money market o una caución en pesos a 7 días puede servir para calzarse con el vencimiento de una tarjeta de crédito, mientras que si se va a realizar una operación inmobiliaria, Letes en dólares o un fondo común en dólares de corto plazo sería lo recomendable.
El equilibrio ante todo
Cómo conclusión, hay que desensillar hasta que aclare, las posiciones líquidas y cortas permitirán estar preparados a la hora de que se revierta la tendencia y volvamos al modo “risk- on”. Se recomienda buscar un balance de tasa fija, tasa real y moneda que deje cómodos a los inversores, para tomar decisiones racionales en momentos de alta volatilidad.