Pidieron 14 años de prisión por “emoción violenta” para la mujer que mató al rugbier
El fiscal consideró que la acusada actuó alcoholizada y motivada por una discusión con su novio al salir de un boliche
MENDOZA.– Aunque se preveía que el fiscal que lidera la causa contra Julieta Silva, la joven mendocina de 30 años acusada de atropellar mortalmente a su novio, el rugbier Genaro Fortunato, de 25, iba a solicitar la pena de prisión perpetua contra la mujer, finalmente decidió pedir 14 años de cárcel efectiva, al considerar que actuó bajo un estado de “emoción violenta”.
Esa fue la postura que tomó el funcionario judicial Fernando Guzzo ante el tribunal durante la etapa de alegatos en el debate oral y público. Así, frente a los jueces Rodolfo Luque, Julio Bittar y María Eugenia Laigle, Guzzo solicitó que Silva sea condenada por homicidio simple con dolo eventual por emoción violenta. Además exigió que esa sentencia sea cumplida en prisión, no con detención domiciliaria.
“No podemos dibujar una culpa donde no la hay. Este Ministerio Público no le va a pedir a Julieta Silva la prisión perpetua, porque queda todavía un eslabón, y para eso necesitamos un agravante, que va a terminar beneficiando la realidad de Julieta. Vamos a acusar por el artículo 80, inciso 1, en relación con el artículo 81 y 82 del Código Penal, sobre la emoción violenta: porque toda la noche transcurrió normal, hasta ellos salen bien del boliche, se abrazan, se acompañan, pero en los 200 metros hasta el auto algo pasó. No sabemos qué pasó, si de algo se enteró, tal vez de que Agostina Quiroga, la ex de Genaro, estaba embarazada, no lo sabemos. Pero todos los testigos aseguran que hubo una discusión. Lo que me demuestran los hechos es que esto provocó una reacción súbita en una mujer que estaba alcoholizada, que no tuvo frenos inhibitorios”, dijo Guzzo.
“Es una mujer joven, con un nivel de instrucción importante, ya que terminó el secundario, con actividad como comerciante, sin antecedentes penales, separada y con dos hijos. Entendemos que su enojo, su ira, fue lo que provocó el desenlace, una acción homicida y claramente dolosa”, agregó.
El fiscal reclamó al tribunal que en el momento de dictar sentencia deje sin efecto los alcances de la prisión preventiva en su modalidad domiciliaria y ordene la detención en un establecimiento carcelario.
La hipótesis principal del caso es que esa noche Julieta y Genaro salieron del bar La Mona, en la localidad mendocina de San Rafael, discutiendo y alcoholizados. Luego ella subió a su Fiat Idea, arrancó y no dejó que Genaro subiera, por lo que al acelerar, el chico cayó sobre el asfalto. Segundos después, la joven volvió haciendo una U y, sin cambiar el rumbo, pasó con el auto por encima del cuerpo de su novio, que fue arrastrado unos metros.
Julieta no llevaba puestos los anteojos que le habían sido recetados, por lo que afirmó que no vio lo que ocurría y pensó que se trataba de un pozo.
La querella, en tanto, pidió una pena de 20 años de prisión por “homicidio simple”.