LA NACION

“Lo apuñalé cumpliendo una misión divina, de Dios”

Oliveira, el agresor de Bolsonaro, dijo que lo hizo por motivos personales y religiosos

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RÍO DE JANEIRO (AFP).– Adélio Bispo de Oliveira, el hombre que apuñaló al candidato presidenci­al brasileño de ultraderec­ha Jair Bolsonaro durante un acto de campaña en Juiz de Fora, declaró haber actuado cumpliendo “una misión divina, una misión de Dios”, según la informació­n de la policía militar.

Oliveira, de 40 años, explicó a las autoridade­s que salió de su casa con un cuchillo escondido, con la idea de utilizarlo para atacar a Bolsonaro y que llevó a cabo el atentado por motivos personales y religiosos, según publicó Folha de S. Paulo.

De acuerdo con el informe de la policía federal, un oficial lo condujo hasta un edificio público, lo encerró y pidió refuerzos, porque los venían siguiendo una multitud de partidario­s del candidato enfurecido­s, que comenzaron a gritar: “¡Va a morir!”.

“Se requirió el apoyo de varios miembros de la policía para sacar al sospechoso del edificio y trasladarl­o a la estación de la policía federal, porque varias personas querían atentar contra su vida”, señaló el informe. Por la agresión hay por lo menos otro hombre detenido, cuya identidad no trascendió.

Militante del Partido Socialismo y Libertad (PSOL) entre 2007 y 2014, Oliveira publicó en sus redes sociales numerosas críticas a Bolsonaro, de 63 años, que desde el Partido Social Liberal (PSL) lidera las encuestas para las elecciones presidenci­ales del 7 de octubre próximo, con 22% de intención de voto. Según las últimas informacio­nes médicas el candidato deberá permanecer internado por lo menos otros siete días.

De acuerdo con medios locales, en la página de Facebook de Oliveira se encontraro­n publicacio­nes de apoyo no solo a la izquierda de su país, sino también en respaldo de otros políticos como, el presidente venezolano, Nicolás Maduro.

Las publicacio­nes también inclu- yen ataques en contra de la masonería. “Eso es ser comunista, eso es comunismo, pero para la derecha masónica es un crimen de fusilamien­to pasivo”, escribió en la red social sobre Maduro.

Según Folha de S. Paulo, el 5 de julio pasado Oliveira visitó una escuela de tiro de la que son socios dos de los hijos de Bolsonaro: el diputado federal Eduardo Bolsonaro (PSLSP) y el concejal Carlos Bolsonaro (PSL-RJ).

“Todo el mundo en el club está devastado”, dijo Julia Zeneta, asesora de la “.38 Club y la Escuela de Tiro”, consultada por la prensa local.

Por su parte, Juliano Medeiros, presidente nacional del PSOL, desligó a su partido de cualquier responsabi­lidad por los actos de su antiguo militante.

“Queremos que sea juzgado con el rigor de la ley. Parece que es una persona confundida. Si estuviera conectado al PSOL sería mi responsabi­lidad. Como no está afiliado, no creo que sea nuestra responsabi­lidad”, concluyó.

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