El streaming también llegó al boxeo
El mexicano Mauricio Sulaimán, presidente del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), nos dejó perplejos en la convención anual que su entidad celebró en Hollywood, Florida, en 2016, al referirse al hecho más significativo que dejó aquel encuentro. Tal calificación fue adjudicada a un elemento inesperado: el teléfono. Y Sulaimán, con una respuesta irónica, no se equivocó.
A estas horas, en que HBO – señal de cable que lideró la televisación de este deporte por casi cuatro décadas– prepara para el 8 de diciembre venidero su despedida y su última función, el mundillo pugilístico se conmueve pero por otro tema: las estridencias producidas por la aparición de DAZN (“Da Zone”), sistema de streaming, aplicable en dispositivos de telefonía celular Android 4.40, con una calidad de imagen HD 1080, que (ya) garantizó la producción de 80 festivales de boxeo de primer nivel, inmersos en la distribución de diversos deportes para 2019.
Es decir, no habrá tiempo para el duelo y las reflexiones por la “defunción boxística” del célebre HBO, sino que la intriga y los acertijos sobre lo que brindará el “nuevo sistema” ha ganado todo tipo de espacios, provocando además una apertura hacia contrataciones de boxeadores, a modo de libro de pases, entre organizaciones y canales.
Al Haymon, el promotor más poderoso, “fichó” al filipino Manny Pacquiao, quien el 13 de enero próximo, expondrá el cetro welter (AMB) ante el estadounidense Adrien Broner, en Nueva York, por el canal Showtime.
Eddie Hearn, responsable pugilístico de DAZN, es un inglés de 39 años talentoso y arrogante. Hijo de Barry, un promotor de otros tiempos y otros métodos, Eddie promovió combates en estadios de futbol británicos y allí, con la presencia de Anthony Joshua, el campeón de los pesados, reunió entre 80.000 y 90.000 espectadores por reunión.
No dejó buena impresión en sus contactos con Bob Arum y Haymon, los principales organizadores norteamericanos, pero sí, en cambio, efectuó una alianza ideal con Oscar de la Hoya y su promotora Golden Boy, fijando un negocio pomposo con su máxima estrella, el mexicano Saúl “Canelo” Alvarez, comprometido a realizar 11 peleas a cambio de 365 millones, en un lapso de cinco años. Tal acuerdo no equipara las siderales cifras obtenidas por el ex quíntuple campeón Floyd Mayweather, en un período menor de tiempo.
El argentino Aníbal Miramontes, presidente del Comité de clasificaciones de la FIB, consultado por la nacion, desde Newark, nos adelantó: “Si bien el streaming es mucho más económico que el sistema P.P.V. (evento de pago por abonados al cable), es también más complejo. La ventaja la dará su precio: 9.99 dólares mensuales contra los 70 que cuesta el PPV por cada cotejo, pero los inconvenientes se reflejarán en la calidad del servicio de internet que posea cada comprador y en la practicidad de la conexión del teléfono al televisor, en caso que guste de la visión panorámica que se requiere para apreciar esta disciplina. Además, la base de la programación estará conformada por carteleras europeas y esto –también– constituye una gran incógnita en el consumo del americano”.
“Canelo” Alvarez lo pondrá a prueba el 15 de diciembre, en el Madison Square Garden de Nueva York. Buscará entonces algo más que su tercera corona mundial ante el campeón de los supermedianos (AMB) Rocky Fielding . Intentará convencer a todos aquellos que, aún, dudan sobre la valía y calidad que ofrecen las nuevas propuestas de consumo en este deporte.