Un conocido de la policía que había dado señales
El autor de la masacre de anoche en un bar de California es un exmarine estadounidense de 28 años y se suicidó tras cometer el ataque, informó el sheriff Geoff Dean. Ian David Long utilizó una arma Glock de calibre 45 durante el tiroteo, agregó el sheriff del condado de Ventura, que relató que la policía lo tenía registrado por una serie de episodios menores.
Según Dean, Long tuvo contacto con la policía luego de un accidente automovilístico y también fue víctima de un episodio de violencia en un bar, en 2015.
Más tarde, en abril de este año, la policía acudió a su hogar por una llamada telefónica y lo encontraron actuando de manera “iracunda e irracional”.
Un equipo de crisis con especialistas en salud mental habló con él y lo tranquilizó, por lo que consideraron que no era necesario arrestarlo, explicó el jefe policial en declaraciones a la cadena de noticias CNN.
Long fue encontrado muerto esta madrugada luego del tiroteo en el bar Borderline, en la localidad de Thousand Oaks, en el sur de California.
Según el diario Los Angeles Times, que cita a una fuente de seguridad, el agresor llegó al bar manejando el auto de su madre, y en su ataque también usó un “dispositivo de humo”, aunque esto no fue confirmado por Dean. Autoridades dijeron que el hombre estaba vestido de negro y que no dijo nada mientras disparaba dentro del bar.
Cientos de personas, en su mayoría estudiantes universitarios, huyeron del lugar, algunos rompiendo ventanas y saltando desde un segundo piso.
Long nació el 27 de marzo de 1990 y sirvió en el Cuerpo de Marines entre agosto de 2008 y marzo de 2013. Vivía con su madre en un barrio residencial llamado Newbury Park, a menos de 10 kilómetros del bar de Thousand Oaks.
Para los vecinos, sus peores sospechas se habían hecho realidad.
“Claro que había señales”, contesta Donald J. McLeod, el vecino de 79 años cuyo patio trasero linda con la casa de una planta en la que vivía Long. “Sobre todo, las discusiones con su madre –explica–. Era un tipo volcánico”. Los enojos ya eran intensos antes de que el joven se alistara en los marines, pero la situación se volvió preocupante después de volver de esa experiencia. Durante una época el joven abandonó la casa.
Nellie Wong 21 años “Menos mal que no me vio. Me quedé quieta, dura, dejé de respirar. Mi corazón estaba latiendo muy rápido. Me lastimé las rodillas al tirarme al suelo cuando oí los disparos”
Teylor Whittler 19 años “Llamé a mi padre y le dije: ‘Hubo un tiroteo, estoy bien. Estoy escondida’. Fue realmente aterrador. Parecía que sabía lo que estaba haciendo”
Erika Sigman 19 años “Tuvimos miedo de que [el tirador] fuera hacia el estacionamiento y ahí..., ¿qué? Mis amigas y yo estamos bien, con pequeñas lastimaduras, nada más”
Savannah Stafseth 20 años “De repente escuché: ‘¡al suelo! ¡al suelo!’. Fue todo tan rápido, tan ruidoso. Un balazo tras otro. El lugar estaba lleno. No hay palabras. Esas personas [que murieron] son amigas. No es justo, simplemente no es justo”