La forma del agua
Rectangulares, de profundidad uniforme y con guiños de color: estas son las características que predominan hoy en las piletas. Pero también se imponen las que se integran en los espacios interiores y las que incluyen servicios de spa. Más ideas para moder
Opciones para actualizar o construir piletas, con prestaciones de spa hogareños y hasta miniplayas naturales. Tonos, materiales y características para disfrutar al máximo de estos refugios de frescura.
Apenasempiezanlosdíasde calor, el disfrutar de jornadas en la pileta se desea cada vez con más ganas. Por eso, en la primavera muchos piensan en el mantenimiento que necesitan sus piscinas, cómo renovarlas o qué formato y dimensiones deberían darle a su nuevo espejo de agua. La tendencia actual posibilita diseños diversos, aunque los rectangulares se mantienen en el podio en los últimos años. También crece el recurso de tener estos espacios en el interior y hasta compartiendo metros con el living.
Una de las decisiones importantes a tomar es qué funcionalidad tendrá la piscina. ¿Será deportiva o de diversión? “Para responder al primer objetivo se utiliza el formato angosto y largo, e incluso se puede poner un sistema contracorriente. Con tan sólo tres metros de longitud es posible entrenar. En cambio, para la segunda variante se puede combinar la pileta con minipiscinas en un extremo. Quien quiera relajarse aún más, tiene la opción de sumar sistemas de cascadas de agua”, explica Carlos García Scardilli, cofundador de Welsi, empresa especializada en la instalación de spas y piscinas.
“Algo importante a tener en cuenta es conocer el sustrato donde se colocará la piscina: en aquellas zonas con napas muy cerca de la superficie existe un gran riesgo de que se quiebre la estructura. Ni hablar si está vacía, pues la romperá la presión externa. Esto se ve en lugares de San Isidro y Vicente López, por ejemplo”, aclara García Scardilli, quien además aconseja el hormigón encofrado para montar la construcción de la pileta aunque señala el uso creciente del aluminio galvanizado.
Actualmente, la medida estándar es de 8 x 4 m, y se tiende a recomen- dar hacerlas de una sola profundidad (suele ser de entre 1,20 a 1,40 m) para que sea más segura y pueda disfrutarla toda la familia. Incluso, se puede contar con una playa húmeda (que tiene apenas unos 20 cm de agua) donde los más chicos pueden jugar tranquilos o hasta es posible poner una reposera para disfrutar del sol.
También se siguen viendo mucho los modelos in/out, claro está, con climatización incluida. Sus pares internas son tendencia y se incorporan en la decoración de los hogares. “Tienen la particularidad de requerir un buen tratamiento del recinto. En el exterior , los vapores que genera la pileta se pierden en el aire, pero dentro pueden dañar los muros, los techos y hasta los muebles. Para que esto no suceda hay que trabajar con el aire acondicionado para secar el ambiente”, observa el experto.
Revestimientos
A la hora de revestir el interior de las piscinas, las venecitas no ceden su reinado. “Es clave que estén bien colocadas y usar una buena pastina; las mejores son las españolas e italianas. Está de moda diseñar un degradé de varios colores. Otro material que funciona muy bien es el porcelanato, que incluso puede extenderse hasta las veredas perimetrales”, describe el socio de Welsi.
Otros dos revestimientos son Agua de Piedra y Microslarium, ambos de la firma Tierras Nuestras. Estos productos están especialmente diseñados para piscinas y pisos de exteriores. El primero es calcáreo y se puede aplicar tanto en piletas nuevas como en el proceso de puesta en valor. Entre sus ventajas se destaca el bajo mantenimiento y que cuenta con una paleta de tonos apacibles. En cambio, el segundo es ideal para solares, pues es atérmico y antideslizante.
Entre las novedades del mercado están los liners. “Son una membrana de PVC que se termosuelda y funciona como un revestimiento e impermeabilizante”, recomienda García Scardilli. Para las interiores, un lujo de diseño es vestirlas con mármol.
Puesta a punto
Todos quieren zambullirse, pero para tener buenos resultados es imperioso respetar los tiempos de cada etapa de la puesta a punto.
“Es importante realizar una buena inspección de la superficie en la búsqueda de rajaduras o microfisuras típicas de los revoques cementicios. Estos defectos producen pérdidas y, al mismo tiempo, en situaciones críticas, posibles problemas de aislación, factor que juega un papel relevante”, observa María Fernanda Domato, responsable de Marketing de Tersuave, marca que cuenta con productos específicos de acabado semimate y con capacidad de sellado de superficies porosas.
“De existir grietas no muy profundas, se puede utilizar algún producto a base de silicona para su relleno y sellado. En cambio, si son más graves hay que recurrir a la masilla elástica, o cementomezcladoconcomponentes sellantes. Siempre se debe respetar el modo de uso y de secado que indique el fabricante”, observa Guillermo Ortega, gerente de Sui Color.
Otro detalle importante antes de empezar la restauración es detectar si la pintura está saltada. “La solución requiere de la utilización de protección para la cara, manos y toda la piel. Se debe fregar con un cepillo la superficie con una mezcla de 50% de ácido muriático y 50% de agua. Luego se enjuaga muy bien toda la pileta con agua fresca”, agrega Ortega.
En caso de detectarse algas u hongos, hay que limpiar la superficie con lavandina. Luego se podrá aplicar la pintura, evitando los días de menos de 5°C o más de 35. Tampoco se debe pintar si se prevé lluvia o al menos altos niveles de humedad durante las 12 horas posteriores a la aplicación.
Desde Sherwin-williams Argentina aconsejan respetar el tiempo de secado de tres horas en condiciones normales de temperatura y humedad. Para el repintado se deben esperar al menos seis. Para el llenado definitivo de la pileta se debe aguardar, como mínimo, siete días en verano y 14 en invierno, otoño y primavera.
Y siempre se puede salir de la clásica paleta de azules y celestes. Hay alternativas de tonos que van desde los amarillos hasta los turquesas, pasando por los colores de la gama del arena y los verdosos.