FMI: la recesión finalizará en el segundo trimestre
El equipo técnico que visita el país está satisfecho con la marcha del plan; da libertad para frenar la baja del dólar
El Fondo Monetario Internacional (FMI), que comenzó anteayer su segunda misión técnica en la Argentina, consideró que la nueva política monetaria impulsada desde la aplicación del renovado Stand-By Agreement (SBA) por el Banco Central (BCRA) está funcionando para estabilizar al peso y controlar la inflación, y anticipó que la economía tendrá una recesión acotada, que terminará en el segundo trimestre de 2019, cuando comenzará un proceso de recuperación gradual, pero ininterrumpido.
La visita del FMI, que durará hasta el viernes y que prevé encuentros también con gremios, académicos y parte de la oposición, se da luego de que el board del organismo multilateral aprobó semanas atrás un acuerdo por desembolsos de US$56.000 millones con el objetivo de limitar la volatilidad cambiaria que sufría el país desde fines de abril y las dudas sobre su capacidad de pago de la deuda. Como contraparte, el Gobierno acordó adelantar la meta de déficit fiscal cero para el año que viene y aplicar una restrictiva política monetaria que impedía el crecimiento de la base monetaria.
Además, se comenzó a aplicar un esquema dinámico de bandas de flotación libre para el dólar, con el objetivo de dar mayor previsibilidad al sistema. Tras un mes de prueba, la divisa norteamericana se encuentra cerca de la banda inferior. Anteayer, el dólar minorista cerró a $36,38 y el mayorista, $35,45, a solo 15 centavos de ese margen. El FMI estimó que la decisión de vender dólares por debajo de la banda y esterilizar o no esos pesos será exclusivamente del BCRA, según su visión sobre la apreciación del dólar, la necesidad de bajar de inflación y la demanda de pesos que exista en el mercado.
Tal como señaló en su panorama, el organismo multilateral de crédito reconoció que existen riesgos relacionados con shocks externos (EE. UU. o Indonesia), pero también al posible cambio de ciclo político en la Argentina.
“Hemos visto claramente buenos resultados del nuevo marco de política monetaria”, afirmó Roberto Cardarelli, jefe de la misión técnica del FMI que arribó al país en un encuentro con periodistas en un hotel de Recoleta. “Hay una apreciación del peso que es más o menos lo que el nuevo programa tenía como objetivo. Es una política monetaria más restrictiva que la que antes seguía el Banco Central. Vemos un inicio de declive de las expectativas inflacionarias en la última encuesta del Banco Central, y la cuestión fiscal fue aprobada en Diputados y esperamos la aprobación en el Senado. Luego será cuestión de lograr las metas que el presupuesto fijó”, agregó.
“El nuevo marco de política monetaria está funcionando para estabilizar la valuación del peso. Ahora es solo una cuestión de seguir implementándolo y esperar una reducción de las expectativas de inflación más contundente en las próximas semanas y meses”, completó el economista italiano, que aseguró que no ve muchos temas “controversiales” a conversar en su visita al país. “nos sentimos bastante cómodos con los últimos eventos en términos de estabilidad”, concluyó el especialista del Fondo.
Cuando se lo consultó sobre la posibilidad de intervenir en el mercado comprando dólares y emitiendo pesos, Cardarelli explicó que cuando se decidió empezar con el crecimiento cero de la base monetaria no se sabía cuán restrictiva era la idea. “Es necesario tener una idea de la demanda de la moneda, que es muy difícil de estimar en todos los países en general, y en la Argentina quizás aún más”, calificó.
“Si la política monetaria se vuelve demasiado restrictiva se puede ver una apreciación muy fuerte del tipo de cambio. Ahí las autoridades tienen la opción de comprar e inyectar pesos en la economía para relajar la política monetaria. Si el tipo de cambio se deprecia mucho es un indicador de que la política monetaria es demasiado laxa. Las autoridades pueden hacerla más restrictiva vendiendo dólares y reduciendo la cantidad de pesos en la economía”, explicó Cardarelli. “Hay cláusulas de salvaguardia en ambas direcciones. Esta es una decisión que el Banco Central tiene que tomar, sobre la base de si la política monetaria es la más apropiada para lograr los objetivos que tiene el Central, que es fundamentalmente lo que dijo su presidente ayer: reducir la inflación”, aclaró. Y cerró: “Esto es lo que dijo él y estamos de acuerdo. Es un objetivo muy importante”.
“Estamos preocupados”, dijo Cardarelli cuando se le mencionaron los últimos números de la actividad económica. “Las políticas monetaria y fiscal actuales son una política de estabilización. Y esa estabilización tiene su costo. nosotros esperamos que ese costo va a ser corto. La recesión no va a durar mucho. Serán dos o tres trimestres”, previó.
“En el segundo trimestre del año próximo vamos a ver una recuperación de la actividad económica, con el campo avanzando y con una reducción de la tasa de interés, porque la inflación sigue bajando y va a haber un efecto de confianza del lado de la demanda doméstica”, remarcó. Y después agregó: “Creemos que la recuperación va a empezar en el segundo trimestre. El crecimiento promedio anual va a ser negativo porque el final de este año va a ser negativo”, describió. Señaló que el peor momento de la recesión va a ser el cuarto trimestre de este año, mientras que la economía tendrá un piso en el primero de 2019 y un despegue en el segundo. Las diferencias entre las perspectivas del FMI y del Gobierno en cuanto al PBI de 2019 (-0,5% y -1,7%), dijo, tienen que ver más con la mirada disímil que tienen sobre el impacto real de la política monetaria más restrictiva a fines de 2018 y el arrastre para el año que viene. “no hay mucha diferencia con el timing”, cerró el economista italiano.