Dinnage, la mujer más poderosa del deporte mundial
La ejecutiva de 51 años se hará cargo de la Premier League inglesa desde 2019
A los 51 años, tras 20 años de carrera como ejecutiva en multinacionales de televisión, la inglesa Susanna Dinnage se transformará en la mujer más poderosa del deporte mundial una vez que tome el mando de la Premier League, lo que sucederá desde el 1° de enero de 2019. Dinnage reemplazará a Richard Scudamore, que condujo durante casi dos décadas a la poderosa asociación de clubes británicos, a los que les hizo ganar miles de millones de libras en base a lucrativos contratos televisivos.
Los antecedentes de Dinnage en el fútbol se reducen a su afición por el Fulham, un club del que es plateísta, y que en este momento marcha último en la tabla de posiciones del certamen. Es su masiva experiencia en el negocio de la TV la principal credencial para obtener el cargo; su nombramiento fue anunciado ayer a los 20 clubes de la Premier. El presidente del directorio del Chelsea, Bruce Buck, que condujo el scouting del nuevo titular de la liga, dijo que la elección estuvo basada “en la experiencia de Susanna para manejar negocios complejos a través de la transformación y el cambio digital”.
La nueva jefa de la liga arrancó en el popular canal musical MTV y después de pasar por el Channel 5 inglés, pasó a Discovery, el gigante estadounidense de la TV documental; en los últimos años condujo la gestión del Animal Planet en Inglaterra e Irlanda.
Su papel en la negociación que Discovery llevó adelante con Sky TV, el emporio de la TV por cable en el Reino Unido –cuya rama deportiva posee los derechos televisivos de la Premier para Inglaterra– contribuyó a generarse una gran imagen en los pasillos de la Premier. En febrero pasado, Dinnage logró que Sky TV aceptara pagar lo que Discovery le exigía por el servicio de los 12 canales que proporcionaba al megaoperador de cable.
“Me interesa mucho este nuevo rol”, afirmó Dinnage en un comunicado distribuido por la liga. “La Premier significa mucho para mucha gente”. También lo será para ella: “es el pináculo del deporte profesional y esta oportunidad de liderazgo es un privilegio”.
Los desafíos que deberá encarar la ejecutiva exceden lo futbolístico, un terreno en el que su experiencia es reducida. Su papel podría ser decisivo para abrir nuevos negocios que favorezcan a los clubes de la Premier League: ya no son solo las cadenas de cable las que compran la televisación de los partidos; Amazon, la multinacional del comercio electrónico, compró 20 encuentros de la corriente liga; esta semana, la Premier acordó con DAZN, una canal de streaming en Internet, para dar sus partidos en España.
Scudamore, el antecesor de Dinnage, había tomado las riendas de la Premier League en 1999, sucediendo a Rick Parry, instalado en el cargo desde 1992, el año en que los clubes se separaron de la asociación de fútbol inglés (FA) para generar su propio negocio. Parry dejó el puesto cuando los derechos televisivos alcanzaban un volumen de 670 millones de libras, una cifra que casi se multiplicó por diez a lo largo de casi dos décadas: en la última negociación, los derechos se valuaron en 5.140 millones de libras. En reconocimiento a esa tarea, Scudamore se llevará una gratificación de 5 millones de libras; cada club de la Premier aportará 250 mil libras cada uno.
“Los fanáticos tradicionales pueden temer que la contratación de una ejecutiva televisiva refuerza la idea de que el fútbol (está a la vanguardia) de la TV”, analizó Dan Roan en la BBC. “Pero con los hábitos de la audiencia deportiva modificándose, un descenso en el valor de los derechos de TV en el mercado doméstico y nuevos actores digitales emergiendo, la experiencia de Dinnage en negociaciones difíciles en Discovery podría ser muy útil”.
El Daily Telegraph sugiere que Unos de sus desafíos será surfear la salida de la Unión Europea: “a la Premier League le interesa que jugadores europeos puedan seguir siendo empleados después del Brexit y si los jugadores de 16 o 17 años podrán moverse todavía libremente por el país; quieren que el gobierno elimine las restricciones mientras que la FA sugiere un tope para jugadores extranjeros”.