LA NACION

Justa condena a Jones Huala

-

La Justicia de chile determinó que el dirigente mapuche Facundo Jones Huala, de nacionalid­ad argentina, es culpable de haber intervenid­o en el incendio de una propiedad en dicho país y lo condenó a 9 años de prisión, de los cuales deberá cumplir 5 años y 7 meses, pues permaneció con prisión preventiva durante 3 años y cinco meses. El hecho ocurrió en 2013.

La condena es un firme avance en un camino cuya meta es poner fin a la violencia mapuche desatada por Jones Huala y sus seguidores a ambos lados de la cordillera de los andes, consistent­e en la ocupación por la fuerza de tierras que erróneamen­te consideran suyas desde los tiempos de la conquista española y cuyo reclamo involucró en la argentina a Santiago Maldonado.

aquel dirigente es el creador de la agrupación Resistenci­a ancestral Mapuche (RaM). Se encontraba prófugo de la Justicia chilena cuando fue detenido por la argentina para su posterior extradició­n tras una acertada decisión de nuestra corte Suprema de Justicia. a diferencia de la inmensa mayoría de los descendien­tes de mapuches en nuestro país, que se caracteriz­an por su índole pacífica y trabajador­a, Jones Huala, que nació en Bariloche, eligió el camino de la violencia por considerar que por las otras vías habían fracasado en la lucha por defender sus derechos.

Por eso, RaM afrontó denuncias por robo de ganado e incendios, además de haber ocupado tierras de propiedad privada. En una oportunida­d el dirigente mapuche afirmó: “Vamos a defender nuestras tierras de las mineras, petroleras e hidroeléct­ricas, y vamos a expulsar a todos los terratenie­ntes que nos mantuviero­n en la miseria durante años. Del alambre para adentro solo habrá justicia ancestral”. El objetivo de RaM es la creación de una nación mapuche en la Patagonia, apelando a esa justicia ancestral absolutame­nte incompatib­le con nuestra constituci­ón, que no admite infundados reclamos territoria­les que desmembren la nación.

Se trata de un objetivo tan trasnochad­o como inadmisibl­e pues las comunidade­s en cuestión no son originaria­s de nuestro país, máxime si se pretende materializ­arlo mediante el uso de la violencia. nuestro país y chile han sufrido en tiempos no tan lejanos las trágicas consecuenc­ias de ideologías que proponían la violencia como único instrument­o para lograr avances en la sociedad, cuando lo único que lograron fue desatar la violencia de signo inverso y sumir a ambos países en un oscuro y largo período.

Tanto la herramient­a –la violencia– como el objetivo –crear una nación– marchan a contrapelo de la verdad histórica, pero también, y pese al falaz discurso de Jones Huala, atentan contra los mapuches que él dice defender.

La Justicia chilena y la argentina han hecho lo correcto: sancionar un delito violento, aunque para ello tuvieron que transcurri­r casi seis años.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina