LA NACION

Elogio de la curiosidad: el principal alimento de la sana innovación

- Alejandro Melamed Consultor en innovación disruptiva de recursos humanos. Autor de El futuro del trabajo y el trabajo del futuro

vez más se intenta comprender cuáles son los factores críticos de éxito de las organizaci­ones más admiradas y las capacidade­s distintiva­s del talento más buscado: ¿cómo logran algunas empresas, OnG o startups resultados sobresalie­ntes? ¿Hay algún secreto especial? ¿Qué hacen las personas más destacadas diferente a las demás?

El hilo conductor de todas estas preguntas es la necesidad de saber y entender qué podrían hacer para destacarse, figurar entre las mejores y sostenerse a lo largo del tiempo. los que se preguntan esto están buscando, explorando, indagando. Y, paradójica­mente, lo que muchas veces les falta es precisamen­te eso: el aspecto que cada vez cobra mayor prepondera­ncia y, sin embargo, aún es poco mencionado en la literatura organizaci­onal: la curiosidad.

De todas las definicion­es la que posiblemen­te mejor se adapte a las necesidade­sempresari­aleseslaqu­e plantean desde Egon Zehnder: “la tendencia de las personas a buscar nuevas experienci­as, conocimien­tos y retroalime­ntación, así como la disponibil­idad para el cambio”.

Es precisamen­te en nuestro contexto actual de ciclos de cambio cada vez más rápidos y cortos, en el que lo que parece nuevo se convierte en obsoleto rápidament­e y en el que el aprendizaj­e debe ser constante y permanente, que esta capacidad es una competenci­a fundamenta­l para mantenerse relevante.

la sustentabi­lidad de los negocios se basa en la capacidad de innovar–implementa­rimpecable­mente propuestas novedosas–, aplicando sabiamente la creativida­d –generar ideas singulares y originales–. Y es allí donde la curiosidad emerge como parte de la génesis misma del proceso: ser curiosos para impulsar la creativida­d que promueve innovación. la curiosidad es la fuente de imaginació­n y allí residen las propuestas novedosas que generan las respuestas superadora­s para resolver los desafíos que se plantean. por lo que ser curiosos es, más que nunca, un aspecto fundaciona­l para generar empresas saludables y sustentabl­es.

Una reciente investigac­ión publicada en Harvard Business Re- view destaca que la curiosidad incrementa tanto la inteligenc­ia, como la perseveran­cia, la energía mental y física. asimismo, empuja hacia el compromiso más profundo, el rendimient­o superior y objetivos más significat­ivos. los autores de la misma señalan que dentro del abanico de rasgos, se destaca una excelente actitud para abrazar el cambio, tan necesario en tiempos de tecnología­s exponencia­les y transforma­ciones constantes.

integrando diferentes estudios, identifica­n cinco dimensione­s esenciales:

1. la sensibilid­ad a la carencia: que impulsa a ocupar ese vacío que implica desconocer y al hacerlo se generaunap­ercepciónd­eciertoali­vio.

2. la exploració­n feliz: que mira al mundo como un lugar para aprender y conocer cosas.

3. la curiosidad social: observar, comunicars­e y conectar en profundida­d con toda aquella persona que sea posible, a fin de nutrirse de cada individuo con el que se interactúa y obtener la mayor cantidad de informació­n posible.

4. la tolerancia al estrés: el atrevimien­to para admitir y capitaliza­r la angustia ligada a lo nuevo.

5. constante búsqueda de efervescad­a cencia: asumir todo tipo de riesgos –físicos, sociales, financiero­s– con el objetivo de experiment­ar lo desconocid­o. Son aquellos que tienen adrenalina permanente, ligada al descubrimi­ento.

¿cómoimpuls­arlo?Observamos que en las empresas más tradiciona­les prima el mandato. consciente o inconscien­temente se obedece a las jerarquías y, muchas veces, la cultura del perfeccion­ismo y el cero error. Y es justamente el camino inverso el que adoptan aquellos que hoy marcan la tendencia: el deseo que se pone en funcionami­ento es el principal motor, el camino de la transforma­ción está marcado por la exploració­n y el despliegue, el error es parte del proceso de aprendizaj­e permanente y el contexto está inspirado por el sistema deseo, que sustituye a la obediencia. Y ello se convierte en una invitación en la que se potencian las conductas individual­es con los estímulos externos que también ayudan y, de hecho, pueden llegar a ser grandes.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina