Agüero mantiene su poder de fuego, eleva al City y lo elogian Pep y Klopp
Nunca baja la intensidad: suma 10 goles en la Premier y dejó al equipo de Manchester a 4 puntos de Liverpool, después del 2 a 1
Solo la Liga de España ofrecía una lucha por el liderazgo con cierta tensión entre los principales torneos de Europa. Barcelona le lleva tres puntos a Atlético de Madrid en 17 fechas. En Italia, Juventus tiene una distancia de 9 puntos sobre Napoli en 19 jornadas; en Alemania, Borussia Dortmund tiene una diferencia de seis unidades con Bayern Munich (en 17 fechas); en Francia, el PSG supera a Lille por 13 puntos y dos partidos menos y en Inglaterra, el asunto iba más o menos por esos carriles.
Liverpool, el mejor equipo de las últimas semanas en el mundo –audacia, intensidad, ambición, goles–, le llevaba seis unidades a Tottenham, y Manchester City estaba en otra sintonía. Sin embargo, el equipo de Pep Guardiola, inspirado, y con Sergio Agüero en la versión con el colmillo afilado, es un conjunto audaz y jovial cuando se lo propone. El triunfo por 2 a 1 sobre los Reds, abre el juego en la mejor competencia europea: el último campeón le quita el invicto y queda a cuatro puntos. Y lo consigue con Kun, que marca un golazo desde una posición incómoda: el tiro acaba casi en el ángulo.
El delantero, que suele ser cuestionado en el seleccionado, es una leyenda en el City. Lleva 7 goles en 7 partidos en la Premier League en su casa contra Liverpool. Marcó al final de 2018 –en el 3-1 sobre Southampton, el 30 de diciembre– y abrió el marcador contra Liverpool –Firmino y Sané anotaron los otros– en un comienzo de 2019 ideal. Lleva diez goles en el torneo y pelea por ser el máximo anotador contra Harry Kane (14), Pierre Emerick Aubameyang (14), Mohamed Salah (13) y Edwin Hazard (10).
“Su calidad marca la diferencia”, lo elogia Guardiola. “Hemos jugado con coraje, agresivos en la presión. Si hubiéramos perdido, estaría casi acabado esto. Pero estamos cuatro puntos por detrás y ellos son los líderes, tenemos mucho que luchar aún y esto nos da mucha confianza”, explica el entrenador, que decidió el ingreso de Nicolás Otamendi solo por una urgencia: a tres minutos del cierre, por el belga Vincent Kompany, que sufrió un golpe en la pierna derecha.
Jürgen Klopp, entrenador de Liverpool, que fue tentado por los millones y el prestigio de Real Madrid, se mantiene en el gigante británico, se permite enfadarse por el resultado y aceptar la clase de Kun. “Había mucha presión y era un partido muy intenso. Tuvimos mala suerte a la hora de definir. Sané marcó en una situación en la que Mané dio en el palo. Es siempre así, tienes que marcar en esos momentos. Por ejemplo, cuando Agüero marca, no había ángulo. En parecidas situaciones, nosotros no lo hicimos”, contó Klopp.
“Gran triunfo ante un durísimo rival para seguir en la lucha. Este equipo nunca se rinde. Y gracias a todos por tanto apoyo”, fue la reflexión del atacante en su cuenta de twitter. El gol, convertido a los 40 minutos del primer tiempo, pareció más un desahogo que una celebración: le dio un derechazo al banderín y gritó frente al público, acompañado por dos compañeros.
Con el pelo teñido y guantes oscuros por el intenso frío –hubo menos de dos grados durante el encuentro–, Agüero sigue siendo una referencia a nivel mundial, a los 30 años. El último grito completa el círculo de los 250 goles en ligas locales: 23 en Independiente, 74 en Atlético de Madrid y 153 en Manchester City. “Mientras que el técnico me siga citando, estaré dispuesto a venir”, suele decir de la selección, cuyo punto final todavía está lejos de escribirse. Mejor así.