Cinco comedias británicas para no perderse
Peep Show 7 temporadas Disponible en Netflix
Mark (David Mitchell) y Jez (Robert Webb) son compañeros de casa y amigos a pesar de no parecerse en nada. El primero es un oficinista tímido que suele tener dificultades para salir de su edificio porque afuera lo esperan unos vecinos preadolescentes que lo intimidan. Sus miedos, deseos y ocasional arrebato de sentido común aparecen en los monólogos interiores, que son uno de los recursos más originales de la serie estrenada en 2003. El otro y más curioso es que los espectadores ven el mundo a través de los ojos de los protagonistas. Entonces cuando la cámara se detiene en Sophie (Olivia Colman, tan diferente de su papel en Broadchurch y la inminente tercera temporada de The Crown), enseguida se entienden los nervios que siente Mark al cruzarse con la mujer que le gusta. Y los papelones que pasa frente a ella.
Derry Girls 1 temporada Disponible en Netflix
La voz en off narra los pensamientos más íntimos de una adolescente que empezamos a conocer antes de verla. Un póster de la banda irlandesa Cranberries confirma la locación, que ya hacía sospechar el marcado acento, y el tiempo. Son los años noventa y Erin, alumna de una escuela católica con sueños de escritora, se despierta con el sonido de las palabras que ella escribió en el aire. Porque su despistada prima Orla decidió leerlas en voz alta sin entender que no está bien leer en voz alta un diario íntimo ajeno. La indignación de Erin, las peleas con su madre, el encuentro con sus amigas y los pequeños desastres cotidianos que las persiguen transcurren en el marco de la Irlanda del Norte de los años 90, en la que una bomba puesta en un puente es algo tan cotidiano como los retos de la madre superiora.
Fleabag 1 temporada Disponible en Amazon
Después del éxito global de
Killing Eve (aquí se estrena en febrero por Paramount Channel), el lugar de su creadora, Phoebe WallerBridge, como una de las showrunners y guionistas más inteligentes y sensibles de los últimos años quedó definitivamente confirmado. Claro que unos años antes del fascinante thriller, Waller-Bridge escribió y protagonizó esta comedia que se adhiere a la mente del espectador con una potencia poco usual. En ella la autora es Fleabag, una mujer que vive como si el mundo le debiera algo, como si la amargura que destila fuera la etiqueta adecuada para toda ocasión. Irresponsable, egoísta y en extremo gracioso, el personaje suele romper la cuarta pared para, con una mirada socarrona, hacer partícipe al público de su modo retorcido, bastante dañino e hilarante de ver el mundo.
Lovesick 3 temporadas Disponible en Netflix
Una comedia romántica que comienza en un consultorio médico y con un resultado positivo de clamidia no parece ser el inicio más auspicioso. Y sin embargo esta serie consigue ir más allá de la premisa inicial que pone a Dylan (Johnny Flynn), su protagonista, en una misión por demás incómoda: avisarles a sus parejas del pasado sobre el diagnóstico médico. Y aunque cada episodio lleve el nombre de esas mujeres que pasaron por su vida y a través de flashbacks se muestren sus vínculos fallidos, lo que se destaca en la serie es la relación que tiene el protagonista con sus amigos. Por un lado está el eterno adolescente Luke (Daniel Ings) y por el otro la sensible Evie (Antonia Thomas), ambos siempre cerca del romántico Dylan, que insiste en buscar al amor de su vida en todos los lugares equivocados.
Crashing 1 temporada Disponible en Netflix
El mismo año, 2016, que escribió, produjo y protagonizó Fleabag, Phoebe WallerBridge también escribió y actuó en esta comedia coral (no confundir con la otra
Crashing que emite HBO, encabezada por el cómico norteamericano Pete Holmes) sobre un grupo de jóvenes londinenses viviendo en un hospital abandonado. Por momentos comedia física desopilante, en otros romántica y a veces virada hacia el drama, la serie vuelve a demostrar el enorme talento de Waller-Bridge para construir personajes entretenidos, estimulantes, pero sobre todo reales. Se trata de seres complejos que aunque veces parecen tener más defectos que virtudes y se meten en las más absurdas o exageradas circunstancias siempre logran mantener su humanidad y generar la cantidad de empatía necesaria para hacerlos inolvidables.