Cambiemos y la oposición pueden perder este año a sus espadas legislativas
Las principales figuras de los espacios en ambas cámaras terminan sus mandatos y su futuro político aún es incierto
Las principales espadas de Cambiemos y la oposición podrían despedirse este año del Congreso. Ambas cámaras se renovarán en diciembre, después de las elecciones. Hay senadores y diputados de peso que terminan sus mandatos. Mientras algunos ya saben que no continuarán con la labor legislativa, otros aún no decidieron su futuro.
La coalición oficialista podría perder a sus alfiles más importantes después de las elecciones. Emilio Monzó, quien tuvo un rol fundamental para el Gobierno a la hora de sacar leyes claves, ya avisó que no competirá en los comicios. Nicolás Massot (Pro-Córdoba) y Silvia Lospennato (Pro-Buenos Aires) podrían seguir al presidente de la Cámara de Diputados, según reveló la nacion en noviembre pasado.
Mario Negri, dirigente de la UCR y jefe del interbloque de Cambiemos, se lanzó como precandidato a gobernador de Córdoba y se alejaría del Congreso a fin de año. En cambio, Pablo Tonelli (Pro-Capital) tiene la intención de buscar un nuevo período y su reciente elección por cuatro años como representante del oficialismo en el Consejo de la Magistratura parece ser una señal de su continuidad. Daniel Lipovetzky (Pro-Buenos Aires), de destacada labor durante el debate sobre el aborto, también desea seguir en la Cámara baja. Eduardo Amadeo (Pro-Buenos Aires) está dispuesto a colaborar. En total, el macrismo renueva veintisiete bancas en Diputados; el radicalismo, dieciséis, y la Coalición Cívica (CC), dos.
Si bien está garantizada su permanencia durante 2019, Elisa Carrió podría convertirse en otra baja para la coalición en un futuro cercano. “Me jubilo el año que viene, cuando gane Cambiemos”, dijo días atrás en diálogo con TN.
En el Senado, el oficialismo corre el riesgo de perder referentes. El presidente provisional de la Cámara alta, Federico Pinedo, tiene mandato hasta diciembre de 2019. Macri podría proponerlo como integrante de la Corte Suprema.
Ángel Rozas (UCR-Chaco) decidirá a fines de marzo si compite o no por otro mandato. “A partir del 10 de diciembre estaré en donde Pro crea que puedo ser útil. Seguiré trabajando para la provincia y las políticas nacionales”, aseguró, en tanto, Alfredo de Ángeli (Pro-Entre Ríos) a la nacion.
La vicepresidenta Michetti no oculta su intención de volver a integrar la fórmula presidencial, aunque Pro todavía no confirmó sus principales binomios.
Kirchnerismo
El kirchnerismo pondrá en juego las bancas de varios caciques de La Cámpora: Máximo Kirchner (Santa Cruz), Axel Kicillof (Capital), Eduardo De Pedro (Buenos Aires), Andrés “Cuervo” Larroque (Capital) y Mayra Mendoza (Buenos Aires). Si bien fue elegido por la provincia de Santa Cruz, el hijo de la expresidenta concentra sus actividades en el conurbano desde hace dos años. Todo indica que encabezará la lista de diputados nacionales en Buenos Aires. En el Instituto Patria afirman que las candidaturas se definirán a fines de mayo.
La banca del exministro de Planificación Federal Julio De Vido (FPVBuenos Aires), que permanece preso desde que la Cámara le quitó los fueros, estará disponible en diciembre. Terminan sus mandatos, además, la exministra Nilda Garré (FPV-Capital) y Rodolfo Tailhade (FPV-Buenos Aires).
El sanjuanino José Luis Gioja, que preside el PJ nacional, desea permanecer otro período. Tras sellar un acuerdo de unidad en su provincia, Gioja impulsa la construcción de un frente “patriótico” a nivel nacional. “En ese marco, me parece útil seguir trabajando como diputado, pero falta mucho para que se defina”, indicó a la nacion.
En el Senado, Cristina Kirchner podría perder a varios de sus laderos, como el jefe de su bloque, Marcelo Fuentes (FPV-Neuquén). Otros aliados de la expresidenta, como Fernando “Pino” Solanas (Proyecto Sur-Capital) y María Odarda (RIORío Negro), también deberían competir para acceder a otro período. El cineasta contempla la posibilidad de renovar su permanencia en la Cámara alta.
El Frente Renovador podría sufrir, por su parte, las bajas de Graciela Camaño, jefa del bloque en la Cámara de Diputados, y Marco Lavagna, uno de los referentes económicos de Massa. Fuentes del massismo aseguraron que Camaño tenía pensado cerrar su etapa parlamentaria, pero su elección como consejera de la Magistratura alteraría sus planes. Por su parte, Lavagna apostará todas sus fichas a la Capital, donde se lanzará como candidato a jefe de gobierno porteño por Alternativa Federal.
El Bloque Justicialista podría quedarse sin sus espadas más filosas en ambas cámaras. Miguel Ángel Pichetto, jefe de la bancada en el Senado, está dedicado a su campaña.
Pablo Kosiner, presidente del espacio en Diputados, podría postularse a gobernador de Salta o intentar renovar. Diego Bossio, que ingresó con la lista del kirchnerismo en 2015, se encuentra abocado a colaborar con la campaña de Massa.
En ese espacio vencen, además, los mandatos de Rodolfo Urtubey (Salta), Pedro Guastavino (Entre Ríos) y Guillermo Pereyra (Movimiento Popular Neuquino), un aliado del bloque de Pichetto y de muy buen vínculo con el macrismo. Alfredo Olmedo (Salta Somos Todos), que supo aliarse al oficialismo, también podría decir adiós.
El flamante interbloque Red por Argentina arriesga ocho de sus diez bancas en Diputados. Según sus voceros, Victoria Donda (Somos-Capital) no aspira a continuar. Encolumnado detrás del precandidato presidencial Felipe Solá, Facundo Moyano (Red por Argentina-Buenos Aires) dice que hará lo necesario para derrotar a Cambiemos.
La renovación pasará, también, por los poderes legislativos de la provincia y la Capital, los distritos más importantes del macrismo. Entre los que se podrían despedir se destaca Manuel Mosca, presidente de la Cámara de Diputados. Y en la Legislatura porteña vencen los mandatos del vicepresidente primero Francisco Quintana (Pro) y Maximiliano Ferraro, de la CC.