Idas y venidas con el VAR: cuánto habrá que esperar
Claudio Tapia dijo que estará listo en agosto; sin embargo, el proceso de homologación dura cerca de un año
El raid mediático de Claudio “Chiqui” Tapia, presidente de la AFA, se enfocó en una innovación para el fútbol argentino: el sistema de video arbitraje, conocido como VAR. En declaraciones a Radio Mitre, el dirigente anticipó que estará listo “en el próximo torneo”. Ayer visitó en Luque (Paraguay) a Alejandro Domínguez, presidente de la Conmebol, para pedirle ayuda en la instrumentación del sistema. “En la ciudad de Luque, Paraguay en la sede de Conmebol con Alejandro Domínguez avanzando con la implementación del VAR en el fútbol argentino”, escribió el máximo dirigente del fútbol argentino en su perfil de Twitter. Y más tarde publicó una carta dirigida a Domínguez en la que la AFA solicita a la entidad rectora del fútbol sudamericano que la “acompañe en la planificación y el financiamiento del proyecto VAR de Argentina, como así también toda la dirección de arbitraje de la Conmebol para implementar en el menor tiempo posible el sistema VAR en la Argentina”.
Resumiendo: Tapia fue a Paraguay a pedir financiamiento para un proyecto que él mismo había anunciado que estará listo en agosto de este año, mucho antes de lo previsto. Según pudo reconstruir este diario, la asociación que hizo los deberes más rápido y puso en marcha el sistema en tiempo récord fue España. Tardó ocho meses desde que mandó el pedido de homologación a la FIFA hasta que lo puso en práctica. La velocidad, claro, tiene un precio. Y la inversión, según las fuentes consultadas, “no baja de los US$2 millones”. Para una economía con una moneda devaluada, como el peso, es una cifra exorbitante, que ni la AFA ni la Superliga están dispuestas a desembolsar ahora.
Para los países que no tienen esta autopista financiera, el proceso demora cerca de un año. Lo explica una fuente al tanto del proceso: “Hay que capacitar a cerca de 40 árbitros. Después, contratar al proveedor que se encargue del servicio. Y tiene que ser alguno de los ocho que estén habilitados por la FIFA. Luego hay que ver el tema de infraestructura: si todos los estadios tienen un lugar para construir la oficina de VAR, y si a todos les llega la fibra óptica que se necesita para transmitir las imágenes. Una vez que todo eso está resuelto se hacen las pruebas piloto. Con esos resultados, la FIFA homologa el procedimiento y el torneo queda habilitado para utilizar la tecnología”. Las pruebas piloto, además, suelen hacerse sin que los protagonistas –futbolistas y árbitros– lo sepan. Más allá del resultado final, lo que se busca es calibrar las cámaras y que toda la tecnología aplicada funcione en forma correcta.
Otra de las cuestiones que deberían resolverse es la cabeza del proyecto. La idea del director nacional de arbitraje, Federico Beligoy, es que sea un exárbitro (Sergio Zoratti es un candidato). Todo se dilucidará cuando la AFA explique cómo trabajará de cara a la homologación de la FIFA.
La comunicación de la AFA sobre el VAR va a contramano de lo que le había dicho Mariano Elizondo, presidente de la Superliga, a la nacion: “El VAR en el 2019 va a ser complicado, porque todavía no iniciamos el proceso de homologación y eso tarda un año. Tenés que presentarle una nota a la FIFA y hay que capacitar a los árbitros, a exárbitros, a dirigentes, jugadores, técnicos, periodistas. Se instala, se prueba durante mucho tiempo. México está hoy trabajando con el VAR y todavía no lo utiliza. Está probando y ajustando”.
Más allá de los discursos (y de resolver quién hará la inversión para instrumentarlo), algo está claro: tarde o temprano, el fútbol argentino tendrá su propio VAR.