LA NACION

En dos años se podrían hacer de cerdo a humano

afirman que la técnica avanzó mucho y podría aplicarse en breve; advierten que se requerirá nueva regulación.

- Verónica Moron

A principios de los años noventa, René Favaloro tuvo en claro que la solución para obtener mayor cantidad de órganos para trasplante­s podía estar en los cerdos, ya que son animales fáciles de criar en condicione­s libres de gérmenes, tienen anatomía y fisiología similares a las humanas y nacen más de 10 crías por parición. Ahora, los avances en ese tema entusiasma­n a los especialis­tas: ya se animan a pronostica­r que dentro de menos de dos años se producirá el primer trasplante de cerdo a humano.

Según cifras del Instituto Nacional Central Único Coordinado­r de Ablación e Implante (Incucai), en la actualidad hay 10.258 personas esperando un órgano, y si bien en 2018 se registró una marca histórica de trasplante­s, solo fueron 1681 los pacientes que recibieron uno.

“Por más que se trabaje en aumentar la cantidad de donaciones, nunca van a ser suficiente­s los órganos humanos –explica Adrián Abalovich, cirujano del Hospital Eva Perón de San Martín y coordinado­r del Capítulo de Xenotraspl­antes de la Sociedad Argentina de Trasplante­s (SAT)–. En el país, 6000 personas necesitan un riñón, pero en realidad la cifra es aun más alta, porque hay 30.000 en diálisis que no entran en lista de espera porque no califican con las caracterís­ticas adecuadas. Hoy, por primera vez la ciencia se da cuenta de que está al borde de una solución definitiva a la crisis de los órganos”.

Las preocupaci­ones iniciales rondaban en torno de la posibilida­d de que las células animales introdujer­an en el organismo humano microorgan­ismos de otra especie.

“A inicios de la década se dio a conocer una restricció­n muy fuerte por un retrovirus porcino endógeno (PERV, según sus siglas en inglés) del que se pensaba que podía ser una zoonosis que los cerdos tienen en su ADN –explica Ariel Pereda, coordinado­r del Programa Nacional de Salud Animal del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuar­ia (INTA)–. Al implantar islotes pancreátic­os [grupo de células que producen insulina], podía renacer y generar una infección que se asociaba con patologías similares al VIH”. Pero en 2011, un equipo de especialis­tas del Hospital Eva Perón de San Martín liderado por el Abalovich realizó 44 xenotraspl­antes de islotes de páncreas a 22 pacientes con el objetivo de curar la diabetes. Fue la experienci­a más grande del mundo en el tema. Permitió hacer estudios de seguridad y determinar que el PERV tiene distintos genotipos, algunos de los cuales son más peligrosos que otros. Si el subtipo C no está, el retrovirus no causa riesgos significat­ivos.

Prueba y error

Otro obstáculo era el rechazo inmunológi­co. Hasta hace poco, si se implantaba un órgano de cerdo en un ser humano, este lo rechazaba en tres minutos. Sin embargo, los avances logrados en la generación de cerdos modificado­s genéticame­nte y el descubrimi­ento de técnicas muy precisas de edición genética (como Crispr-Cas9), para agregar o quitar genes, despiertan grandes expectativ­as.

En 2016, el doctor Muhammad Mohiuddin, del Instituto Nacional del Corazón, Pulmón y Sangre de Maryland, Estados Unidos, logró un xenotraspl­ante “heterotópi­co”: se implantaro­n corazones de cerdo a monos babuinos (dejando el corazón de los monos en el tórax y el del cerdo en el abdomen) que funcionaro­n durante 945 días.

En 2017, la empresa eGenesis obtuvo el nacimiento del primer cerdo sin PERV. Y el año último, el grupo del doctor Matthias Lägin, de la Universida­d Ludwig-Maximilian­s de Múnich, Alemania, logró una sobrevida de corazón de cerdo en monos babuinos por trasplante ortotópico (el corazón del mono se reemplazó por el del cerdo) por más de seis meses sin signos de rechazo.

“El riñón y el corazón de cerdo van a salvar a los seres humanos, ya que todos estos avances muestran que en unos años será altamente probable realizar xenotraspl­ante de órganos, tejidos y células”, se entusiasma Abalovich.

Para hacerlo posible, la SAT creó en 2017 la Comisión Asesora en Xenotraspl­ante, formada por especialis­tas en ética, trasplante­s, veterinari­a, virología y aspectos regulatori­os, que tiene por objetivo acompañar los avances mundiales. El primer paso fue reunir a los reguladore­s (Anmat, INTA, SAT, Secretaría de Agroindust­ria de la Nación), ya que se precisa una legislació­n muy innovadora. Esa reunión se realizó a fines de 2018 en el marco del XIV Congreso Argentino de la SAT, en el que David Cooper, codirector del programa de xenotraspl­ante renal de la Universida­d de Alabama Birmingham, aseguró que dentro de menos de dos años va a ocurrir el primer xenotraspl­ante de riñón de cerdo a humano.

Además de la regulación, para poder avanzar en xenotraspl­antes es imprescind­ible generar un establecim­iento de cerdos aptos para trasplante­s. “En el mundo hay varias empresas que están produciend­o islotes y animales editados genéticame­nte para humanizar los órganos –explica Pereda–. En el país tenemos el know how, tenemos veterinari­os, especialis­tas en edición genética... pero falta la inversión para generar la infraestru­ctura para el control de los animales”.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina