Teitelbaum
Cuando la nacion publicó una carta suya con su correo electrónico pude contactarme con el ingeniero José Teitelbaum, lo cual originó una especial amistad. Cuando lo visité, me narró el despojo que en ese entonces le estaban haciendo los hombres de Julio De Vido, tal como describió el lector Rojas Panelo el domingo pasado en su carta destacada de la semana. Teitelbaum perdió todo menos su honor por no acceder a las coimas solicitadas, tuvo que indemnizar a todo su personal y se detuvo la construcción del Centro Tecnológico del Conicet en Santa Fe, y finalmente quebró. De la misma manera que existen los cuadernos de la corrupción, donde se mencionan los nombres de los empresarios que cometieron ilícitos, también debería haber al menos un cuaderno de los empresarios honestos. En primer lugar debería figurar el nombre del ingeniero José Teitelbaum, que ya pasó largamente los 90 años.
Néstor O. Ermili
DNI 4.346.042