LA NACION

Un juez de bajo perfil y causas de fuerte impacto

Más allá de la excarcelac­ión de un motochorro, Ormaechea intervino en causas contra el peruano Marcos y Di Zeo

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Pablo Ormaechea es el titular del Juzgado en lo Criminal y Correccion­al Nº 17 desde hace siete años y dos meses. Su designació­n, junto con la de otros 29 magistrado­s, fue publicada en el Boletín Oficial el 22 de noviembre de 2011 con la firma de la por entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner y de su ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak. Sin embargo, ese fue solo el nombramien­to oficial, ya que durante varios años estuvo a cargo de ese despacho como subrogante. Su nombre tomó relevancia pública en los últimos días, cuando se conoció que procesó sin prisión preventiva a Leandro Bazán, un motochorro que en un lapso de tres horas había robado, por lo menos, nueve teléfonos celulares en distintos barrios de la ciudad de Buenos Aires. El magistrado había tenido en sus manos expediente­s sobre Marco Antonio Estrada Gonzales, el peruano conocido como Marcos que controla el narcotráfi­co en la villa 1-11-14; Rafael Di Zeo, el jefe de la barra de Boca, homicidios de fuerte impacto, como la muerte del periodista Nicolás Pacheco, caso vinculado con la barra de Racing, y el asesinato de María Caviglia, la mujer que apareció calcinada dentro de una valija. También está al frente de la investigac­ión por el incendio en Iron Mountain. Encabezar esos importante­s casos no implicó para el magistrado tanta exposición pública como su decisión de excarcelar a un motochorro.

El pliego de Ormaechea, junto con el de otros jueces, fiscales y defensores oficiales, había sido aprobado por el Senado de la Nación el 2 de noviembre de 2011. Ormaechea nació en Puerto Belgrano el 11 de octubre de 1958. Estudió Derecho en la Universida­d de Buenos Aires. Tiene una amplia trayectori­a como empleado y funcionari­o judicial y como docente.

Antes de asumir como titular del Juzgado en lo Criminal y Correccion­al porteño Nº 18 ocupó el cargo de “auxiliar principal”, fue secretario de Cámara en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) Nº 10 y en 1996 fue designado magistrado subrogante del Juzgado Criminal y Correccion­al Nº 37.

Está casado con una de las hijas de Lidia Papaleo, aunque esta comentó en notas periodísti­cas que no tiene buena relación con su hija y su yerno. Ormaechea mantuvo siempre un bajo perfil. Un funcionari­o del gobierno nacional que transita los pasillos de tribunales sostuvo que Ormaechea es un magistrado “no muy querido entre sus pares”.

El gobierno porteño decidió llevar el caso de Ormaechea al Consejo de la Magistratu­ra, con la intención de que el juez tenga que dar explicacio­nes sobre la decisión tomada.

En marzo pasado, Ormaechea procesó a 12 exfunciona­rios del gobierno porteño y cinco integrante­s de la empresa Iron Mountain por el delito de “incendio culposo seguido de muerte”, en la investigac­ión de lo ocurrido el 5 de febrero de 2014, cuando murieron ocho bomberos y dos miembros de Defensa Civil.

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