el gobierno negocia un plan de reactivación con un blanqueo laboral
Busca consenso con la oposición para votar leyes contra el desempleo; el proyecto para frenar la caída de la actividad incluye créditos e incentivos fiscales
Frente al año electoral y ante estadísticas que muestran una caída de la actividad económica, el Gobierno decidió negociar con la oposición un paquete de iniciativas legislativas destinado a paliar la situación que atraviesan amplios sectores de la industria y el comercio.
Según confiaron fuentes legislativas de Cambiemos a la nacion, la pieza clave que prepara el Gobierno es un amplio “blanqueo” laboral que permita detener el crecimiento del desempleo.
A esa propuesta se sumarían incentivos fiscales e impositivos para pequeñas y medianas empresas, en línea con el anuncio destinado a las economías regionales que hizo anteayer Mauricio Macri.
El conjunto de medidas también incluirá una serie de mejoras financieras para facilitar el acceso al crédito a sectores productivos que necesitan reimpulsar su actividad.
La intención del Poder Ejecutivo es iniciar una ronda de negociaciones con legisladores de la oposición para tratar de alcanzar “cierto nivel de consenso” previo a la llegada del paquete de medidas al Congreso.
Los proyectos serán enviados al comienzo de las sesiones ordinarias, el 1º de marzo, y serán defendidos por el Presidente en su discurso ante las dos cámaras del Parlamento con motivo de la apertura del año legislativo.
El presidente del bloque justicialista del Senado, Miguel Pichetto (Río Negro), confirmó a la nacion los sondeos del oficialismo. “Este es un año complejo, difícil, en el que los proyectos van a ser evaluados en profundidad y deberán tener acuerdo político para poder tratarse”, advirtió el líder de la bancada del PJ.
Urgido por el año electoral y los números que muestran una fuerte caída de la actividad económica, el Gobierno comenzó a tantear el terreno para consensuar con la oposición un paquete de iniciativas legislativas destinado a paliar la crítica situación que atraviesan amplios sectores de la industria y el comercio.
Según confiaron fuentes legislativas de Cambiemos a la nacion, la nave insignia de la armada legislativa que prepara el Gobierno será un amplio “blanqueo” laboral que permita detener el constante crecimiento del índice de desempleo.
A esa propuesta se sumarían incentivos fiscales e impositivos para pequeñas y medianas empresas, en línea con el anuncio del último jueves de Mauricio Macri para las economías regionales.
El conjunto de medidas también incluirá una serie de mejoras financieras para facilitar el acceso al crédito para sectores productivos. Las negociaciones en marcha
La intención del Poder Ejecutivo es iniciar una ronda de negociaciones con legisladores de la oposición para tratar de alcanzar “cierto nivel de consenso” previo al envío de las propuestas al Congreso.
Los proyectos serán girados al Parlamento después del próximo 1° de marzo, fecha de inicio de un nuevo período legislativo.
Ese día, el presidente Mauricio Macri encabezará el tradicional discurso de apertura de las sesiones ordinarias del Congreso y se espera que incluya referencias a los proyectos de reactivación económica.
El presidente del Bloque Justicialista del Senado, Miguel Pichetto (Río Negro), confirmó a la nacion los sondeos del oficialismo para consensuar las medidas. “Este es un año complejo, difícil, donde los proyectos van a ser evaluados en profundidad y deberán tener acuerdo político para poder tratarse”, advirtió el líder de la principal bancada de oposición de la Cámara alta.
Al frente de la batería de proyectos estará un nuevo régimen de “blanqueo” laboral. Un adelanto de esa propuesta estuvo sobre la mesa del almuerzo que el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, mantuvo el último martes en la Cámara alta con miembros del Bloque Justicialista para comunicarles que el Poder Ejecutivo no llamará a sesiones extraordinarias.
“Es un tema que tiene que ver con blanqueo de trabajadores, pero no conocemos el contenido”, explicó Pichetto ante la consulta de este diario.
El Gobierno había incluido el blanqueo en el proyecto de reforma laboral, que luego abandonó como consecuencia de las complicaciones del escenario económico. Pero la iniciativa de blanqueo laboral tiene también respaldo de sectores sindicales y puede alcanzar consenso para avanzar.
“Todo lo que sea para reactivar y ayudar a los sectores productivos lo vamos a apoyar, pero en este tipo de proyectos es muy importante la opinión del movimiento obrero”, subrayó Miguel Ángel Pichetto en diálogo con la nacion. Otras medidas
Voceros oficialistas confiaron que, además de la tradicional quita o reducción temporal de las cargas patronales, el proyecto contemplaría un perdón de las multas que les correspondería pagar a las empresas por cada trabajador cuya relación laboral formalicen.
La “agenda productiva” es elaborada por el Ministerio de Producción y Trabajo, que conduce Dante Sica, y la coordinación de las reuniones entre el ministro y los legisladores estará a cargo del presidente provisional del Senado, Federico Pinedo (Pro-capital).
El paquete incluirá también beneficios impositivos y fiscales a partir de cambios en las leyes de pequeñas y medianas empresas y de la industria del software.
En el caso de la ley de pymes, la idea es ampliar los incentivos impositivos vigentes. En cuanto a la ley de software, la intención es actualizarla para incluir a nuevos sectores de la industria que ahora no se encuentran comprendidos.
Siempre según fuentes legislativas consultadas por este diario, el paquete de iniciativas contemplaría también modificaciones en el régimen de warrants (uso de mercadería como parte de pago o respaldo para financiamiento). La idea es facilitar el uso de esta herramienta financiera y así ampliar el acceso al crédito de sectores productivos.
Por último, el Gobierno aprovecharía la oportunidad para volver a la carga con un proyecto deseado, pero demorado en el Congreso: la creación de la Agencia Nacional de Evaluaciones de Tecnología de Salud (Agnet).
Esta será la tercera vez que Cambiemos buscará avanzar con esta oficina que tendrá la misión de evaluar las prácticas de los servicios de salud y autorizar el uso de medicamentos y tecnologías médicas. El primer proyecto fue presentado por el Poder Ejecutivo en 2016.
Esa iniciativa nunca llegó a tener dictamen de comisión luego de que la CGT diera marcha atrás con su respaldo inicial, acordado con el entonces ministro de Trabajo, Jorge Triaca.
Esto llevó a que el PJ le quitara su apoyo. Aquel texto caducó el año pasado, pero volvió a ser presentado por el oficialismo, en esta oportunidad con la firma de Pinedo.