Acuerdo para ampliar las exportaciones a la India
gira de macri. Se abre un mercado para limones, huevos y harinas.
NUEVA DELHI (De un enviado especial).– El presidente Mauricio Macri tocó la ofrenda, de acuerdo con el tradicional ritual, hizo un minuto de silencio, dio la vuelta alrededor de la pira funeraria de mármol negro presidida por una llama eterna, situada en donde se realizó la cremación del cadáver de Mahatma Gandhi, y luego arrojó pétalos. Después de dar un paso hacia atrás, su esposa, la primera dama Juliana Awada, y sus hijas Antonia y Valentina imitaron el ritual.
La familia presidencial homenajeó al líder del nacionalismo indio y principal artífice de la independencia de su país, efectivizada en 1947, un año antes de su asesinato por un radical hinduista. Los visitantes suelen rendir el homenaje desde el exterior del recinto, pero el Presidente y la primera dama ingresaron y cumplieron con la ceremonia desde un lugar privilegiado.
Se trató de la primera actividad oficial en la que participaron Macri, Awada y las hijas.
Después de la recepción oficial que encabezaron el presidente Ram Nath Kovin y el primer ministro Narendra Modi, en una ceremonia que se llevó a cabo en el majestuoso Palacio Presidencial Rashtrapati Bhavan, Macri, a su familia y el resto de la comitiva partieron rumbo al Memorial Mahatma Gandhi.
El Presidente y su esposa caminaron unos 70 metros, se sacaron los zapatos –una regla obligatoria para poder ingresar; el único que decidió usar pantuflas fue Macri– y rindieron tributo a Mahatma Gandhi, la figura más relevante de la escena política y social de la India durante la primera mitad del siglo XX y uno de los líderes del movimiento de independencia indio contra el Raj británico.
Gandhi luchó por la unidad de su país entre hindúes y musulmanes, pero no pudo lograr su objetivo. Esa convivencia quedó trunca con la violencia que acompañó el nacimiento de la Unión India y Paquistán.
El líder fue asesinado a principios de 1948, a los 78 años, por un radical hinduista. Un día después del homicidio, sus restos fueron cremados en el lugar donde Macri le rindió homenaje ayer.
Modi, por la reelección
El apellido de mayor peso en la democracia más grande del mundo, Gandhi, volvió a la escena política y generó un pequeño sismo. Semanas antes del comienzo de la campaña electoral –los comicios serán en mayo próximo–, el primer ministro Narendra Modi, que hasta el momento se encaminaba hacia una segura reelección, tendrá que competir contra Priyanka Gandhi, nieta de la célebre ex primera ministra Indira Gandhi.
Modi, líder del partido nacionalista hindú BJP, parecía no tener rival, pero hace días el Partido del Congreso, abanderado del secularismo y el socialismo, anunció que Priyanka, hija de Rajiv Gandhi y la italiana Sonia Gandhi, será de la contienda.
A los 47 años, psicóloga de profesión e integrante del Parlamento, la nieta de la premier que lideró la India durante 16 años cosecha adhesiones. Los medios locales la caracterizan como “carismática y fotogénica” y sus seguidores, según describió la prensa internacional, aseguran que Priyanka representa el regreso de Indira.
Pese a que Modi parecía tener el camino allanado, la aparición en escena de Priyanka se suma como una variable que genera dudas acerca de la permanencia en el poder del actual premier, que no logró cumplir con sus principales promesas, como una reducción sustancial del desempleo y de la pobreza rural.