El FMI prevé una inflación anual de 30,5%
Eso ubicaría al país en el sexto lugar; llegaron US$10.835 millones
Este año la Argentina volvería a estar entre los países con mayor inflación del mundo, según las últimas proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI). Con una previsión de 30,5%, solo sería superada por Venezuela, Sudán, Zimbabwe, Sudán del Sur e Irán.
En tanto, ayer el organismo depositó en la cuenta del Tesoro en el Banco Central los US$10.835 millones correspondientes al cuarto giro del acuerdo stand-by firmado con la Argentina. Así, las reservas llegarán a los US$77.478 millones.
WASHINGTON.– La Argentina volverá a estar este año entre los países con mayor inflación del mundo, según las últimas proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI).
El ranking de naciones que sufrirán la mayor suba de precios al consumidor lo encabeza Venezuela, el único país del planeta con hiperinflación, seguido por Sudán, Zimbabwe, Sudán del Sur, Irán y, luego, la Argentina, en sexto lugar. Este año, el Fondo prevé que solo 18 países experimentarán una inflación de dos dígitos.
Venezuela, envuelta en una profunda crisis humanitaria, registrará una inédita inflación de 10.000.000%; Sudán tendrá un 56,2%; Zimbabwe, 40,1%; Sudán del Sur, 35,9%, e Irán, una suba de precios anual que cerrará el año en el 31,2%, según las proyecciones del Panorama Económico Mundial (WEO, según sus siglas en inglés), el informe con la visión del staff del Fondo sobre la economía global, que fue presentado ayer, en el inicio de la reunión anual del FMI y el Banco Mundial en Washington.
Para la Argentina, el Fondo prevé para este año una caída del producto bruto interno (PBI) del 1,2%, una inflación del 30,5% –por debajo de las previsiones del mercado, que anticipa una suba de precios del 36%, según el último relevamiento de expectativas del Banco Central– y un alza del desempleo de hasta el 9,9 por ciento.
La inflación aparece como el principal problema que enfrenta el plan económico del Gobierno, y como uno de los motivos detrás del último escalón que trepó el dólar. El Gobierno elude dar pronósticos (tras varios desaciertos), pero el Fondo reiteró en su informe sobre la economía global que este año prevé que “las expectativas de inflación crecientes generen presiones inflacionarias más persistentes” en el país.
La semana anterior, la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, había dicho que los resultados obtenidos por el plan respaldado con un préstamo del organismo sobre la inflación habían “decepcionado” las expectativas. Lagarde y el staff del FMI elogiaron las últimas medidas adoptadas por el equipo del Banco Central que dirige Guido Sandleris para domar la suba de precios, aunque remarcaron que será un “proceso prolongado”.
En un párrafo dedicado a la Argentina, el informe del FMI señala que “las proyecciones de crecimiento se han revisado al alza, y se espera que los salarios nominales más altos y las expectativas de inflación crecientes generen presiones inflacionarias más persistentes en 2019”, respecto de la revisión anterior del Panorama Económico Mundial, presentada en octubre del año pasado.
“Los riesgos a la baja para la economía siguen siendo considerables”, señaló el organismo.
El informe del Fondo trazó un panorama más pesimista sobre la economía global, aunque el staff aún no avizora una recesión en el horizonte. El crecimiento, que alcanzó su punto máximo en cerca del 4% en 2017, se suavizó a 3,6% el año pasado y el Fondo prevé que este año vuelva a morigerarse al 3,3%. La Argentina y Turquía aparecieron, este año, al tope del análisis del Fondo sobre la economía global: fueron los dos países emergentes que sufrieron el mayor castigo de los mercados el año anterior.
“La escalada de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, el estrés macroeconómico en la Argentina y Turquía, las interrupciones en el sector automotor en Alemania, las políticas crediticias más estrictas en China y el ajuste financiero junto con la normalización de la política monetaria en las economías avanzadas más grandes han contribuido significativamente. Se debilitó la expansión mundial, especialmente en la segunda mitad de 2018”, describió la economista jefe del Fondo, Gita Gopinath, la primera mujer en la historia del FMI en ocupar ese cargo, y la primera en liderar la presentación del informe.
“Este es un momento delicado para la economía global”, resumió Gopinath.
El Fondo redujo su previsión de crecimiento para Brasil, al estimar que la principal economía de América Latina crecerá ahora un 2,1%, contra un 2,5% previsto a principios de este año.
El FMI indicó que la principal prioridad de Brasil es contener el aumento de la deuda pública, “garantizando simultáneamente que los gastos sociales se mantengan intactos”.