Una red sanitaria que no para de crecer
EL MODELO DE ATENCIÓN EN SANTA FE ESTÁ CONFORMADO POR TRES NIVELES DE COMPLEJIDAD ASISTENCIAL INTERCONECTADOS POR EL SISTEMA DE EMERGENCIAS Y TRASLADOS. EL GRAN DESAFÍO ES QUE TODAS LAS PARTES “DIALOGUEN EN FORMA PERMANENTE”, ASEGURÓ ANDREA UBOLDI.
La estrategia de gestión del sistema sanitario de la provincia de Santa Fe considera la salud como un derecho, garantizando una serie de principios que están vinculados con el acceso y la atención universal, gratuita, de calidad y centrada en la persona. Para esto, se trabaja en pos de un “sistema integrado, donde el sector público articule con el privado, y pensando en niveles de complejidad que actúen en red”, explicó la ministra de Salud, Andrea Uboldi. El primer nivel de atención está vinculado a la “puerta de entrada”, el centro de salud, los Caps o Samcos, que no tienen internación. Allí, se resuelven la mayoría de los problemas de salud que tiene la gente. Están distribuidos en distintos puntos estratégicos de la provincia, con equipos ampliados: “Antes había sólo un médico y una enfermera, pero de acuerdo a las características geográficas, culturales y demográficas armamos equipos que incluyan, además, personal administrativo para la carga de datos al sistema informático, odontólogos, psicólogos, trabajadores sociales, y especialidades médicas, pensando en qué equipo necesita cada lugar de acuerdo a las características propias”, aseguró quien dirige la cartera de Salud desde fines de 2017.
Ese sistema se comunica con un segundo nivel de atención que en la mayoría de los lugares de la provincia está garantizado por los hospitales de segundo nivel. Por ejemplo, en la ciudad de Santa Fe están el Sayago, el Mira y López o el Protomédico, que tienen ciertas especialidades, algunas prácticas quirúrgicas e internación. Para las dos ciudades con mayor cantidad de población -Rosario y Santa Fe- se pusieron en marcha, dentro de este segundo nivel, los centros de atención médica ambulatoria de especialidades. Así, el Cemar funciona en Rosario y el Cemafe, en Santa Fe. “El paciente tiene su equipo de referencia en el centro de salud, y si necesita cierta complejidad saca un turno programado con un especialista para Cemafe que lo atiende, lo orienta y vuelve luego a su centro de salud, donde está su médico de cabecera, que conoce dónde vive, cómo es su familia, etc.”. Uboldi detalló que trabajan con metodología diagnóstica (ecografías, mamografías, tomografías, etc); laboratorio (controles de embarazo, diabetes, clínicos); área de rehabilitación y de cirugías de baja complejidad que no requieren internación; además del resto de las especialidades. “Son estructuras muy innovadoras en Argentina, somos la primera provincia que las tiene y permite la planificación de turnos, de estudios y brindan una mejor capacidad resolutiva que cuando todo está centrado en los hospitales”. El punto fuerte de este “cambio de concepción” es que evita que la gente haga cola desde la madrugada para que lo vea un médico, con una turnera informática que cambia cada 15 ó 20 minutos.
Finalmente, el tercer nivel de atención agrupa a los hospitales que concentran internación y que están muy perfilados hacia la urgencia y emergencia.
Respecto al perfil pediátrico, en Santa Fe se apunta a que toda la atención esté concentrada en el hospital de Niños Orlando Alassia. “Por eso vamos a trasladar ahora la oncohematología pediátrica del Iturraspe al de Niños, que será de más baja complejidad respecto al Alassia”, aseguró la ministra.
El gran desafío de todo este modelo de atención, aseguró Uboldi, “es que toda esta red de primer, segundo y tercer nivel dialogue permanentemente. Y que los equipos se conciban como una red y no como hospitales aislados”.
Por último, la funcionaria remarcó tres aspectos más del sistema santafesino: la regionalización de las maternidades, que ordenó dónde debe parir cada mamá, teniendo en cuenta el lugar de procedencia y si el embarazo es normal o de riesgo; el sistema de emergencias y traslados, con postas y convenios firmados con municipios y comunas que permiten intercomunicar la red para que todos los habitantes de la provincia puedan ser trasladados; y la informatización de los pacientes y sus historias clínicas: “Ahora podemos buscar a los pacientes por su DNI, con nombre y apellido, y está todo su historial en el sistema”, cerró la responsable de la cartera sanitaria.
El Ministerio de Salud de la provincia de Santa Fe trabaja desde el 2007 en la creación y fortalecimiento de dispositivos sustitutivos que tienen por objetivo la desmanicomialización. En este sentido, la provincia cuenta con 130 dispositivos sustitutivos que a través de la producción, el trabajo, el entretenimiento y el arte aportan herramientas a personas con padecimientos subjetivos para que puedan transitar el mundo con la mayor autonomía posible.