Aumentan un 12,3% las jubilaciones a partir de septiembre
El haber mínimo llegará a unos $12.940 en ese mes
Con un aumento nominal de casi
12,3%, el haber mínimo jubilatorio a cargo de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) se elevará a aproximadamente $12.940 en septiembre próximo. La suba alcanzará a la totalidad de las prestaciones previsionales del sistema nacional –tal como dispone la ley de movilidad– y se sumará a la que se aplicará a partir de junio. En ese mes, los montos subirán un
10,74%, con lo cual la jubilación mínima será, entre el sexto y el octavo mes del año, de $11.528,44.
La recomposición por movilidad alcanzará también a las prestaciones no contributivas y al salario familiar que cobran los trabajadores formales. Entre marzo de este año y febrero de 2020, en cambio, no se prevén actualizaciones trimestrales para la Asignación Universal por Hijo (AUH), ya que el Gobierno anticipó las subas correspondientes a ese período en el caso de esa prestación en particular, al dar un aumento nominal de 46% a partir del tercer mes de este año. Desde entonces se abona un ingreso de $2652 por cada hijo a cargo.
A partir de junio, el haber máximo mensual será de $84.459 y desde septiembre, de alrededor de $94.830. La Prestación para el Adulto Mayor (PUAM), a la que se accede a los 65 años de edad sin necesidad de aportes, se elevará a
$9222,75 y a $10.355 en cada uno de esos meses, respectivamente. En el caso del pago por hijo, el monto será en junio de $2250 y en septiembre de $2526, para las familias ubicadas en el tramo de ingresos más bajos, según el esquema previsto: se trata de los hogares que perciben entre $4009 y
$34.877 mensuales. Cuando esos ingresos suman entre $34.877 y $51.152, la cifra será en junio de $1515. Para el tramo de $51.152 a $59.057, la prestación se elevará a $914 y, finalmente, si en el hogar se reciben cada mes entre $59.057 y $107.658, el cobro será de $469.
Los nuevos valores que estarán vigentes desde el mes próximo fueron confirmados días atrás por la Anses. Los datos de septiembre, en cambio, aún no son oficiales: surgen de aplicar la fórmula de movilidad establecida por ley. El cálculo contempla parte de la evolución de los precios minoristas y de los salarios formales de la economía. Y los datos tienen un rezago de seis meses.
Para definir la suba de septiembre se considera lo ocurrido con las dos variables en el trimestre de enero a marzo. Concretamente, se toma en cuenta el 70% de la evolución del Índice de Precios al Consumidor (IPC) publicado por el Indec, y el 30% de la variación registrada en igual lapso por la Remuneración Promedio Imponible de los Trabajadores Estables (Ripte). En el primer trimestre del año, esos indicadores tuvieron subas de 11,83% y de 13,33%, respectivamente.
Con las subas de marzo y junio, las jubilaciones y las otras prestaciones alcanzadas por la movilidad tuvieron una mejora acumulada de 23,84%. En tanto, si se considera el período de abril de
2018 a igual mes de este año, puede concluirse que hubo una pérdida de poder adquisitivo de 13%: en ese lapso, la inflación fue de 55,8% y la suba de ingresos, de 35,9%.