Los actores de Apache revelan secretos de la serie
streaming. Vanesa González, Alberto Ajaka y Balthazar Murillo, los protagonistas
Para el actor que tenía que encarnarlo en su etapa de adolescente se trataba directamente de un ídolo, estatus que solo creció cuando pudo conocerlo en persona: “Era y soy fanático de Carlos –dice con decisión Balthazar–. Toda mi familia lo es. Nos encanta como juega y cómo es. Cuando lo conocí me di cuenta de que es amable, gracioso y una muy buena persona. Y sigo siendo fan suyo”.
En la preparación para interpretarlo, Balthazar contó con el propio testimonio de Tevez. “Carlos nos contó cómo fue su vida y habló conmigo sobre cómo era él de chico, lo que había pasado, cómo había sentido las cosas. Con Adrián (Caetano) trabajamos cómo imitar la forma en la que habla él. Trabajé con una fonoaudióloga que me ayudó con la prótesis dental, porque los dientes me cambiaban mucho la voz, y después tenía esto”, dice el actor, señalando su cuello en donde tuvo un maquillaje especial para imitar la textura de la piel del jugador en esa zona, debido a las quemaduras provocadas por un accidente que sufrió cuando era chico. En cuanto a jugar al fútbol, Balthazar tiene experiencia jugando con amigos y en clubes, pero reconoce que, gracias a la magia de la ficción, a la hora de grabar escenas “no había que ser un crack”.
El joven actor no fue el único que pudo conocer a la persona real detrás de su personaje en Apache. Ajaka y González también se encontraron con Segundo y Adriana, en busca de algunas pistas para sumar a sus interpretaciones. “Fue un planteo de Caetano y pasamos una tarde con ellos –cuenta la actriz–. Pude conocer a Adriana y conversar un poco con ella. Tener la oportunidad de observar a la persona que te toca interpretar siempre te da un plus de información que sumar al imaginario que uno puede tener para hacer un personaje. Eso corre también con una responsabilidad y el compromiso de saber que esa persona existe, que va a ver lo que vos imaginaste de ella y cómo vos le pusiste el cuerpo”.
Aunque reconoce la importancia de su personaje y el de la actriz, Ajaka no deja de remarcar el lugar que ocupan como sostén del protagonista: “El personaje popular y público es Carlos, y la interpretación de Balthazar es la que está expuesta justamente a la mirada de intentar reconocer al Carlos de hoy como aquel de joven y aceptarlo como tal –dice el actor–. Me parece que la totalidad del material resulta verosímil en el mundo posible de los Tevez y de Fuerte Apache. Lo conocí a Segundo, eso te da información. Uno pone también el imaginario y la experiencia del oficio, y también el guion propone un camino sobre qué destacar de esos temperamentos”.
Los actores, que comparten elenco con Sofía Gala Castiglione, Diego Pérez y Patricio Contreras, entre otros, hablan sobre la importancia de la exigencia de Caetano, que también escribió los guiones junto con un equipo de escritores, y su visión para acompañarlos en el proceso de construcción de los personajes. González recalca, además, la importancia de haber filmado en el verdadero lugar de los hechos, el barrio Ejército de los Andes, conocido como Fuerte Apache.
“Hay una cosa muy presente de un grado de estar despiertos –dice González–. Hay algo de que todo sucede a la vez, de ver desde cómo se despiertan los coqueteos hasta la madre que está esperando un bebé, pero también va a buscar a sus otros hijos caminando y hay otras dos personas atrás que están comentando algo. La relación con el otro está muy presente. Pensando en mi vida, estoy como un poco más en el individualismo, más metida en mí misma. No es una decisión, sino un modo de vida. Ahí hay otro lenguaje”.
Ajaka conocía la zona porque fue a la escuela en Ciudadela, pero durante el rodaje pudo ver el barrio desde adentro y tener otra comprensión sobre lo que significa en la historia de Tevez. “La gente que vive ahí tiene una identidad muy fuerte –afirma–. No se van, se quedan. Tevez va mucho y tiene familiares que viven ahí. Los cruzábamos cotidianamente. Se le dice Fuerte Apache y claro que el lugar no es fuerte blindado, sin embargo, por algo se llama así. Tevez un día agarró en Inglaterra, se levantó la camiseta y decía Fuerte Apache. Nadie se lo pidió. Creo que hasta los Oasis se enteraron de que existe Fuerte Apache y vienen hinchas del Manchester United, club en donde él jugó, para ver el lugar. En la atmósfera se respira todo el tiempo pelota. La condición aguerrida y pícara para la vida que tiene Tevez me parece que en la instancia de estar ahí en el Fuerte son características que conviene tener; conviene ser un poco pícaro y un tanto aguerrido”.
Aun reconociendo los aspectos más difíciles y oscuros de la realidad del barrio, los actores opinan que no se podría haber filmado la serie en ningún otro lado. “Apache es Carlos Tevez y es el territorio en donde él vio la luz y que siguió pisando –dice Ajaka–. La familia de Tevez y todo ese mundo que está alrededor también es Apache. Se cuenta la épica de un personaje y también el territorio. El mismo barrio por momentos funciona como antagonista del héroe, se le impone. También lo favorece, porque están los amigos y los afectos, y la prepotencia de venir del barrio que se subleva”.