El Olimpo convertido en la máquina del rating
★★★ dramaturgia y dirección: María Inés Falconi. intérpretes: Claudio Provenzano, Marcelo Balaa, Matías Hirsch y Leo Spina. músico en escena: Federico Duca. música: Carlos Gianni. escenografía y vestuario: Carlos Di Pasquo. coreografía: Tati Martínez. luminación: Miguel Coronel. sala: Club Cultural Céspedes, Céspedes 3929. funciones: sábados, a las 21.30, a la gorra.
Ulises, con algo de nerviosismo, se apresta a responder al desafío. Ya no de navegar a su hogar en la isla de Ítaca, tras la larga guerra de Troya, sino de responder certeramente a la inquisitoria del concurso televisivo sobre
esas aventuras. Este Ulises contemporáneo, protagonista de una especie de reality, se enfrenta a un trío de dioses de estos tiempos, los presentadores de la pantalla chica.
El Olimpo convertido en la máquina del rating. Con todos los ingredientes que le corresponden: obstáculos más o menos arbitrarios, publicidad recurrente, suspenso un tanto artificial. Ulises, aun transpirando, triunfa rememorando los episodios que lo hicieron confrontar con la furia del cíclope Polifemo, con los encantos de la hechicera Circe. Supera paso a paso todas las etapas con cándido optimismo.
María Inés Falconi, autora y directora de la puesta, retoma la saga de Homero a la vez como recreación de la historia original –a través de las respuestas del participantey replicándola en el formato de la confrontación de un ser humano sagaz, pero pequeño en su poder frente a la gran diosa televisión. Los presentadores asumen explícitamente su condición de deidades al hacer de partenaires de la narración de Ulises con máscaras de Neptuno y Zeus y Atenea.
Claudio Provenzano como Ulises y Marcelo Balaa, Matías Hirsch y Leo Spina interpretando a los presentadores divinos llevan el doble juego histórico/contemporáneo con ritmo ágil y humor. En el momento en que amenazan nubes de reiteración se convierten en un trío de sirenas cantando boleros, redoblando la apuesta y las risas. Falconi logra plasmar con efectividad una forma distinta de llegar con un clásico a público preadolescente y juvenil. Y a los adultos también.