DAVIS EL TRIUNFO 3-0 SOBRE CHILE AVIVA LA ILUSIÓN DE LLEGAR A CUARTOS EN LA NUEVA COPA
Al vencer por 3-0 a Chile sin ceder sets en su estreno en el actual formato del certamen, la Argentina quedó cerca de los 4os de final, lo que implicaría evitar el repechaje de 2020 y un ingreso de dinero
La Copa Davis fue siempre muy especial para el tenis argentino. Provocadora de éxtasis y de lamentos profundos, de orgullo y fiesta y de tensiones internas que hicieron eclosión. Ahora empezó otra historia dentro de la historia mayor: el campeonato cambió sustancialmente su formato y queda por ver cómo se llevarán la Argentina y el trofeo de ahora en más.
En Madrid, la relación empezó bien. Óptima. En una superficie dura, que no es la que le cae del todo cómoda, el equipo de la Asociación Argentina de Tenis (AAT) se impuso a Chile por 3 a 0 en el grupo C y no perdió sets, se lucieron jugadores que necesitaban una alegría con la camiseta nacional puesta y quedó muy a mano el acceso a los cuartos de final, que entregaría varios beneficios, deportivos y económicos. Todo, ante un nutrido y ruidoso núcleo de hinchas que le dieron calor y aliento en la Caja Mágica.
El optimismo crece gracias a los triunfos, más amplios que lo esperado, de Guido Pella sobre Nicolás Jarry por 6-4 y 6-3, Diego Schwartzman contra Cristian Garín por 6-2 y 6-2 y Leonardo MayerMáximo González frente a JarryHans Podlipnik Castillo por 6-3 y 7-5. Hoy, desde las 7 de Buenos Aires, la Argentina se enfrentará con Alemania, el rival que completa la zona de tres conjuntos. Por cierto, más fuerte que Chile. Pero el equipo liderado por el capitán Gastón Gaudio tendrá un factor de gran tranquilidad: solamente una insólita combinación de resultados podrá impedirle, mañana, el avance a los cuartos de final. La Argentina no solo está 3-0 en partidos, sino además 6-0 en sets; como se pasarán de rueda los seis ganadores de las zonas y dos de los seis escoltas, las posibilidades de seguir en el torneo son escasas.
De no suceder esa intrincada –casi fortuita– mezcla de tanteadores, el seleccionado pasará a los cuartos de final, que se desarrollarán pasado mañana. Alcanzalos conllevaría dos ventajas más que interesantes: la instalación directa en el Grupo Mundial de 2020 –evitando el certamen de clasificación regional–, y un ingreso de dinero atractivo para la AAT, que depende de lo que recaude su equipo nacional al disputar la Davis para realizar sus actividades (desarrollo, torneos, premios).
Siempre el devenir del seleccionado en su ciclotímica relación con la Ensaladera de Plata fue determinante para la institución. cuando al equipo le fue bien, hubo más plata para hacer cosas. Cuando le fue mal, hubo menos. Y esta nueva Davis, que premia por separado a jugadores y asociaciones/ federaciones, es particularmente atractiva por la ventaja adicional de que esta vez no habrá peleas por los premios: existe una recompensa específica para los jugadores y otra específica para la entidad, otorgadas directamente por la Federación Internacional de Tenis (ITF) y por Kosmos, la empresa organizadora, cofundada por el futbolista español Gerard Piqué, de Barcelona. La organización no especificó cuánto habrá en caso de los que lleguen a los cuartos de final, pero se estima que habrá 800.000 para los deportistas y 400.000 para las instituciones. Como sea, cada parte tendrá lo suyo y no será necesario negociar entre dirigentes y tenistas.
Rompió el hielo Pella, que tenía enfrente a Nicolás Jarry un compromiso de más cuidado que lo que sugería el ranking mundial (25º el bahiense, 77º el trasandino) y a pesar de las siete caídas seguidas que su adversario venía de sufrir en el circuito. No hubo rajaduras: fue sólido el triunfo del campeón de la Davis en 2016. “Estuve prendido todo el partido, nunca me aparté de mi plan. Me ayudó mucho el ‘Gato’ Gaudio desde el banco y la gente también, ya que no paró de alentarme en todo el partido”, celebró Pella.
También Schwartzman desbordó de entusiasmo: “Creo que Alemania, si nos vio hoy, tiene que estar preocupada. Voy a tener que estar muy atento y cometer pocos errores”, avizoró Peque. El otro superávit del día fue el regreso, también feliz, de Leonardo Mayer al equipo, luego de casi tres años. Todo bien para la Argentina.
Como es lógico en Madrid, hubo muchos simpatizantes celestes y blancos. El propio Gaudio habló de ello: “Siempre decimos que la hinchada argentina es una de las mejores y hoy se notó. La gente apoyó un montón, cómo si fuéramos locales. Ojalá mañana esté igual y sea nuestro sexto jugador”, confió el capitán con miras al cruce con Alemania, que constará de Pella vs. Philip Kohlschreiber o Dominik Koepfer y Schwartzman vs. Jan-Lennard Struff. El capitán tiene mucha confianza: “El nivel de los jugadores ha sido increíble. Esta superficie siempre es difícil para nosotros, pero si Schwartzman y Pella siguen así de encendidos creo que tenemos nuestras chances”.