Riquelme acompañará a Ameal y pone en jaque al macrismo en Boca
Sobre el cierre de las listas, el ídolo expresó que participará activamente en la votación, contra el oficialismo; si gana, tendrá poder sobre el fútbol del club; Angelici se expresará hoy sobre el ex-10; Beraldi lo criticó y ratificó su fórmula
“Las negociaciones no cesan, puede pasar cualquier cosa. Hay que esperar hasta el último día, que va a ser intenso y puede traer alguna bomba”, repetían tanto desde el oficialismo como desde los diferentes frentes opositores. Ese último día fue ayer, el del cierre de las listas que serán opciones para los socios en la elección del 8 de diciembre. Hubo, en efecto, una bomba. Y el que detonó todo fue Juan Román Riquelme.
En otra aparición televisiva en el programa 90 Minutos, de Fox Sports, confirmó su decisión de ser el candiato a vicepresidente segundo de la fórmula compuesta por Jorge Amor Ameal y Mario Pergolini, un duro revés para el oficialismo, que aumenta el favoritismo de la dupla opositora que venía encabezando las encuestas.
Hace dos semanas el exfutbolista había elegido la misma vía, en medio de versiones que lo vinculaban políticamente con un lado y con otro, para pedir la unidad de todas las agrupaciones. “¿Cómo que no pueden? ¿No es que todos quieren al club? Es momento de que todos ayudemos a Boca. Si eso se produce, puedo pensar, incluso, en ser presidente”, había declarado entonces. No obstante, ayer reconoció que pidió algo utópico: “Es lo que tenía que hacer, lo normal. Quería que estuvieran todos juntos. Sabía que era un imposible, y finalmente no se pudo”.
Paradójicamente, Riquelme terminó inclinando la balanza hacia el más opositor de todos, el que no solo desistió de unirse con el oficialismo, sino también con José Beraldi, eliminando toda posibilidad de fusión. Los rumores ubicaban al ex-10 en los diferentes frentes según se producían las reuniones: “Mi postura es ayudar al club. El día en que perdimos en Madrid, mi hijo me pidió que volviera. Después de ese día en que salí a hablar, se comunicaron conmigo Ameal y el oficialismo, a quienes les agradezco por intentar convencerme. Pero tomé la decisión de formar parte de la lista en la que están Ameal y Pergolini. Creo que así tengo posibilidades de volver a mi casa”, sentenció quien se sabe ídolo de Boca, provocando una revolución.
La declaración fue un terremoto político. Aquella exigencia de unión había activado muchas acciones, especialmente desde el oficialismo. Automáticamente, Daniel Angelici convocó a todos los candidatos, con sus agrupaciones, a una reunión en el club a la que no asistieron Ameal ni Beraldi, que explicaron mediante comunicados separados los porqués de sus ausencias. Más allá de las razones que esgrimieron en las redes sociales, había algo: la intención de producir una alianza entre ellos. Porque esas urgencias que mostró Angelici les hizo sacar la conclusión de que desde ese lado ostentaban un fuerte debilitamiento y había una gran oportunidad. Entonces, aceleraron las charlas para armar juntos una sola lista y terminar de reducir las posibilidades de la fórmula Christian Gribaudo-Juan Carlos Crespi, la de la continuidad.
¿Por qué no se produjo? Todo parecía encaminado, y hasta en algún momento estuvo prácticamente cerrado. Pero la negociación no se completó porque los intereses pudieron más. “José [Beraldi] pidió ser presidente y 60% de la lista. También, el departamento de interior [por tener a su lado a Royco Ferrari, hombre fuerte en las provincias], el de fútbol, el de compras y otra gerencia. Nunca bajó las pretensiones y su ego hizo que no se cerrra. Vive en otra realidad”, comentaron a la nacion desde el frente que ayer subió puntos con la jugada de Riquelme.
El exjugador anunció que, en caso de ganar, será el vicepresidente segundo y tendrá una fuerte influencia en el deporte principal del club: “Voy a hacerme cargo del Departamento de Fútbol, que –creo– es aquello en lo que más puedo ayudar. Esperemos encontrarnos con un club económicamente muy fuerte para armar buenos equipos y pelear por todas las competiciones hasta el final. Ya en mi cabeza hay muchas cosas, nombres, ideas”, expresó sobre. También trascendió que lo acompañarán Sebastián Battaglia, Raúl Cascini y el colombiano Jorge Bermúdez, entre otros referentes de la época dorada.
¿Cómo quedó parado el oficialismo? El golpe es duro, pero según averiguó la nacion, no lo considera un KO. “Hay que esperar que baje la efervescencia de estas primeras horas post anuncio y luego será otro el escenario. Hay muchísimas cosas por destacar de la actual gestión”, dijeron. Incluso no descartan que en el corto plazo Angelici cuente detalles de sus negociaciones con Riquelme. “Va a morir matando”, grafican. De hecho, el binomio Beraldi-Ferrari criticó con dureza al ídolo en un comunicado, dando a entender que hubo intereses económicos. En tanto, César Martucci y Víctor Santa María bajaron sus candidaturas y se pronunciaron en favor de apoyar a Ameal.
Gribaudo-Crespi, Beraldi-Ferrari y Ameal-Pergolini, con el agregado de tener detrás el peso de Riquelme, serán las fórmulas para la elección del 8 de diciembre. Para el resultado habrá que esperar, aunque la bomba de ayer marcó una tendencia que parece difícil de dar vuelta.