La medicina hoy
Ya bien entrados en el siglo XXI y con esperanzas de acompañar los adelantos tecnológicos modernos que rigen en la actualidad, vemos una medicina presente que a pesar de no olvidarse del axioma básico, curar la enfermedad y el dolor de quien la sufre, deja de lado ese acercamiento afectivo hacia el paciente, a quien debemos otorgar no solo conocimientos científicos y experiencia sino quizás algo más importante: el conocimiento integral de la vida de quien nos consulta, acrecentando esa empatía médico-paciente que redundará en el éxito profesional y silenciosamente también en el éxito de la curación.
Hoy, desgraciadamente, esta relación se ha perdido, debido a los cambios producidos en economías empobrecidas que solo consiguen contradecir el concepto de socialización de la medicina que el Estado debería cumplir. Este tema, que filosóficamente fuera sugerido por autores como Rousseau en su “contrato social” y por Juan Perón, con su aporte del
justicialismo, ha perdido vigencia hoy. El costo de los medicamentos, consecuencia de regulaciones que impone el Estado, el intervencionismo exagerado y los análisis innecesarios para cumplir con las obligaciones hospitalarias hacen aún más difícil conseguir mejorar la medicina de hoy.
Es una expresión de deseo que en un futuro próximo los sistemas de salud sean realmente socializados y el paciente pueda recuperar esa hipocrática relación médico-paciente, que forma parte esencial en la curación del enfermo.
Manuel Sarrabayrouse Jefe honorario del Servicio de Cirugía Plástica del Hospital Italiano