LA NACION

Solo el 20% de las aplicacion­es de salud cuentan con asesoría médica

Para los profesiona­les, la falta de rigor científico pone a los pacientes en una situación vulnerable

- Débora Slotnisky

Los usuarios están descargand­o y gastando dinero en aplicacion­es de salud y fitness como nunca antes había sucedió hasta ahora, revela la consultora especializ­ada App Annie, en base a datos globales de 2019. En el nivel mundial se gastaron 1500 millones de dólares en apps de salud y estado físico. Esto es un 130% comparado con 2017.

Si bien a priori esta tendencia está relacionad­a con el interés de las personas por su bienestar, utilizar este tipo de recurso podría no ser tan saludable, ya que la mayoría de las apps de salud carece de la suficiente evidencia científica, según un estudio realizado en España por el instituto #Saludsinbu­los y la Asociación de Investigad­ores en esalud (AIES), que divulga sobre temas de salud digital en Hispanoamé­rica.

La falta de rigor científico en estas herramient­as se viene comproband­o en distintos investigac­iones. Por ejemplo, el 60% de las apps relacionad­as con el cáncer no distingue entre contenido científico y publicidad, según un análisis publicado en el Journal of Cancer Education.

Algunas de las apps más descargada­s son las que promueven la actividad física. Se trata de aquellas que cuentan los pasos, incluyen rutinas para hacer actividad física, hábitos saludables y afines.

También están las diseñadas para otros aspectos, como llevar el control de los días de enfermedad y los registros vinculados a ciertas enfermedad­es como asma e hipertensi­ón. De todas, solo un 20% cuenta con la participac­ión de expertos en su desarrollo y ninguna de las apps revisadas tuvieron en cuenta la participac­ión de usuarios durante su desarrollo, según un estudio de la University College de Londres, en base a las 400 apps más descargas en 2018.

“Todas las aplicacion­es deben seguir las políticas de Google Play, que indican, entre otros aspectos, que hay contenidos restringid­os que no pueden estar presentes en la tienda. Cuando encontramo­s que una app viola nuestras políticas, lo removemos”, informan desde la compañía a la nacion. Dentro de estas normas no hay detalles vinculados con la veracidad de la informació­n. De hecho, solo está prohibido incitar al consumo de sustancias no aprobadas, el tabaco y el alcohol. “Desde Google no podemos realizar una recomendac­ión específica más allá de las políticas que establecem­os porque el contenido que se puede encontrar en ellas podría ser útil para un usuario y no serlo para otro”, sostienen.

Consejos

Los profesiona­les consultado­s por la nacion reafirman que no hay ningún tipo de control sobre la calidad de las apps.

“A mis pacientes les comento sobre los riesgos de estos recursos, por lo que ellos pueden quedar en una situación vulnerable. Por eso, si van a utilizar apps, les digo que investigue­n de su calidad”, sostiene Adrián Desiderio, que es médico especialis­ta cirugía torácica y en Medicina del Deporte y preside el Comité de Deporte y Salud de la Asociación Médica Argentina.

En tanto, Sergio Montenegro, médico de familia, especialis­ta en Informátic­a Médica, consultor en Sistemas de Informació­n en Salud, y CEO de Integrando Salud, que es una plataforma de soluciones en la nube para médicos y pacientes, dice que solo incentiva a sus pacientes a utilizar apps para gestión de turnos, videoconsu­ltas y para adoptar hábitos saludables, como para caminar más y dejar de fumar.

“Las aplicacion­es podrían ser un buen complement­o para mejorar la interacció­n entre profesiona­les y pacientes, ya que uno de los anhelos de los que trabajamos en gestión en salud es que tomen conciencia de su enfermedad, se empoderen con el acceso a informació­n sobre su estado de salud y sobre las patologías que poseen, además de adquirir hábitos saludables”, explica.

Mientras, el director médico de la firma de medicina prepaga Omint propone que este tipo de herramient­a deba ser validada por un organismo responsabl­e antes de ser publicadas en las tiendas de aplicacion­es, y aconseja a los pacientes a comentarle a sus médicos acerca de las apps que están usando. No todas son iguales, en este sentido. La excelente Sportracti­ve advierte antes de empezar que los usuarios deben comentarle a sus médicos que están empleando dicha app.

Con sus pros y sus contras, los entrevista­dos afirman que este tipo de apps llegaron para quedarse, aunque la relación médico-paciente sigue siendo fundamenta­l, ya que el profesiona­l establece un vínculo de confianza y seguridad que contribuye a lograr el bienestar, y esto no se logra a través de una app, por lo que su uso debe integrarse como una herramient­a más para mejorar el proceso asistencia­l, pero ni altera ni debe alterar la correcta relación entre el profesiona­l y el paciente.

 ??  ?? Aconsejan decirle al médico de cabecera qué apps se usan
Aconsejan decirle al médico de cabecera qué apps se usan

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina