Cómo es el plan que le presentaron a Fernández para la poscuarentena
Unos 300 empresarios, médicos y científicos propusieron medidas para reactivar el país
En 53 páginas, unos 300 emprendedores, médicos, científicos, empresarios pymes, trabajadores y otros ciudadanos inquietos y preocupados, reseñaron un documento que le entregaron el viernes a Alberto Fernández. “Establecer la cuarentena en una etapa temprana al ciclo del contagio hace suponer que al día de hoy no seamos tantos los infectados”, se explica en el primer capítulo, de los ocho que componen el estudio. Inmediatamente, el meollo de la presentación: “No es sostenible seguir encerrados. Como país necesitamos poner en marcha nuevamente la actividad económica, en forma gradual y segura en términos sanitarios. Por cada semana donde el país funciona al 50%, se pierde cerca del 1% del PBI el año. Tampoco nuestro país cuenta con la capacidad de implementar programas de estímulo fiscal y monetario como lo hacen otros países”.
¿Qué hacer? A esa pregunta le dedicaron días de trabajo para elaborar un diagnóstico y un plan. Todo se divide en ocho capítulos.
1 Los testeos
Si bien se reconoce el valor de testear para conocer más de la enfermedad y tener estadísticas, el documento propone para el día uno después de la cuarentena mantener la distancia social y utilizar máscaras. Además, tomar la temperatura en todos los lugares posibles. Se recomienda que se mantenga la restricción de ingreso al país o la necesidad de hacer un test a cada viajero que ingrese.
Finalmente, promover “certificados de inmunidad” en la mayor cantidad de empresas y personas que puedan solventar el costo de los tests. Ese certificado se lograría con el llamado PCR negativo –hisopados nasofaríngeos, cuyo resultado podría estar en 24 horas– y serología, para detectar la presencia o no de anticuerpos en personas infectadas en el presente o en el pasado.
En este caso, los anticuerpos perduran en el suero, tanto en sintomáticos como asintomáticos. Son tests rápidos y económicos que se realizan con muestra de sangre. Las personas con este certificado podrían circular libremente.
2 Tecnología
La propuesta incluye la tramitación de un llamado “pasaporte ciudadano Covid-19”, un certificado electrónico para facilitar el tránsito de aquellos trabajadores claves (sanos e inmunes), incentivar y priorizar testeos (sintomáticos) y gestionar aislamiento selectivo de la población de riesgo e infectados. La app requerirá y validará los datos personales del usuario y guardará los datos de localización.
A esto se sumaría una aplicación para las autoridades que permitirá leer y validar los certificados de salud Covid-19. Esta plataforma serviría para monitorear en tiempo real el cumplimiento del aislamiento selectivo, el flujo urbano y los principales indicadores epidemiológicos, de movilidad y económicos.
Antes de comprobar el fallido intento de reapertura de bancos, que sacó a miles de personas a la calle, ya se había planteado la necesidad de una aplicación llamada “fila segura”, que permite a comercios, hospitales y otras dependencias gestionar las visitas de forma segura.
3 Reglas de aislamiento
Los aportes son variados: mantener el aislamiento de grupos vulnerables, establecer refugios para poblaciones con problemas habitacionales, generar grupo de voluntarios para asistir a personas mayores y uso masivo de barbijos en la calle.
El transporte público tiene un capítulo aparte. Para acceder se debería portar el pasaporte Covd-19. Se deberían aumentar frecuencias de transporte público con máscaras para choferes, alcohol en la entrada, uso de barbijo obligatorio, prohibición de estar parado y menos asientos.
4 Medidas financieras
El objetivo sería asistir a las pymes más pequeñas. La propuesta es usar el cheque posdatado. El scoring crediticio se reemplaza por la existencia de una relación comercial y la necesidad de las partes, basada en la historia de la relación proveedor-cliente.
La idea es la creación de un fideicomiso . Si un cheque fuera rechazado por falta de fondos, la cámara de compensación lo enviará al Fidepyme, que se convierte en acreedor. El fideicomiso abonará el cheque al depositante y le ofrecerá dos opciones para cancelarlo. En un pago o pagos parciales, o luego de 90 días en 36 cuotas mensuales, a una tasa de interés anual del 24 por ciento.
El fondeo del fideicomiso estaría a cargo del Tesoro nacional.
5 Medidas impositivas
Las propuestas se basan en dos aspectos. Postergación de vencimientos hasta el 30 de junio y permitir el pago de impuestos nacionales y provinciales con títulos soberanos a la par. Y se recepta la necesidad de que se autorice usar saldo técnico acumulados para cancelar otros impuestos.
6 Reducción del gasto público
Frente a un gasto desproporcionado, las propuestas son concretas. Suspender viáticos y gastos de representación; no pagar el bonus de
$10.000 a empleados públicos y dejar de hacer publicidad oficial, salvo comunicados e instrucciones sobre la pandemia.
También, dejar de destinar dinero a los procesos de obras públicas no iniciadas y de compras no relacionadas con la salud y no contratar nuevos empleados, salvo en las áreas directamente relacionadas al Covi-19.
Además, no pagar aportes a sindicatos estatales y empresas públicas mientras dure la pandemia y exigir a cada gerente general de cada empresa pública que se comprometa a presentar un plan de acción para bajar el
10% de gastos en su compañía.
7 El regreso de la Justicia
La cuarentena ha desactivado los servicios de Justicia en todo el país. “La situación de parálisis judicial casi total se prevé que se extienda todo lo que dure la cuarentena, y si no se comienzan a implementar soluciones de inmediato, posiblemente mucho más. La actuación tradicional de los tribunales atrae mucho tránsito e interacción de personas y de papeles y es alto el porcentaje de jueces y funcionarios (y abogados) mayores de 60 años, por lo que podría ser considerada como una actividad riesgosa y expuesta al contagio, cuyo reinicio se demore”, explica el documento.
La propuesta es simple: declarar explícitamente que la Justicia no está de vacaciones e implementar un sistema de trabajo remoto, como hizo gran parte del sector privado, y dejar dos empleados por juzgado para la atención necesaria. Después, claro está, digitalizar el proceso.
8 Mercados potenciales
“La Argentina debe, en la salida de la pandemia, convertirse rápidamente en lo más competitiva posible. Todos los productores de bienes y servicios globales saldrán al mercado en forma simultánea, y es probable que haya una demanda contenida que abastecer a nivel global”, se inicia el último capítulo.
El mundo saldrá con una fuerte demanda de bienes estratégicos. ¿Cuáles son? El agua potable y los alimentos; la energía eléctrica y los combustibles; los servicios de salud, educación, las tecnologías y medios de comunicación.
“Nuestro país debería focalizarse a nivel externo en la agroindustria, ya que los alimentos serán requeridos a gran nivel y aquí podremos hacer diferencia, ya que no todos los países están en condiciones de ser proveedores”, analiza.