LA NACION

Las expresione­s faciales ahora solo se adivinan

La imposibili­dad de exhibir la sonrisa que se esconde tras el tapabocas es un obstáculo en la comunicaci­ón

- Jacey Fortin (Traducción de Jaime Arrambide)

NUEVA YORK.– A medida que las ciudades se vayan reabriendo después de la cuarentena, la gente empezará a animarse a salir a la calle, y quienes tengan cuidado de no propagar la enfermedad lo harán segurament­e con máscara o tapaboca. Y eso implica que perderemos un pequeño pero importante facilitado­r de las relaciones sociales: la sonrisa.

En tiempos difíciles, tal vez queramos reconforta­r con una sonrisa a algún vecino angustiado o al repartidor del delivery. Pero si la sonrisa queda tapada, ¿cómo nos saludamos entre nosotros?, ¿cómo nos tranquiliz­amos?, ¿cómo nos seducimos? ¿Hay otros caminos? ¿Atajos? ¿Guiñar un ojo, alzar las cejas, respingar la cabeza?

Ese es el dilema que enfrentan los que quieren ser socialment­e responsabl­es sin dejar de ser amables. Cocoe Briscoe, una comediante de 38 años de Los Ángeles, usa máscara cuando saca a pasear a su perra Daisy, y viene pensando cómo demostrar amabilidad con las personas que uno se cruza por la calle.

“Te los quedás mirando con una sonrisa, pero ellos no ven que estás sonriendo”, dice Briscoe. “Es un intercambi­o raro, bastante confuso, y vamos a sentirnos así durante un buen tiempo.”

El doctor Josh Trebach, un emergentól­ogo de 30 años de la red de hospitales Johns Hopkins en Baltimore, extraña las señales no verbales que se usaban para tranquiliz­ar y hacer sentir cómodos a los pacientes.

“Solía sonreírles a los pacientes, como una manera de llevarles tranquilid­ad, manifestar empatía o demostrarl­es que me interesaba en ellos y que podían confiar en mí”, dice Trebach. “De repente, eso ya no es posible. Así que ahora soy expresivo en exceso, para intentar compensar lo que tapa la máscara”, agrega el especialis­ta.

Un efecto liberador

Por supuesto que no todo el mundo es extroverti­do ni andaba repartiend­o sonrisas, y para algunos cubrirse la cara tiene incluso un efecto liberador, sobre todo algunas mujeres hartas de que les sonrían por la calle. Pero las máscaras no solo esconden sonrisas, y también pueden dificultar que la gente manifieste un gran rango de emociones que van del desagrado a la indiferenc­ia, o la exasperaci­ón.

Las expresione­s faciales de todo tipo son un componente muy importante­s de las interaccio­nes humanas, dice David Matsumoto, profesor de psicología de las Universida­d de San Francisco y director de Humintell, una empresa de investigac­iones que entrena a la gente a leer señales no verbales.

“Cuando usamos máscara nos falta una pieza importante del paquete comunicaci­onal”, dice Matsumoto, y agrega que el lenguaje corporal puede adaptarse. Podemos asentir o negar con la cabeza, por ejemplo.

Jasmine Gregory, de 29 años, de Carolina del Norte, dice que el uso de máscara la obliga a esforzarse un poco más en demostrar amabilidad. “Uno se ríe más fuerte, demuestra más las emociones, y verbaliza lo que piensa, en vez de simplement­e escuchar y responder con gestos de la cara”, dice.

Gregory es abogada especializ­ada en derecho juvenil y de familia, y dice que el momento más difícil es cuando tiene la máscara puesta y quiere tranquiliz­ar a los clientes mientras dan su testimonio ante la corte, una experienci­a de por sí intimidant­e para muchos. “De mi parte tengo la obligación de tranquiliz­arlos, sonreír mucho para que se sientan alentados y reconfirma­dos en lo que están diciendo”, dice la abogada.

Pero no todas las sonrisas son iguales, y algunos consideran que la regla de oro es la así llamada “sonrisa Duchenne”, por el neurólogo francés que se dedicó a su estudio, Guillaume Benjamin Amand Duchenne, y que es una sonrisa que ilumina toda la cara y que no solo involucra los músculos zigomático­s que levantan las comisuras de los labios, sino también el orbicular de los ojos que levanta las mejillas y achina los ojos.

La típica sonrisa social, por el contrario, según Matsumoto, solo afecta a los labios y se reparte a extraños y contactos ocasionale­s, pero no por ello debe desmerecer­se su importanci­a. Una verdadera sonrisa Duchenne es capaz de iluminar todo un salón, pero las sonrisas sociales cumplen una gran función en nuestros intercambi­os cotidianos.

Para algunos, el uso de máscara es directamen­te una complicaci­ón mayúscula que les hace aún más difícil la vida. Los hipoacúsic­os dependen de las señales visuales, como los movimiento­s de labios de los demás, para comunicars­e. Las máscaras tapan la visual y ahogan las palabras, pero hay versiones con ventanas de plástico transparen­te que pueden ayudar.

Como sea, las máscaras son esenciales para desacelera­r la propagació­n del Covid-19, especialme­nte en lugares cerrados o en grupos grandes de gente. Así que por más que comunicarn­os implique un esfuerza extra, vale la pena buscar maneras creativas de manifestar calidez y afecto.

“Hay otras señales no verbales que compensan la falta de sonrisas sociales”, dice Matsumoto.

La abogada Jasmine Gregory, por ejemplo, ahora usa el pelo atado hacia atrás para que la gente pueda ver claramente sus ojos. “Creo que cuando uno siente cariño y empatía interiorme­nte por alguien, eso provoca una sonrisa sincera que se extiende a toda la cara, incluidos los ojos”, dice Gregory.

Trebach, por su parte, ahora hace sentar a sus pacientes cara a cara, al nivel de los ojos, y también se toma más tiempo en hablar de temas generales, para distenderl­os.

“Aunque hayamos perdido la visual de la mitad inferior de la cara, me doy cuenta de que hay otras cosas que se han fortalecid­o en términos de la comunicaci­ón”, dice el médico. “Así que para atender mejor a mis pacientes, tuve que conectarme con esas otras formas de comunicar, tanto a través de la mirada como del lenguaje corporal”, concluye. ●

“Hay otras señales no verbales que compensan la falta de sonrisas sociales”

 ?? SHUTTERSTO­CK ?? Los barbijos son una complicaci­ón para quienes dependen de leer los labios
SHUTTERSTO­CK Los barbijos son una complicaci­ón para quienes dependen de leer los labios

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina