Ferrari y Vettel, una tregua para no seguir hundiéndose
Rumbo al GP de España del próximo domingo, la Scuderia analiza aceptar un cambio de chasis
La convivencia es más tirante de lo que se proyectó el 12 de mayo pasado, cuando Ferrari y Sebastian Vettel anunciaron que la relación de seis años terminará al final de la temporada. El tetracampeón de la Fórmula 1 sufre en cada Gran Premio y la Scuderia se limita a descansar en la joven figura de Charles Leclerc. El piloto y el equipo se deben una tregua, la única salida que permitirá no profundizar las heridas. El alemán precisa reinventarse para asegurarse una butaca en 2021 y en Maranello necesitan de las últimas energías del germano para al menos atrapar la tercera plaza entre los Constructores: Red Bull Racing, que marcha segundo, detrás de Mercedes, ya duplicó en puntos al Cavallino Rampante.
El GP 70 aniversario, de anteayer, en Silverstone, fue otro fiasco del auto N°5. Vettel partió duodécimo, dibujó un trompo apenas iniciada la carrera, finalizó en la misma posición y se quejó de la estrategia que diseñó el equipo. La ausencia de feeling con el coche lo hizo explotar en la comunicación por la radio con el pitwall, toda una señal del deterioro y de la desconfianza. Si el análisis es más abarcador, no logró ser competitivo en ninguna de las dos citas en el autódromo británico, porque una semana atrás largó décimo y terminó... décimo.
“Desde el sábado de la semana pasada que no tuve ningún progreso”, analizó el alemán. El pedido de mayor carga aerodinámica hizo que transitar las curvas de media y baja velocidad fuera un suplicio. “No creo que pueda empeorar mucho desde la posición en la que estoy, así que confío en el equipo que me rodea”, disparó Vettel, que acumula 10 puntos en cinco GP’S, una cosecha que está solo por encima de los resultados de 2007 y 2008, sus primeras temporadas en la F.1.
Los contrapuntos entre Vettel y Mattia Binotto asomaron desde antes del comienzo del calendario y se acentuaron en cada capítulo del calendario 2020. El cruce de mensajes creció y frente al desplome, el líder del garaje optó por suavizar el discurso y reagrupar al conjunto, rumbo al GP de España. “Creo que lo que sea que podamos hacer para ayudar es importante para nosotros y para Sebastian, y lo vamos a intentar”, soslayó Binotto, en referencia a ejecutar un cambio de chasis si Vettel lo solicita.
En el circuito de Montmeló, Ferrari empezó a sufrir las consecuencias de los errores que terminaron en una concepción errónea, con un auto sin potencia y desequilibrio entre downforce y rag. La Scuderia no triunfa en Barcelona desde 2013, con Fernando Alonso; Vettel celebró solo una vez, en 2011 y con RBR. Otro doble reto para quienes deben convivir y fijarse metas, aunque sepan que en el futuro no caminarán juntos.