La cuarta generación de productores expande su horizonte

Las frutas argentinas viajan al exterior con su pasaporte lleno de sellos. Los países del Mercosur, Estados Unidos, España, Holanda, Australia y hasta Japón son algunos de los destinos que más demandan la calidad argentina, cuyo sector frutihortícola se consolida como potencia del hemisferio sur junto a Chile, Brasil, Perú y Sudáfrica.

En el caso de la pera y la manzana, la producción proviene casi en su totalidad del Alto Valle, es decir, Neuquén y Río Negro. De allí es la empresa Trevisur dedicada a la producción, empaque y comercialización de frutas frescas, que se enfoca fuertemente mercado de la exportación.

Cuando Agustín Raimondo llegó a la Argentina a principios del siglo XX, este joven nacido en Italia decidió emprender su propio negocio dedicándose a la producción de frutas. Luego continuó el negocio su hijo, Francisco Raimondo, con la comercialización en el mercado local. Con los años, la siguió su primogénito, Agustín Raimondo, el que quedaría a cargo de la empresa y actualmente, ya su cuarta generación: Lourdes Raimondo, que es quien la preside.

“Nos enfocamos fuertemente en la exportación, y con el correr de los años expandimos nuestro establecimiento creando y ampliando nuestra línea de productos y destinos. Sin embargo, los consumidores del mundo se han vuelto cada vez más exigentes, por lo que quieren llevar a su mesa productos de calidad internacional, incluyendo el packaging y la logística,” cuenta Lourdes Raimondo.

“Pese a luchar contra los altos costos de producción, empaque y comercialización, además de factores climáticos, la calidad de los productos nacionales en general y la fruta argentina en particular es codiciada en los mercados internacionales. Este fue uno de lo factores que nos llevaron a exportar, además de la diversificación de mercados y no depender exclusivamente de la economía local. Nos focalizamos en adquirir experiencia y en forjar alianzas con empresas extranjeras, así como también en poder lograr ventas en mayores escalas”, comenta.

Dentro de las actividades para las frutas, se destaca la participación local en las ferias internacionales del sector más importantes del mundo, como Fruit Logística (Berlín y Hong Kong), PMA Fresh Summit (California), Fruit Attraction (Madrid) y World Food Moscú (Rusia).

“Trabajamos mucho con la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional y la Secretaría de Comercio Exterior, viajando a todas ferias y mostrando nuestros productos. Estas ferias te permiten interactuar en un corto plazo con varios clientes y ver las novedades del mercado y cuáles son los productos de otros países que son nuestros competidores,” resalta

En el marco del aislamiento social, preventivo y obligatorio dispuesto por el gobierno nacional ante la pandemia de Covid-19, los agentes del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), continúan realizado la certificación fitosanitaria necesaria para la exportación de productos de origen vegetal. Antes de firmar el certificado fitosanitario, los inspectores verifican a través del sistema de reglamentaciones del Senasa que la mercadería cumpla los requisitos de sanidad y calidad establecidos por cada país comprador.

Por todo esto la empresa tuvo que adaptar la operatoria a los nuevos protocolos, “se relentizó todo el proceso y dividimos a los equipos de trabajo en dos. Estos nuevos protocolos que se implementaron, encarecieron la operatoria y como consecuencia de esto se trasladó al precio final”, añade.

Raimondo destaca y hace énfasis en que muy importante crecer y desarrollar nuevos mercados con relaciones comerciales de largo plazo. “Mas allá del contexto sociopolítico del país, nuestra meta es hacer conocer la fruta argentina en el mundo”, asegura.

La empresa exporta aproximadamente 8500 toneladas anuales. El 60% de la producción se destina a exportación en los siguientes países: Alemania, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Emiratos Árabes, Estados Unidos y Holanda entre muchos otros.

En el primer semestre de este año, a nivel nacional, la exportación de frutas frescas aumentó un 8,5% con respecto al mismo período del año anterior. En 2020 ingresaron a la Argentina US$446 millones a través de la venta de la fruta, mientras que en 2019 ese valor fue de US$411 millones.•