Las pruebas de la vacuna de Oxford se retomarían la semana próxima
Una comisión independiente investiga el caso que obligó a poner en pausa los ensayos; revelaron que la enfermedad que apareció en un voluntario es mielitis transversa
LONDRES.– Las perspectivas sobre la cercanía del lanzamiento de una vacuna para el coronavirus sufrieron un duro revés tras la decisión de Astrazeneca de suspender los ensayos globales de su vacuna experimental por la enfermedad inexplicable de un participante del estudio en Gran Bretaña, que según informó sería mielitis transversa.
En una señal de optimismo, el diario Financial Times citó a personas cercanas al ensayo que dijeron que podría reanudarse a principios de la próxima semana, después de que la junta de seguimiento de datos independiente del estudio haya terminado su investigación.
La vacuna, que la farmacéutica británica está desarrollando con la Universidad de Oxford, ha sido descripta por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como probablemente la principal candidata del mundo y la más desarrollada entre las ocho que se encuentran en fase 3. El organismo dijo ayer que las suspensiones temporales no son inusuales para evaluar cualquier enfermedad inexplicable en un participante.
Astrazeneca anunció anteayer que detuvo los ensayos para permitir que un comité independiente revise los datos de seguridad. También dijo que está trabajando para minimizar cualquier impacto potencial en el cronograma.
“Como parte de los ensayos clínicos controlados en curso de la vacuna AZD1222 se ha activado un proceso de revisión estándar que ha llevado a la pausa voluntaria de la vacunación en todos los ensayos para permitir que un comité independiente revise los datos de seguridad”, señaló la compañía en un comunicado.
“Esta es una acción de rutina que tiene que suceder siempre que haya una enfermedad potencialmente inexplicable en uno de los ensayos mientras se investiga, asegurando que se mantenga la integridad de los ensayos”, explicó la farmacéutica, y agregó que, en los ensayos de gran envergadura, las enfermedades a veces ocurren por casualidad, pero deben revisarse de forma independiente.
Por su lado, el ministro de Salud británico, Matt Hancock, afirmó ayer que la suspensión “es un proceso normal mientras se investiga el problema”, e indicó que esa “pausa no es necesariamente un contratiempo”.
La decisión se conoce en medio de informes de que Estados Unidos busca una aprobación por la vía rápida antes de las elecciones presidenciales de noviembre.
El principal experto en enfermedades infecciosas de Estados Unidos, Anthony Fauci, dijo ayer que la suspensión temporal de las pruebas finales de la candidata de Astrazeneca para vacuna contra el Covid-19 muestra “una de las válvulas de seguridad” que se han incorporado en los estudios para detectar cualquier problema.
“Es desafortunado que haya ocurrido y espero que puedan continuar con el resto del ensayo. Pero no se sabe, necesitan investigar más”, comentó Fauci, director de enfermedades infecciosas en los Institutos Nacionales de Salud, al programa This Morning, de la cadena CBS.
Hay mucho en juego con esta potencial vacuna porque Astrazeneca, el mayor fabricante de medicamentos británico por valor de mercado, ya acordó suministrar cerca de 3000 millones de dosis a los gobiernos de todo el mundo, lo que supera cualquier otro proyecto de vacunas.
La mayoría de los Estados contribuirán económicamente a su desarrollo, incluso si el ensayo falla.
El laboratorio dijo que está revisando con premura la información disponible para determinar si los ensayos pueden reanudarse lo más rápido posible.
Informe
Un informe de The New York Times que citó a una persona familiarizada con la situación dijo que se descubrió que un participante afincado en Gran Bretaña tenía mielitis transversa, un síndrome inflamatorio que afecta a la médula espinal y que suele ser provocado por infecciones virales (ver Pág. 5).
El artículo decía que no está claro si la enfermedad se relaciona directamente con la vacuna de Astrazeneca. “Las personas se enferman por múltiples razones, por lo que el equipo del proyecto ahora revisará en profundidad cuál es la causa de la enfermedad de esta persona y si está relacionada con haber recibido la vacuna o no”, dijo Doug Brown, director ejecutivo de la Sociedad Británica de Inmunología.
La suspensión provocó una caída de hasta un 4% en las acciones de Astrazeneca, que tienen la segunda mayor ponderación en el índice FTSE 100, pero se recuperaron y al cierre cotizaron con un alza del 0,5%.
El ensayo británico comenzó en mayo con más de 12.000 participantes, que van desde los cinco años hasta personas de más de 70 años.
Además, a finales del mes pasado, Astrazeneca comenzó a reclutar a 30.000 personas en Estados Unidos para su estudio más grande de la vacuna y también está realizando estudios más pequeños en Brasil y Sudáfrica.
“Que Astrazeneca haya pausado el ensayo de la vacuna contra el coronavirus es una indicación de que el proceso es seguro”, dijo a Fox Business ayer el asesor de la Casa Blanca, Scott Atlas.
“Esta es una de las razones por las que se realizan ensayos clínicos. Esta es una indicación de que los ensayos se están realizando de forma segura. Suceden cosas durante los ensayos; esa es parte de la razón por la que no podemos predecir exactamente cuándo estarán disponibles las cosas”, agregó.
En tanto, el presidente Andrés Manuel López Obrador dio un mensaje de calma a los mexicanos, tras la pausa en los ensayos de la vacuna de Astrazeneca, en cuya producción planea participar su país. México y la Argentina acordaron con la farmacéutica anglosueca producir la vacuna de manera conjunta.