La Ciudad pedirá habilitar recitales al aire libre
Sería para hasta 300 personas; ya se tramita ante el gobierno nacional
Con la autorización para practicar deportes individuales al aire libre, en julio pasado y en pleno ascenso de la curva de casos de Covid-19, la ciudad de Buenos Aires comenzó a establecer como política la flexibilización de actividades para salir, progresivamente, de las etapas más estrictas del aislamiento.
La administración porteña intentará avanzar ahora en otra medida de alto impacto: la autorización de eventos culturales en espacios públicos al aire libre con una participación máxima de 300 personas aunque el número final podría cambiar. La propuesta fue puesta sobre la mesa en las últimas reuniones que mantuvieron los equipos de Nación y Ciudad, a través de ambas jefaturas de Gabinete, y se espera que haya confirmaciones en los próximos días.
El Ministerio de Cultura porteño concentró el pedido del sector artístico para que comiencen a flexibilizarse las actividades luego de varias semanas de eventos vía streaming. Si la propuesta avanza, se autorizarían recitales, obras de teatro y otros shows en plazas y parques, según informaron fuentes oficiales.
Aunque el pedido ya fue elevado al jefe de Gabinete de la Nación, Santiago Cafiero, aún falta definir los protocolos que establecerán las medidas sanitarias y de prevención a tomar en cuenta en las actividades, en caso de que se autoricen. En los últimos meses, además de los shows vía plataformas digitales, también se abrieron varios autocines en la ciudad y el conurbano como parte de la oferta cultural adaptada a los tiempos de pandemia.
La apertura de shoppings con un número controlado de clientes y el regreso de empleados domésticos con domicilio en Capital Federal serían las otras dos actividades que intentarán impulsar en la nueva etapa.
Con una situación sanitaria más aliviada, después de los picos de contagios de julio y agosto, con una media móvil que marca la evolución del promedio de casos de los últimos siete días, en el gobierno estiman que se genera un escenario propicio para avanzar en los pedidos, más allá de que la prioridad aún continúa siendo el regreso de las clases presenciales, sobre todo para los 6500 alumnos que perdieron vinculación durante la cuarentena.