james bond los fabulosos autos del agente 007
Una vez más, No Time to Die, el 25° film de la saga se pospuso, ahora para 2021; sin embargo, Aston Martin anunció los cuatro modelos de la marca que utilizará Daniel Craig en la nueva película
EON Productions y MGM Studios anunciaron que, una vez más, el esperado estreno de la 25a. película del intrépido agente secreto 007, No Time to
Die, se postergó hasta el 2 de abril de 2021. Prevista para abril de este año y luego reprogramada para noviembre, el último film en el que Daniel Craig protagonizará a James Bond tendrá un especial encanto para los fanáticos de los buenos automóviles.
Se sabe que “el auto” de James Bond es un Aston Martin, por más que en la saga haya usado otras marcas (como Lotus y BMW). Y esa “preferencia” del súper agente creado por Ian Fleming se muestra a pleno en el próximo estreno. Así, para matizar la espera, la casa británica de autos deportivos anticipó que 007 utilizará cuatro modelos AM en No
Time to Die: dos clásicos, el ya famoso DB5 y el V8 Vantage, así como dos de sus superautos actuales: el espectacular GT DBS Superleggera y el hypercar Valhalla.
La estrecha vinculación entre AM y James Bond llega al punto que el fabricante inglés bautizó como Q by Aston Martin a su diron visión para desarrollar ediciones limitadas de sus modelos actuales (pequeñas series con detalles, equipamiento y colores exclusivos). En ese tono, el 17 de agosto último Aston Martin presentó en Gaydon, sede de la compañía, dos versiones especiales en honor de No Time to
Die: el Vantage 007 Edition, que rinde homenaje al AM V8 Vantage del film The Living Daylights (protagonizado por Timothy Dalton) y el DBS Superleggera 007 Edition, con las especificaciones de lujo de la versión utilizada en la película por estrenar.
Una asociación legendaria
El lunes 5 de octubre se cumpliecomando 58 años del estreno de la película inaugural de la saga 007, Dr.
No (o El satánico Dr. No, como se conoció aquí), con el mítico Sean Connery en el papel estelar. Pero no fue hasta la tercera entrega,
Goldfinger (1964), cuando el propio Connery introdujo en el universo Bond al Aston Martin DB5, por entonces el ícono deportivo de la marca de Gaydon. El DB5 se fabricó entre 1963 y 1966, con la carrocería firmada por el estudio Carrozzeria Touring Superleggera, famoso por sus construcciones ultralivianas.
El DB5 fue el primer modelo de AM en estar equipado con el motor de 6 cilindros en línea y 3995 cc diseñado por Tadek Marek, legendario ingeniero de la marca británica, con doble árbol de levas a la cabeza y alimentado por tres carburadores SU, desarrollaba, para la época, fabulosos 282 HP a 5500 rpm de potencia máxima y un torque de 390 Nm a 3850 rpm, lo que le permitía alcanzar los 240 km/h y acelerar de 0 a 100 km/h en 8 s. Su interior estaba tan equipado que la revista Motor escribió: “Solo un aeroplano podría tener un panel de instrumentos tan completo”.
Que el DB5 es el auto más emblemático del agente 007 no caben dudas: aparece en las películas Goldfinger (Dedos de oro, 1964), Thunderball (Operación Trueno, 1965) al de Sean Connery; Golden Eye (1995), Tomorrow Never Dies
(El mañana nunca muere, 1997), a cargo de Pierce Brosnan, y en Casino Royale (2006), Skyfall (2012) y
Spectre (2015), ya en la era de Daniel Craig. Aunque no lo utilizó nunca como James Bond, Roger Moore sí lo hizo en un capítulo de la serie televisiva El Santo (en la que su auto icónico era el Volvo 1800) en 1963: créase o no era la misma unidad, pero pintada con su color original rojo oscuro, que utilizó Sean Connery (después) en Goldfinger.
El DB5 de Bond tenía todo tipo de artilugios (ametralladoras,
lanzacohetes, etcétera), así que en 2018 Aston Martin y EON Productions decidieron fabricar una edición limitada de 25 unidades del modelo (más de 50 años después), denominada Goldfinger DB5 continuation edition, pintada de Silver Birch (el gris del original) y con todos los “gadgets” (que funcionan de verdad, aunque son obviamente inofensivos) del auto del film, creados para esta serie especial por Chris Corbould, ganador del Oscar a los efectos especiales. Cada unidad costaba 2,75 millones de libras esterlinas y se esperaban las primeras entregas para este 2020… ¡Ah! y el auto no es legal para circular.
Poco conocido
El Aston Martin V8 Vantage es el vehículo de Timothy Dalton en The
Living Daylights o Su nombre es peligro (1987). El modelo se fabricó entre 1969 y 1990, 21 años en los que la compañía de Gaydon cambió varias veces de dueños y de rumbo para atravesar una incierta década del
’80, en la que este modelo ayudó a mantener a flote la empresa.
Se trata de una coupé fastback, muy al estilo del Mustang II que inmortalizó Steve Mcqueen en Bullitt (película famosa por su espectacular persecución real por las calles de San Francisco); tan parecida en realidad al pony car americano, que algunos la llamaron el “muscle car” británico. Obviamente, la mejor serie del V8 Vantage tenía un motor
V8 de 5.3 L con cuatro carburadores Weber doble boca de 48 mm y desarrollaba 390 HP a 5800 rpm de potencia y 550 Nm a 4500 rpm de par. Con esta configuración, el modelo llegaba a los 270 km/h y aceleraba de 0 a 100 km/h en 5,3 s (una décima más rápido que la Ferrari Daytona, aunque ésta lo superaba en velocidad máxima). También hubo versiones con motores de 6.3 L y potenciadas de 7.0 L y 450 CV.
En la película, además del coupé aparece la versión descapotable, la
V8 Vantage Volante (el dueño de la unidad era Víctor Gauntlett, presidente de Aston Martin Lagonda por entonces). Sin embargo, ni Dalton ni estos Vantage quedaron entre los preferidos de los fanáticos de 007.
Tecnología del siglo XXI
El tercer auto que aparecerá en la
25a. película de James Bond es una de las joyas del actual catálogo de Aston Martin. El DBS Superleggera, un súper GT lanzado en junio de 2018, que rinde homenaje a la histórica tecnología de construcción ultraliviana patentada por los carroceros italianos del mencionado estudio Carrozzeria Touring Superleggera. Por eso, este GT con silueta coupé de dos puertas y cuatro plazas tiene una estructura ligera de aluminio y paneles de carrocería y elementos aerodinámicos de fibra de carbono, por lo que pesa solo 1845 kg; además, cuenta con un gran nivel de equipamiento y conectividad.
Está equipado con un motor V12 biturbo de 5.2 L (5204 cc) de cilindrada, que entrega una potencia de 725 CV a 6500 rpm y un brutal par de 900 Nm a 5000 vueltas (el mayor torque en la historia de Aston Martin), más transmisión automática de 8 marchas y tracción trasera. Con esta mecánica, el DBS Superleggera registra una velocidad máxima de 339,6 km/h y una tremenda aceleración de
0 a 100 km/h de solo 3,4 segundos. El consumo urbano es de 18 L/100 km y el extraurbano de 9,1 L/100 km. En el
Reino Unido cuesta 225.000 libras; en Alemania, 274.995 euros, y en Estados Unidos, US$304.995.
La aparición de este súper modelo en No Time to Die es un tributo de Aston Martin para el DBS del sexto film de la saga, On Her Majesty’s Secret Service (Al Servicio de su Majestad) de 1969, en la que George Lazenby suplantó al irremplazable Sean Connery.
No fue el único homenaje a ese modelo de 1969 por parte de AM. De hecho, en mayo del año pasado la firma inglesa lanzó una edición limitada de 50 unidades de nuestro conocido DBS Superleggera denominada como la película para celebrar el 50° aniversario del estreno de la misma. Para eso, tanto la pintura exterior (Olive Green) como la interior (roja) recrean el DBS usado por Bond en 1969. Cada OHMSS DBS Superleggera cuesta módicas £300.007.
Un superauto del futuro
El paraíso de los guerreros vikingos, el Valhalla, le da nombre al más reciente y furioso hypercar de Aston Martin, desarrollado en colaboración con el equipo Red Bull de Formula1 y su ilustre diseñador Adrian Newey (que pasó por Williams y Mclaren antes de recalar en el RBR, siempre con autos de gran suceso). A diferencia de la mayoría de los AM, éste tiene motor central (a espaldas del ceñido habitáculo), también al estilo F1. Estrena el primer motor “hecho en casa” de Aston Martin en décadas: el V6 TM01 3.0 L Twin Turbo combinado con un sistema KERS (Kinetic Energy Recovery System) eléctrico, como el que usaron los
F1 entre 2009 y 2013, para conjugar una mecánica híbrida de 1000 CV de potencia. Además, será el primer auto de calle en utilizar el sistema de lubricación Castrol Nexcel, que permite el cambio del aceite en solo
90 segundos. Vale mencionar que la sigla TM en el motor es para recordar al mencionado Tadek Marek, el ingeniero que diseñó el motor del
DB5 y otros Aston Martin.
Por el uso intensivo de fibra de carbono en el chasis monocasco y la carrocería (con gran “downforce”) pesa solo 1350 kg. Aún no hay mayores precisiones de performance, pero el año que viene el Valhalla saltará de
No Time to Die a los concesionarios de Aston Martin. Solo 500 unidades serán fabricadas.
Ediciones especiales
El próximo estreno de James Bond trajo aparejado, como se dijo, el lanzamiento por parte de Q by Aston Martin de las series limitadas DBS Superleggera 007 Edition y Vantage
007 Edition. Serán solo 25 unidades de la primera, que mantiene toda la configuración básica del modelo estándar, pero le agrega el equipamiento y detalles del que usará Daniel Craig en No Time to Die. el distintivo color gris del DB5, ahora denominado Ceramic Grey, con techo, espejos, difusores, alerón trasero (Aeroblade II) en fibra de carbono negra y llantas exclusivas de 21 pulgadas. Cada DBS Superleggera 007 Edition cuesta £279,025.
Por su parte, el Vantage 007 Edition muestra la exclusiva grilla cromada que referencia a los modelos
V8 de AM. También gris (Cumberland Grey) en el exterior, los tapizados de cuero interiores son en negro obsidiana y la consola de cromo oscuro con el sello 007 y la palanca de la caja de velocidades manual (un guiño al V8 Vantage de la película Su nombre es peligro de
1987), que equipó a la versión limitada Vantage AMR, más un diferencial trasero con control electrónico (E-diff). El corazón del Vantage es un V8 4.0 L biturbo de origen Mercedes-amg que desarrolla 510 CV a 6000 rpm y 685 Nm entre 2000 y
5000 rpm. Con estas especificaciones el Vantage no se achica: acelera de 0 a 100 km/h en 3,7 s y alcanza una velocidad tope de 314 km/h. El consumo no está nada mal para un
V8 así: 14,4 L/100 km en ciudad y 8,2
L/100 en el ciclo extraurbano. De la Vantage 007 Edition se fabricaran
100 unidades a un precio de 161.000 libras esterlinas.
A estas alturas, James Bond es inimaginable sin un Aston Martin. Al fin y al cabo es lógico, son dos símbolos de la cultura británica.
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