Un tributo a los clásicos todoterreno ingleses
La próxima película de James Bond,
No Time to Die, parece tener el estacionamiento más grande de la saga, porque además de los cuatro Aston Martin, también hace su presentación estelar y más que espectacular (con saltos de 30 metros y maniobras increíbles) el nuevo Land Rover Defender. “Superamos todos los límites posibles con el Defender para mostrar a los fanáticos el extraordinario reto que fue grabar la emocionante secuencia de persecución que disfrutarán en No time to
Die”, sentenció Lee Morrison, coordinador de las “acrobacias” con los todoterreno ingleses.
Esta segunda generación reemplaza al legendario y clásico Defender
que subsistió entre 1948 y 2016, cuando fue discontinuado porque era imposible que cumpliese con diversas normas de seguridad.
Con gran capacidad off-road, la gama cuenta con versiones de 3 (Defender 90) y cinco puertas (110) y dos motores nafteros (4 en línea 2.0 L turbo de 300 CV, y 6 cilindros 3.0 L turbo de 400 CV) y uno diésel (4 cilindros 2.0 L turbo de 200 CV o 240 CV). Además hay modelos híbridos enchufables. En la película, Daniel Craig también aparece manejando un Defender Serie III, que se fabricó entre 1971 y 1985. Como en caso de Aston, también con LR el agente 007 rinde tributo al pasado y el presente de las marcas británicas.