La vuelta a la campaña desde el balcón
En su primera aparición antes del retorno a los mítines, les habló a seguidores desde la Casa Blanca; “¡me siento genial!”, dijo; el gobierno aún no despeja las dudas sobre la infección del presidente
WASHINGTON (De nuestro corresponsal).– En su primer evento público desde que se contagió de coronavirus, Donald Trump –sin barbijo– encabezó un acto ayer desde un balcón de la Casa Blanca ante cientos de seguidores, en un esfuerzo por relanzar su campaña para las elecciones del 3 de noviembre antes de volver a los mítines. Fue un hecho inusual en la historia del país, poco habituado a los actos electorales en la Casa Blanca. “¡Me siento genial!”, dijo el presidente, en un discurso en el que lanzó varios ataques a su rival, el demócrata Joe Biden.
WASHINGTON.– Luego de una semana recluido en un hospital y en la Casa Blanca con coronavirus, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a dar un discurso público desde el balcón de la residencia oficial ante seguidores latinos y afroamericanos, en una aparición que fue encuadrada por el gobierno como un acto oficial, y que le permitió al mandatario precalentar para el regreso a la campaña, esta semana.
“¡ Me siento genial !”, les dijotrump a sus seguidores en un discurso muy corto, de 17 minutos, en el que lanzó varios ataques a los demócratas y a su rival para las elecciones del 3 de noviembre próximo, Joe Biden. Una vez más, el mandatario dijo que el coronavirus iba a desaparecer, cuando Estados Unidos ya superó los 7,7 millones de contagios confirmados y las 214.000 muertes. Trump fue recibido con el grito de “¡Cuatro años más! ¡Cuatro años más!”.
“Tenemos que votar a esta gente al olvido. Al olvido. Tenemos que deshacernos de ellos. Es tan malo para nuestro país”, dijo apenas empezó su discurso, al hablar de los demócratas, a quienes acusó de querer llevar a Estados Unidos al socialismo.
Trump –que usó la Casa Blanca para un acto de campaña, algo inusual– habló ante cientos de afroamericanos y latinos reunidos en el movimiento #Blexit que cubrieron el jardín sur de la residencia oficial de color celeste y rojo. Muchos vistieron las gorras proselitistas de Trump con la leyenda “Make America Great Again”, ofreciendo una atmósfera casi calcada a los actos de campaña del mandatario en la Casa Blanca.
El encuentro sirvió para marcar el regreso de Trump a la vida pública luego de una semana en la cual solo se vio en videos publicados en sus redes sociales y algunas entrevistas por Fox News, su canal predilecto, y su gobierno quedó totalmente desbordado por el brote de coronavirus que lo forzó a internarse en el hospital el fin de semana pasado y suspender su agenda. Ahora, ya supuestamente recuperado, el mandatario regresará a la campaña con actos en Florida, pensilvania y Iowa el lunes, martes y miércoles, respectivamente.
La vuelta a la arena pública llegó en medio del mar de dudas que hay sobre el estado de salud de Trump, una cuestión que los funcionarios de la Casa Blanca se niegan a termina de despejar del todo, incluso soslayando preguntas básicas como cuándo contrajo el coronavirus, o si efectivamente ya ha dado negativo a las pruebas. Usualmente los expertos recomiendan que un paciente en recuperación dé negativo al menos tres veces para asegurar que su sistema inmune ya ha logrado deshacerse del virus.
“Cada día, más negros y latinoamericanos están dejando atrás a los políticos de izquierda y su ideología fallida. Eso es lo que son. Fracasaron durante muchos años y muchas, muchas décadas”, dijo Trump. “Los demócratas han gobernado casi todos los barrios marginales de Estados Unidos, y me refiero a cien años, y sus políticas no han producido más que calamidades, pobreza y problemas. El soñoliento Biden traicionó a los afroamericanos y latinos. Si crees que puede gobernar este país, estás equivocado”.
Acusaciones
El gran hilo conductor del discurso de Trump fue acusar a los demócratas de querer llevar a Estados Unidos al socialismo, una de las principales líneas de ataque del mandatario. “El programa y la plataforma socialista de los demócratas, y realmente es más que socialista. No es solo socialista; está más allá del socialismo”, dijo Trump. “¡Comunista!”, gritaron desde el jardín. “Dice ‘comunista’. Eso es... sí, eso es correcto”, respondió Trump entre risas. En su Twitter, el presidente acusó a Biden de ser “una marioneta del castrismo y el chavismo”.
La campaña en Estados Unidos ingresó en el último tramo con Biden al frente en la mayoría de los sondeos, tanto a nivel nacional como en los ocho estados pendulares (swing states) en los que se resolverá la disputa. El hecho de que Trump regrese a hacer campaña en Iowa, un estado que parecía seguro en su columna, y vaya a Johnstown, uno de los bastiones trumpistas de pensilvania, sugiere que el equipo del mandatario puede asumir que está en mayores dificultades de lo que admiten en público.
Trump ofreció un mensaje triunfalista, al decir que el entusiasmo por su campaña era más alto que nunca y elogiar algunos sondeos favorables, pese a que las encuestas lo muestran perdiendo.
“Así que obtuvimos una gran encuesta en Florida, obtuvimos una excelente encuesta en Carolina del Norte, logramos una excelente encuesta en Arizona y una gran encuesta en Nevada. Acabo de obtener una gran encuesta en Nevada. Creo que lo estamos haciendo muy bien. Esto se suma a los estados que vamos a ganar. Georgia se ve fantástica. Texas se ve fantástico”, afirmó.