San Lorenzo se ilusiona con volver a Boedo
Por amplísima mayoría, los diputados dieron aprobación inicial a la rezonificación del predio de avenida La Plata, que habilita al club a construir su cancha; sumará también equipamiento social y oficial
El entorno de la Legislatura se vistió de azulgrana con los festejos de los hinchas de San Lorenzo por la aprobación inicial de una ley que rezonifica el predio de Boedo donde funcionó el Viejo Gasómetro para permitir que vuelva a alojar un estadio. Adentro, siguieron la sesión el presidente del club, Marcelo Tinelli, y el ministro Matías Lammens. El nuevo desafío será conseguir los fondos, estimados entre US$70 y 100 millones.
Los cuervos están de festejo. Durante la sesión de ayer, la Legislatura de la ciudad sancionó en primera lectura el proyecto de ley impulsado por el club San Lorenzo, que lo autoriza a construir su nuevo estadio deportivo, con capacidad para 42.000 personas, en el predio situado en avenida La Plata al 1700.
Con esta aprobación, el club comienza a dar cierre a lo que será su vuelta a Boedo, que empezó a gestarse en 2012 con la llamada ley de restitución histórica, sancionada por la Legislatura por unanimidad, que declaró de utilidad pública y sujeto a expropiación el predio de avenida La Plata, entre Las Casas e lnclán, en la comuna 5.
Además de la construcción de la nueva cancha, la iniciativa plantea dividir el terreno en cuatro grandes zonas, en las que se abrirán una escuela, oficinas gubernamentales, comercios y edificios de servicios públicos. También se habilitarán cocheras subterráneas y espacios verdes de acceso público. La iniciativa fue aprobada por 58 votos a favor, con la única abstención de la diputada Marta Martínez (Autodeterminación y Libertad) (ver aparte).
El diputado del Frente de Todos (FDT) que recogió el club del club, Manuel Socías, aseveró: “Lo que estamos tratando acá no es una sorpresa para nadie, solamente estamos terminando un trámite que comenzó en 2012 con la recuperación del predio de avenida La Plata, algo que pagaron los socios peso por peso”. Y destacó: “No están pidiendo que paguemos nada, nos están pidiendo que los dejemos volver al barrio del que fueron desplazados ilegítimamente”.
Mientras en el recinto avanzaba la discusión, en un salón de la Legislatura porteña esperaban el resultado el presidente de San Lorenzo, Marcelo Tinelli; el expresidente y actual ministro de Turismo y Deportes nacional, Matías Lammens, y otros dirigentes. En tanto, en las inmediaciones del palacio situado en Perú 160, cientos de hinchas se movilizaron en apoyo a la iniciativa y reclamaron su aprobación al grito de “Justicia por San Lorenzo” y “Va a volver, San Lorenzo va a volver”.
En ese sentido, el radical Juan Francisco Nosiglia (Ucr-evolución) explicó a LA NACION: “Este cuerpo discutió y aprobó la necesidad de restituir las tierras donde San Lorenzo albergó su estadio durante décadas y de las que fue despojado en un proceso oscuro e ilegítimo por la última dictadura militar”. Agregó que “este proyecto es parte de la lucha de muchísimos años de los hinchas, socios y dirigentes de San Lorenzo por volver al barrio que les dio origen”.
Para lograr su sanción definitiva, el proyecto deberá pasar por una audiencia pública y volver a la Comisión de Planeamiento Urbano de la Legislatura, donde se debatirán eventuales cambios y será remitido nuevamente al recinto para ser votado. Luego, San Lorenzo deberá firmar un convenio urbanístico con el gobierno porteño.
“De cara a la segunda lectura, hay que escuchar a los vecinos en las instancias de participación y también imaginar instrumentos de compensación para quienes viven en las inmediaciones del predio. Así construimos una política que contemple a todos los actores involucrados y privilegie el bienestar general”, concluyó Nosiglia.
Sucede que la sanción se da en medio de críticas de un grupo de vecinos de Boedo, quienes se oponen a la construcción y el funcionamiento del estadio ya que consideran que atentará contra la tranquilidad del barrio y que depreciará el valor de las viviendas, entre otras cuestiones. Ante esta situación, la Legislatura porteña incorporó un artículo a la ley en el que estableció un mecanismo de participación para que los vecinos puedan expresar sus opiniones, que se implementará mediante reuniones que serán moderadas por el gobierno de la ciudad.
En ese sentido, el diputado de GEN Sergio Abrevaya manifestó: “La preocupación de ellos es muy grande, no solo por el fútbol, sino también por los recitales, las alturas del estadio y construcciones, es decir, el impacto ambiental”. Recordó que presentó “un proyecto para que se incluya la participación vecinal, artículo que fue sumado. La gente tiene que poder conversar, conducida por el Estado, en un ambiente seguro, sin presiones y exponer sus inquietudes acerca de la llegada de esta obra gigantesca”.
Durante el debate del proyecto en la Comisión de Planeamiento Urbano, el intendente de San Lorenzo, Sergio Constantino, informó que ya el club realizó un proceso de participación vecinal, con 17.653 llamadas telefónicas y 4350 encuestas. “Boedo pide honrar el legado y su historia barrial; los vecinos esperan más que un estadio: quieren espacios de recreación y que les permitan realizar actividades culturales. Será la inversión privada más grande de los últimos años: se generarán 1500 puestos de trabajo, se invertirán 80 millones de dólares y participarán 42 gremios”, afirmó.
La presidenta de esa comisión, Victoria Roldán Méndez (Vamos Juntos), sostuvo: “Tenemos que lograr un consenso posible para escuchar los dos reclamos legítimos y, al mismo tiempo, generar una mejora en la dinámica urbana, a través del diálogo. Necesitamos la colaboración de todos para poder lograrlo; legisladores de todos los bloques, dirigentes, hinchas, vecinos y vecinas. Lo que se debatió hoy [por ayer] no es definitivo. Tiene que convocarse una audiencia pública, en la que van a poder participar todos”.