Un viernes diferente
Día extraño, vueltas esperadas: Borré y Nacho Fernández en River, Zárate en Boca
En medio de una crisis institucional que no atravesaba desde hacía siete años, a cinco días del cruce de octavos de final de la Copa Libertadores ante Flamengo, Racing debió salir a jugar en Tucumán un partido por la cuarta fecha de la Copa de la Liga Profesional de Fútbol. Lo hizo con un equipo con varios juveniles y con cuatro debutantes. Pero la suerte no cambió para la Academia: cuando iban sólo 21 minutos, Darío Cvitanich, que volvía después de una lesión en al aductor izquierdo, pidió el cambio, sentido en el mismo músculo, pero de la zona derecha; siete minutos después, Cristian Luchetti le atajó un penal al debutante Fabricio Domínguez y cuando el reloj marcaba 36, Lucas Melano puso en ventaja a Atlético de Tucumán, que se clasificó para la Zona Campeonato.
Otra vez, como en los cuatro partidos que jugó en este campeonato, Racing arrancó en desventaja. El resultado, en este contexto, parece lo de menos. Incluso el duelo clave ante Flamengo. Desde el lunes, el director deportivo y el último ídolo del club, Diego Milito, tiene decidido dejar su cargo. Anoche no estuvo en Tucumán acompañando al equipo, como suele hacer desde 2018. A su círculo íntimo y a su grupo de trabajo le confirmó que su ciclo en el club está terminado, convencido de que desde la comisión directiva “le soltaron la mano”.
“No hablé con Diego. El de hoy [por anoche] es un partido muy importante, la semana que viene hablaremos”, dijo el presidente Vïctor Blanco al bajar del micro en Tucumán. Cómo cerrará el año de Racing, y cómo será el 2021, es una pregunta para la que nadie tiene respuesta en el club. Cuándo serán las elecciones, cómo quedará conformado el oficialismo y cuál será el futuro de Sebastián Becaccece son los principales interrogantes. Hay una sola certeza: la salida de Milito movió los cimientos.
Después de la derrota ante Arsenal como local, Beccacece ya había tomado la decisión de enfocarse en la Libertadores. El martes dirigió la práctica de los titulares en Avellaneda, de cara al partido de la próxima semana ante Flamengo, y luego viajó a Tucumán, donde los esperaba un plantel compuesto por 16 juveniles. Alguna buena actuación podría decantar en un lugar en el equipo para la Copa, pero la expectativa estaba puesta en cortar la seguidilla de derrotas. No ocurrió: en un partido chato, en el que casi no pisaron las áreas, fue triunfo para Atlético Tucumán por 2 a 0.