LA NACION

“El VAR va a terminar mal: es un negocio, es un desastre que desfiguró al fútbol”

La dura posición de Lugano; el vínculo con Argentina, y Messi, Pelé y CR7, un podio singular

-

No podrán acusarlo de tibio a Diego Lugano. Fija posición y se somete a las consecuenc­ias. ‘Herramient­as de burócratas que poco a poco está matando la pasión’, escribió en su cuenta en Twitter. ¿A qué se refiere? “El VAR desfiguró al fútbol. Por empezar, no es un elemento para traer justicia, tiene un inicio político: después del Fifagate y para no perder toda la credibilid­ad, la FIFA creó el VAR de urgencia para intentar trasmitir transparen­cia. Ya empezó mal. Segundo, de tecnología no tiene nada, es un televisor que repite una imagen. Es un desastre. En realidad, multiplicó la incidencia del factor humano, multiplicó las dudas, el favorecimi­ento para los equipos fuertes, las sospechas, les da trabajo a cuatro o cinco jueces más y por eso al sindicato le encanta, y a la prensa le da tema para el circo. Y sale carísimo: a San Pablo le cuesta 50 mil reales por partido. Es un negocio, es un desastre y va a terminar mal”, aconseja desde la bronca.

Se calma. Vuelve a la cancha y hace memoria. “Jugué con ‘Ricky’ Centurión cuando él era pibe, con el ‘Negrito’ Chávez, con Buffarini me hice muy amigo, el ‘Patón’ Bauza me dirigió, con Luquitas Pratto…, pero tardé en tener compañeros argentinos. Ya de grande me tocó, después de los 30, recién en el PSG, y el primero fue el ‘Flaquito’ Pastore, que era un gurí. Después llegó ‘Pochito’ Lavezzi, y nos dimos muy bien, si bien somos hacia afuera de perfiles diferentes. En Málaga estuve con ‘Willy’ Caballero, con Martín Demichelis, con el ‘Conejo’ Saviola, y en Inglaterra me hice muy amigo de Claudio Yacob. Nos une un río y tenemos mucho en común”, rescata.

Pero lo uruguayos no nos quieren. ¿Es verdad? Lugano nació en 1980 y desde ahí construye una teoría. “En mi infancia y adolescenc­ia, en Uruguay solamente se consumía fútbol argentino. Y los domingos, a las 10 de la mañana, el Napoli de Maradona, Careca y Alemao, o la Lazio de Rubén Sosa y el Milan de los holandeses. En Uruguay se veía todo el tiempo para Argentina, por eso creo que nuestra generación les tomó como bronca… ¿Viste que se dice que el argentino hincha más por los uruguayos que nosotros por ustedes? Bueno, yo tengo mi explicació­n porque lo viví. Salvo las Copas América que ganamos en el 87 y el 95, siempre veíamos un fútbol argentino ganador, con grandes equipos. Entonces te comías todos los días en la TV un 90% de programaci­ón argentina y ustedes aparecían vanagloriá­ndose de sus victorias… Consumíamo­s solamente eso, entonces decíamos ‘la puta madre’; cuando jugaba Argentina contra Agapito o contra Sacachispa­s de Congo, queríamos que pierdan para no ver a los Tinelli y a Pergolini y a los Pettinato baboseándo­se… Es que nosotros no les ganábamos a nadie. Fue así, fue por eso, te lo aseguro”.

La televisión satelital cambió la percepción, siempre según Lugano.

“Luego, con acceso a todo el mundo, cuando empezamos a ver los programas chilenos, brasileños, mexicanos y españoles, la nueva generación cambió la manera de ser. Ahora, juega una final del mundo Argentina e hinchamos por Argentina. ¿Qué? ¡Vas a hinchar por Alemania o vas a hinchar por Chile! ¡Nooo! Cambió esa perspectiv­a cuando empezamos a consumir el mundo y ahora nosotros, cuando ganamos, podemos llegar a ser peores que un porteño cuando gana”, asume Lugano.

Recuerda algunos cruces con Carlos Tevez, o con Sebastián Domínguez, en los duelos San Pablo vs. Corinthian­s de otras épocas, pero ninguna batalla en particular con un argentino. ¿Y Messi? “Marcó época, toda nuestra generación va a decir ‘yo jugué contra Messi’. Yo gané un partido y perdí otro… Lo que ha hecho es espectacul­ar. Lo miro de manera global, lo desligo un poco de ser argentino, y veo la importanci­a que tiene como sudamerica­no a nivel mundial. Él ha sido muy valioso para la región, y siempre con una conducta ejemplar, ante la crítica y ante el elogio. Y como jugador, indiscutid­o… Mantenerse 15 años en el máximo nivel es de elegidos. En la historia solo hubo tres casos: Pelé, Messi y Cristiano. Es imposible mantener la intensidad mental tanto tiempo, y él lo hizo. Y lo logra porque es totalmente un fuera de serie”.

–¿Creés en el Mundia entre Uruguay-argentina 2030?

–Mirá…, al menos se lo dije a Gianni Infantino, en el Mundial de Rusia cuando nos cruzamos. Le dije: ‘Mirá, hiciste un Mundial en 2018 en Rusia, con poca historia de fútbol; en 2022 en Qatar, cero historia y todo dinero; en 2026 en Estados Unidos…, dinero. En 2030 tenés la oportunida­d de corregir todo esto y les toca a Uruguay y a la Argentina. La gente ya no quiere los lujos, quiere recuperar la esencia. Quiere caminar por Montevideo, por Buenos Aires o Rosario, y sentir que el país respira fútbol. Y sin hacer las grandes inversione­s que por ejemplo le exigieron a Brasil. Tiene que seguir siendo un gran negocio, pero sin perder la pasión. Si lo hacés en China seguís con lo mismo… Tenés que hacerlo en el Centenario mejorado, y en la Bombonera y el Monumental mejorados, pero con esa esencia. Para mí, la gente hoy está pidiendo volver a eso. Y más después de que ya habrán pasado tres mundiales..., digamos, raros, raros.

–¿Y te escuchó?

–Jajajaja…, me dijo ‘tenés razón, tenés razón’, jajaja…, pero como diciendo ‘mirá que corren otras cosas acá’. Qué se yo, por ahí tengo la bandera muy puesta. ¿No, bo’?

 ??  ?? Lugano siempre marca la cancha
Lugano siempre marca la cancha

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina