Los jubilados cobrarán dos bonos de $1500
El extra será cobrado en abril y en mayo si el haber no supera los $30.856
Será en abril y mayo para quienes perciban hasta $30.856 mensuales; en marzo, los haberes aumentarán 8,07%
Las jubilaciones y pensiones tendrán una recomposición de 8,07% en marzo, en tanto que quienes cobran hasta $30.856 mensuales percibirán dos bonos de $1500, en abril y en mayo. Así se anunció anoche tras una reunión entre el presidente Alberto Fernández; el ministro de Economía, Martín Guzmán, y la directora de la Anses, Fernanda Raverta.
Las jubilaciones y pensiones del sistema previsional nacional tendrán una recomposición de 8,07% en marzo en función de la nueva fórmula de movilidad, en tanto que quienes cobran hasta $30.856 mensuales percibirán dos bonos de $1500 en abril y mayo. La medida fue anunciada anoche a través de un comunicado de la Anses, tras una reunión en Olivos de la que participaron el presidente Alberto Fernández; el ministro de Economía, Martín Guzmán, y la directora ejecutiva del organismo de la seguridad social, Fernanda Raverta.
El reajuste de los ingresos también impactará en las pensiones no contributivas, en la Asignación Universal por Hijo (AUH) y en las prestaciones del salario familiar; en total, son cerca de 17 millones las prestaciones alcanzadas. El de marzo es el primer reajuste que se otorga a partir de la vigencia de la nueva fórmula de movilidad, basada en la variación de los salarios y de la recaudación de impuestos por beneficio que se derivan a la Anses.
Con el cobro del tercer mes de este año, el haber mínimo será de
$20.571. En abril y mayo quienes están en ese grupo percibirán $22.071. Y el haber máximo será de $138.426. La AUH llegará a $4017 y los montos de la asignación por hijo que cobra un grupo de asalariados y monotributistas serán de $842, $1636, $2708 y $4017, dependiendo de los ingresos familiares. La Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) pasará a $16.457 (sin incluir los bonos).
El aumento determinado por la fórmula no alcanzará para compensar los efectos de la inflación y los haberes de quienes no reciban adicionales volverán a perder poder adquisitivo; en este caso, tendrían una caída trimestral en términos reales superior al 3%. Según el comunicado oficial, quienes recibirán los dos bonos son el 70% del total de jubilados y pensionados. En el debate legislativo que se dio a fines de
2020, el Gobierno se negó a incluir una cláusula de garantía de cobertura frente a la inflación, una variable que no está contemplada en la modalidad de cálculo.
Para determinar el porcentaje de incremento, la fórmula de la ley
27.609 se basa en la evolución interanual de la recaudación de impuestos que tienen como destino total o parcial a la Anses, por beneficio, y en la variación trimestral de los salarios, según uno de dos indicadores (el que arroja el aumento más alto): el Índice de Salarios que difunde el
Indec, o la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte), de la Secretaría de Seguridad Social. Para el reajuste de marzo se contemplan los datos del último trimestre del año previo y, en este caso, se tomó como referencia salarial el dato del Indec.
Según se estima, en este primer trimestre de 2021 la inflación sería de 11,9%; esa cifra surge de tomar el 4% de variación del índice de precios que hubo en enero, según el Indec, y agregarlasproyeccionesparafebrero y marzo, según el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que publica el Banco Central. Así, la variación real de los haberes para quienes no reciban compensación sería negativa y de 3,4%.
Las subas por movilidad alcanzan a poco más de 6,8 millones de jubilaciones y pensiones (cobradas por 5,7 millones de personas), 1,6 millones de prestaciones no contributivas y más de 8,5 millones de asignaciones por hijo, entre las del sistema formal y las del beneficio universal.
Según dispone la ley, luego de la suba de marzo habrá otras en junio, septiembre y diciembre. La del último mes del año incluye en su cálculo la observación de la variable que actúa como el tope de la variación anual de las prestaciones: el reajuste no podrá superar en más de un 3% al incremento que haya tenido la recaudación total de recursos destinados a la Anses.
El índice de movilidad tiene impacto sobre los aportes previsionales que hacen los autónomos y sobre el tope salarial para calcular los descuentos con destino a la seguridad social. En el primer caso, los montos mensuales en las categorías I y II pasarán a ser de $3695 y $5173, respectivamente, mientras que la remuneración máxima para el cálculo de los aportes será de $225.177, en lugar de los $208.357,30 actuales.
Durante 2020 no rigió ninguna fórmula y los aumentos fueron dispuestos por decreto y por decisiones discrecionales. Así, mientras que por el cálculo dejado sin efecto habría correspondido un alza anual de 42% para todos, en la práctica las subas fueron de entre 24,3% y 35,3%, con pérdidas de poder adquisitivo de entre 0,6% y 8,7%.