En el cuarto día de protestas, la movilización se trasladó a Clorinda
La segunda localidad de Formosa enfrenta una crisis económica por el cierre de la frontera con Paraguay; en la capital hubo comercios que desafiaron las restricciones
POSADAS.– Mientras Gildo Insfrán se encontraba en Buenos Aires, en Formosa se realizó una nueva jornada de protestas contra las duras medidas sanitarias implementadas ante la pandemia.
El epicentro fueron la capital provincial y Clorinda, la segunda ciudad de la provincia y la que sufre una enorme crisis social y económica producto del cierre de la frontera con Paraguay. Nadie en Clorinda puede desplazarse a otros lugares de la provincia sin hacer una cuarentena de 14 días.
Las manifestaciones arrancaron a la mañana con una nueva marcha en la capital de la provincia, donde el viernes las manifestaciones incluyeron actos de violencia de la policía y balazos de goma a varios manifestantes.
“Esta vez todo se desarrolló con tranquilidad”, explicó a LA NACION Adrián Bogado, una de las caras visibles de la oposición y excandidato a gobernador en las elecciones de 2019. Anoche llegó la presidenta de Pro, Patricia Bullrich, para darles visibilidad a las protestas y hoy realizó una conferencia de prensa antes de acompañar la marcha por las calles céntricas de Formosa. “Lamentablemente el gobierno nacional todavía no se hizo eco de lo que ocurre en Formosa. El Presidente debería haber llamado a Insfrán para pedirle que cumpla con la Constitución. Acá hay un encubrimiento hacia el gobierno y el régimen”, disparó Bullrich, flanqueada por el diputado Waldo Wolff y el senador Luis Naidenoff en la Plaza
San Martín. Desde el jueves, cuando Formosa decretó nuevamente el regreso a fase 1 de la cuarentena en la capital, se iniciaron las protestas, que el viernes fueron reprimidas con balazos de goma.
En las calles céntricas del centro capitalino algunos bares decidieron abrir desafiando abiertamente las medidas sanitarias dispuestas por el Comité para la Emergencia Covid-19. Como medida preventiva, las autoridades decidieron disponer un vallado de seguridad a 100 metros alrededor de la Casa de Gobierno.
Mientras tanto, al mediodía, en la conferencia de prensa número 365 (una por día), las autoridades del Comité para la Emergencia Covid-19 ratificaron todas las medidas sanitarias. Sin embargo, se mostraron abiertas a dialogar con los comerciantes para discutir compensaciones ante el cierre obligado por el regreso a la fase 1.
El ministro de Desarrollo Humano provincial, Aníbal Gómez, sostuvo que “las medidas sanitarias se han tomado en base a la experiencia que se tiene de la respuesta que hay que dar cuando hay un aumento excesivo de números de casos registrados en un lapso corto de tiempo”.
En referencia al planteo de distintos sectores para flexibilizar las restricciones, el funcionario indicó que “otra cosa diferente es lo que reclaman algunos comerciantes sobre cómo los afectan estas medidas”, por lo que señaló que “hay conversaciones con el Ministerio de Economía para establecer las pautas de cómo va a llegar la ayuda a esa gente”.