Las Sputnik V envasadas en la Argentina recibieron la autorización de Rusia para su distribución
Falta el permiso para la esperada segunda dosis; lo anunciaron Fernández y el empresario Figueiras
El presidente Alberto Fernández y el titular del laboratorio Richmond, Marcelo Figueiras, anunciaron ayer que recibieron la autorización de Rusia para las vacunas Sputnik V que fueron envasadas en el país.
El anuncio se hizo a través de un mensaje grabado de seis minutos en el que Alberto Fernández y el titular de la farmacéutica contaron los detalles de los próximos pasos.
Las vacunas se encuentran en la Argentina, pero necesitaban la autorización de Rusia. Ahora resta el permiso de Anmat para su distribución en el territorio nacional.
Según Figueiras, el primer lote autorizado es de 140.625 dosis.
“A la brevedad se irán liberando el resto de las dosis que fuimos fabricando”, sumó el empresario.
Además detalló que ya cuentan con 1.362.125 dosis del componente 1 y 1.005.000 dosis del componente 2.
La falta de esta última provocó demoras en la aplicación de la segunda dosis de la Sputnik V. Por tal motivo, el laboratorio necesitaba la autorización de Rusia para suministrar nuevas partidas de segunda dosis de Sputnik V en la Argentina.
Por su parte, Fernández afirmó que actualmente la Argentina está dando “un paso importantísimo” en el desarrollo de vacunas contra el coronavirus y destacó que lo hizo gracias a “una empresa privada, que puso la tecnología” en función de esta producción.
Además, sostuvo que este es “el mejor homenaje” que se puede hacer a los 100.000 fallecidos por Covid-19 en un “día triste”.
“Más allá de lo que podamos ayudar nosotros desde el Estado el mérito es tuyo, que invertiste para que la Argentina esté en condiciones de producir lo que está produciendo y de suministrar las vacunas que tanto necesitamos”, elogió Fernández.
El último paso para que las vacunas lleguen a las provincias es el aval final de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat).
A cuatro semanas de que se terminara de producir un lote inicial de 448.625 dosis del primer componente de Sputnik V en la Argentina, el instituto Gamaleya, de Rusia, dio luz verde para que las vacunas puedan ser entregadas a las autoridades nacionales para comenzar a aplicarlas.
El 18 de junio pasado, a través de su cuenta de Twitter, el laboratorio Richmond había anunciado: “Finalizamos la producción de las primeras 448.625 dosis de la vacuna. Las mismas fueron enviadas al operador logístico quedando a la espera de la liberación final por parte de la Anmat y del instituto Gamaleya”.
Dos semanas después el laboratorio de Marcelo Figueiras informaba: “En el día de hoy, finalizamos la producción de 550.000 nuevas dosis del primer componente de la vacuna Sputnik V. Seguimos trabajando con mucho empeño y máxima energía con el compromiso de abastecimiento local poniendo a disposición la mayor cantidad de vacunas”.
Cuatro días más tarde, informaba que se sumaba a la producción las primeras 153.441 dosis del segundo componente de la vacuna Sputnik V.
El fideicomiso
Esta semana, la Comisión Nacional de Valores (CNV) aprobó el fideicomiso financiero para financiar la construcción de la planta del laboratorio.
Los fondos que logre captar el proyecto, que aspira a recaudar de los inversores entre US$70 millones y US$85 millones, serán destinados a una nueva planta de 1500 m2 para la fabricación de la Sputnik V y de productos sólidos orales de alta potencia, indicados para pacientes con diagnósticos de oncología y esclerosis múltiple.
Además del interés de privados, el Estado argentino podría tener algún tipo de participación; el Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE), por ejemplo, ya había confirmado a través de su presidente, José Ignacio de Mendiguren, que estaba estudiando cómo colaborar para facilitar financiamiento del emprendimiento.
Marcelo Figueiras viajó a Italia días atrás para iniciar conversaciones con fabricantes de maquinaria para la planta y luego voló a Moscú para agilizar la aprobación de los primeros lotes de vacunas Sputnik envasadas en el país, que habían quedado bajo análisis del centro Gamaleya.
Desde Italia, Figueiras había transmitido su confianza en lograr la autorización ayer para el primer lote de vacunas.
A partir de este momento, las vacunas, que ya están en la Argentina congeladas y listas, serán puestas a disposición del Gobierno, que podrá empezar a distribuirlas a los vacunatorios, previa autorización de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat).