LA NACION

Dura crítica de EE.UU. a la política económica de Fernández

El Departamen­to de Estado apuntó a los controles de capital y de precios, y a las restriccio­nes comerciale­s

- Rafael Mathus Ruiz CORRESPONS­AL EN EE.UU.

WASHINGTON (De nuestro correspons­al).– En una cruda descripció­n sobre el clima para invertir en la Argentina, el gobierno de Estados Unidos señaló que los controles de capital –el cepo, en la jerga local–, las restriccio­nes al comercio y los controles de precios amplían las distorsion­es en la economía y obstaculiz­an las inversione­s. Además, estimó que la incertidum­bre económica, las políticas intervenci­onistas, la alta inflación y el estancamie­nto económico “han impedido que el país maximice su potencial”.

El duro diagnóstic­o quedó plasmado en un informe del Departamen­to de Estado, llamado “Declaracio­nes sobre el clima para las inversione­s”, en el cual vuelca su visión sobre el ambiente para los negocios en más de 170 países que son mercados potenciale­s o destinos de inversione­s para compañías norteameri­canas. El trabajo, que se realiza todos los años, incluye una descripció­n de las barreras que pueden encontrar las empresas para invertir en un país, las principale­s medidas y prioridade­s de la política económica de los gobiernos, y un pantallazo de las leyes y reglas que marcan el pulso de la economía local.

WASHINGTON.– En una cruda descripció­n sobre el clima para invertir en la Argentina, el gobierno de Estados Unidos dijo que los controles de capital –el cepo, en la jerga local–, las restriccio­nes al comercio y los controles de precios amplían las distorsion­es en la economía y obstaculiz­an las inversione­s. Además, señaló que la incertidum­bre económica, las políticas intervenci­onistas, la alta inflación y el estancamie­nto económico “han impedido que el país maximice su potencial”.

El diagnóstic­o quedó plasmado en un informe del Departamen­to de Estado, llamado “Declaracio­nes sobre el clima para las inversione­s”, en el cual vuelca su visión sobre el ambiente para los negocios en más de 170 países que son mercados potenciale­s o destinos de inversione­s para compañías norteameri­canas. El trabajo, que se realiza todos los años, incluye una descripció­n de las barreras que pueden encontrar las empresas para invertir en el país, las principale­s medidas y prioridade­s de la política económica de los gobiernos, y un pantallazo de las leyes y reglas que marcan el pulso de la economía local.

“La Argentina presenta oportunida­des de inversión y comercio, particular­mente en agricultur­a, energía, salud, infraestru­ctura, tecnología de la informació­n y minería”, destaca en la primera línea del resumen ejecutivo del capítulo destinado al país. “Sin embargo –matiza luego–, la incertidum­bre económica, las políticas intervenci­onistas, la alta inflación y el estancamie­nto económico persistent­e han impedido que el país maximice su potencial.”

El informe distingue a los trabajador­es argentinos “entre los más educados y capacitado­s de América Latina”, y pondera que “los inversores extranjero­s suelen citar la mano de obra calificada de la Argentina como un factor clave en su decisión de invertir [allí]”. Pero indica que las regulacion­es del mercado como “los controles de capital, las restriccio­nes comerciale­s y los controles de precios aumentan la distorsión económica que obstaculiz­a el clima de inversión en el país”, y que las empresas apuntan a impuestos altos, impredecib­les y leyes laborales “rígidas”.

En 2020, el organismo que ahora conduce Antony Blinken había dado cuenta de un cambio de clima en la Argentina luego del triunfo del Frente de Todos en la elección presidenci­al del año anterior, al indicar que “las reacciones del mercado a las elecciones presidenci­ales argentinas de 2019 profundiza­ron la crisis económica del país, estancando los esfuerzos de reforma y provocando un retroceso de algunas políticas de crecimient­o impulsadas por el mercado y la imposición de controles de capital y exportacio­nes”.

El informe de la burocracia diplomátic­a de Estados Unidos deja plasmadas varias advertenci­as que marcan analistas en Wall Street y en Washington, y también economista­s en la Argentina. re marca, por ejemplo, que el “noveno default soberano” y la “insolvenci­a autodeclar­ada” ha limitado el acceso a los mercados de capitales, y que la estrategia del Gobierno de imprimir dinero con el Banco Central para financiar el aumento del gasto “puede obstaculiz­ar sus esfuerzos por contener la inflación y mantener un tipo de cambio estable a corto plazo”. El dólar blue ha ampliado la brecha con el dólar oficial y a acercarse al pico que marcó a fines del año anterior.

“Tanto las empresas nacionales como las extranjera­s señalan con frecuencia una carga fiscal alta e impredecib­le y leyes laborales rígidas, que dificultan la respuesta a las condicione­s macroeconó­micas cambiantes, como obstáculos para una mayor inversión en la Argentina”, detalla el trabajo, al hacerse eco de reclamos añejos de empresas extranjera­s y locales sobre el manejo de la política económica. El informe recapitula los primeros pasos del Gobierno y la respuesta a la pandemia. La administra­ción de Alberto Fernández, señala, revirtió las medidas de austeridad fiscal del gobierno de Mauricio Macri, suspendió el programa con el Fondo Monetario Internacio­nal y “declaró insostenib­les los niveles de deuda pública”, y, ya luego del golpe del coronaviru­s, puso en marcha una serie de “medidas de alivio” enfocadas en los trabajador­es informales y las pequeñas y medianas empresas. El confinamie­nto para evitar la propagació­n del virus provocó una caída en la actividad del 10%, “alcanzando niveles similares a los de la crisis económica de 2002”, rememora.

Este año el trabajo ofrece otros datos sobre el brutal golpe de la peor crisis de salud global en un siglo. Dice, por ejemplo, que 90.700 locales y 41.200 negocios debieron bajar la persiana el año pasado, según la Confederac­ión Argentina de la Mediana Empresa (CAME), provocando la pérdida de 185.300 empleos.

“La pandemia de Covid-19 profundizó la recesión económica plurianual del país. Esto llevó al gobierno a intensific­ar los controles de precios, de capital y del comercio exterior, haciendo retroceder algunas de las políticas de mercado de la administra­ción anterior”, indica el trabajo, que además apunta que en mayo de 2020 el Gobierno logró reestructu­rar bonos bajo legislació­n extranjera por US$65.000 millones, y bonos bajo legislació­n local por US$42.000 millones.

El informe señala que las prioridade­s de política económica del Gobierno para este año son resolver la deuda con el Fondo, controlar la inflación, y responder a la pandemia del coronaviru­s “brindando ayuda financiera a los sectores más vulnerable­s de la sociedad”.

“El gobierno de Fernández no tiene una mesa redonda de negocios formal u otro diálogo establecid­o con inversioni­stas internacio­nales, aunque sí se relaciona con empresas nacionales e internacio­nales”, apunta el trabajo, ya en el apartado específico sobre la apertura y las restriccio­nes a la inversión extranjera. Luego, reitera: “Las regulacion­es al mercado como los controles de capital, las restriccio­nes comerciale­s y los controles de precios aumentan la distorsión económica que obstaculiz­a el clima de inversión”.

 ?? Kevin Dietsch/getty images ?? Blinken, secretario de Estado de EE.UU.
Kevin Dietsch/getty images Blinken, secretario de Estado de EE.UU.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina